Dancing with Demi Lovato - (Lesbian Story) PAUSADA

Capítulo #12 - Llévame a tu casa

Narra Demi

Pasando las doce, luego de haber estado bailando con Matthew y Sirah, me dirigí a la sala porque necesitaba descansar mis pies. Revisé mi celular y vi que había llegado un mensaje de Sam. Hacía horas que la había perdido de vista, así que me apresuré en abrirlo, era una foto donde prácticamente me estaba mostrando sus senos y al mirarla de cerca, noté que se veía muy tomada.

La busqué por toda la casa y después de un rato, Dani me dijo que la había visto subir las escaleras que quedaban cerca del baño. Rápidamente me dirigí hacia allá y sus palabras de auxilio me hicieron correr hacia ella.

Con todas mis fuerzas, arremetí con un puñetazo la cara del hombre que la tenía entre sus brazos tratando de besarla. Ese hombre ni siquiera podía pararse del suelo y por un momento me sentí orgullosa de mis clases de kickboxing. Quise seguir golpeándolo, pero Sam me lo impidió, entonces decidí ignorarlo y abrazarla. La pobre estaba temblando y su corazón estaba muy agitado.

Samantha: (con la voz quebrada y todavía ebria) ¡Gracias por salvarme!

Demi: Ya pasó, ¿estás bien?

Samantha: Sí...

Demi: Será mejor que te lleve a tu casa, necesitas descansar.

Uno de los chicos me ayudó a subirla en mi auto y minutos después se quedó dormida, al parecer el alcohol y la situación vivida la habían dejado exhausta. Cerca de las dos de la mañana, ya habíamos llegado a su casa, ella no se encontraba bien, no sabía cuánto había tomado, pero definitivamente no tenía conciencia de sus actos.

Demi: Hemos llegado, dame tus llaves.

Samantha: ¿Qué llaves?

Demi: (respiré profundo) Las de tu apartamento.

Samantha: Espera...

Intentó inútilmente buscar en su cartera, pero al parecer no las encontró. La ayudé a buscarlas y efectivamente, no había ninguna llave adentro.

Demi: Llama a la chica que vive contigo para que te abra.

Samantha: (rió) ¿Erika? Ella pasará dos noches fuera de casa.

Demi: Y ahora, ¿qué hacemos Samantha? (pregunté algo enojada, estaba comenzando a desesperarme)

Samantha: No lo sé. (respondió mientras se reía como si se tratara de algo divertido)

Demi: (le agarré el rostro para que me mirara) Oye, esto no es gracioso.

Samantha: Podrías llevarme a tu casa. (volvió a reír y esta vez se abrazó a mi cuerpo porque según ella, tenía mucho frío)

Su idea no era mala pero el hecho de llevarla a casa resultaba muy tentador para mí. Además, no solía llevar personas a mi casa a menos que fueran mis amigos, familia o miembros de mi equipo y aunque ella formaba parte de él, aun no la conocía lo suficiente.

Lo pensé un poco, no tenía opciones, no podía dejarla a su suerte y sobre todo en esas condiciones.

Demi: Muy bien, Sam... te llevaré a mi casa.

Faltando 20 minutos para las 3 de la mañana, logramos llegar a mi casa. Estacioné el auto, la agarré por la cintura y mientras subíamos las escaleras para llevarla a la habitación de visitas, me pidió que me detuviera.

Demi: ¿Qué pasa?

Samantha: Quiero... vo... vomitar

Demi: Ni se te ocurra hacerlo a....

Antes de terminar de decirlo, ella ya había vomitado toda mi escalera, pintándola de color rosa y dejándola con un olor desagradable.

Demi: ¡Demonios, Samantha! (dije enojada)

Samantha: Lo... siento.

Estaba sacándome de mis casillas. La llevé a la habitación, la ayudé a enjuagarse la boca y la senté en la cama. Se había ensuciado el vestido, MI VESTIDO, así que tenía que cambiarla antes de acostarla.

Samantha: (riendo divertida) ¡Quieres aprovecharte de mí, eh!

Demi: (intentando quitarle el vestido) Samantha, deja de moverte y coopera, por favor.

Samantha: Está bien Demi. (me dio la espalda y tomó su cabello con ambas manos) Desabrocha el botón del cuello y baja el cierre.

Demi: De acuerdo.

Accedí y comencé a hacer lo que me pidió. Primero alcé un poco la parte superior del vestido para así poder desabrocharlo. Luego bajé lentamente mis manos hacia su cintura en donde el cierre se quedó atorado y pasé trabajo para bajarlo.

Esta situación me tenía frustrada, confundida e increíblemente excitada. La idea de tenerla desnuda frente a mí, me hacía desearla. Ella se volteó y dejó caer el vestido al suelo, quedando solo en ropa interior. La miré de arriba hacia abajo y tuve que controlar mis impulsos, tratando de pensar en otra cosa, sin embargo, ella decidió jugarme sucio.

Samantha: (se mordió el labio inferior) ¿Por qué me miras así?

Demi: Eh... así ¿cómo? (respondí nerviosa)

Samantha: (volvió a morderse el labio) Con deseo

Demi: Deja de morderte el labio. (murmuré)

Samantha: (rió divertida) ¿Por qué?

Demi: Porque podría querer besarte.

Samantha: Y... ¿por qué no lo haces?

Demi: Porque estás ebria.

Samantha: No estoy ebria. (se acercó a mí, casi a punto de rozar nuestros labios)

Demi: (reaccioné rápido y me alejé) Sí lo estás... a ver, trata de hacer una sentadilla.

Solté una carcajada cuando intentó hacerla y tuve que sostenerla porque casi se cae. La ayudé a ponerse una t-shirt mía y la senté de nuevo en la cama.

Demi: Anda, acuéstate.

Samantha: ¿Te duermes conmigo?

Demi: No creo que sea buena idea.

Samantha: Por favor, esta cama es muy grande y me da miedo. (hizo un puchero, pareciéndose a la típica carita del burrito de Shrek y no pude negarme)

Demi: (solté otra carcajada) Bien, bien... solo hasta que te quedes dormida.

Se acostó y yo hice lo mismo. Se acercó a mí, y se abrazó a mi cuerpo haciendo que me estremeciera. Esta mujer estaba despertando cosas en mí que hacía mucho tiempo no sentía.

Samantha: Dem... (susurró)

Demi: ¿Sí?

Samantha: ¿Me regalas un unicornio?

No pude contener la risa, lidiar con borrachos era cosa seria, así que decidí seguirle la corriente.

Demi: ¡Claro! Te regalaré uno, hasta dos.

No pasó mucho tiempo y Sam se había quedado dormida. Aunque estaba cansada, no logré dormir. Me dediqué a observarla, su cabello alborotado, sus labios entreabiertos y sus leves ronquidos, hacían que se dibujara una sonrisa en mi rostro. Acaricié su piel, y rápidamente sentí cómo se erizaba la mía, sentía un cosquilleo inexplicable cada vez que la tenía cerca.

Y fue entonces cuando lo supe, quizá era muy pronto para decir que me había enamorado, pero podía asegurar que esta chica me gustaba, y mucho. 

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Disculpen la demora, aquí les dejo un capítulo más, espero que les guste! Nos vemos en el próximo! 

No olviden dejar su voto y su comentario!

Xoxo, D