SAVAGE

9 de Marzo de 1917, Gyeongju, KOR.

Ahora el castaño se encontraba molesto ya que por más que se esforzaba no podía igualar a sus compañeros de manada, y es que el haber pasado los últimos dos años con ellos había logrado desarrollar ciertas habilidades pero no en igual manera ya que los otros lobos eran mucho más rápidos y con una mejor visión nocturna que el al momento de cazar el alimento para la manada.

Luego de estar jugando con los demás en el bosque, correteando, mordiendo y gruñendo como generalmente lo solían hacer, se escucharon pasos, y es que en los últimos días los humanos cada vez se estaban acercando a su territorio y nadie dentro del grupo podría hacer nada.

Al escuchar como se acercaban las personas, la manada decidido tomar su posición para poder salir de este lugar, logrando dejar a los lobos con mayor edad delante seguido de la única hembra que se encontraba con ellos, luego estaba el pequeño humano que ahora formaba parte del grupo, ya que al parecer por su estatura y peso no podía ser capaz de defenderlos en un ataque, por ultimo se encontraban los dos lobos jóvenes de la familia estos siendo custodiados por el líder de la manada.

Emprendieron camino pero, logro desconcentrarlos un estruendo, el cual procedía justo detrás de ellos, todos optaron por correr hacia su refugio el castaño subió encima de la loba para lograr huir más rápido de ese lugar y todos volvieron a apresurar su paso, excepto uno de los lobos más jóvenes que decidió esperar para observar que era lo que ocurría, fue cuando se percató que uno de los humanos contaba con un artefacto en sus manos, el cual era el causante de los sonidos, y no pudo continuar su marcha ya que el joven de ojos felinos, tez blanca, semblante inexpresivo y cabello negro jalo el gatillo del arma.

Fue hasta unos pocos metros más adelante que el ardor y dolor que comenzó a sentir el lobo lo obligo a recostarse entre las hierbas, emitiendo chillidos de dolor, siendo captados por el alfa, cuando este se decide regresar y buscar al mas joven de los lobos pudo observar como el pelaje blanco al igual que la nieve se encontraba con una mancha roja, la cual con el paso del tiempo se volvía cada vez más grande y la respiración de este se volvía más lenta conforme los segundos pasaban, esto indicando que el tiempo de vida del lobo estaba por llegar a su fin.

La frustración, el dolor y miedo al observar como los chillidos del dolor del lobo iban tornándose cada vez mas bajos hasta que por fin cerro sus ojos y el cuerpo de aquel animal parecía haber entrado en un sueño profundo, del cual ya no podría despertar jamás.

El líder de la manada se giró rápidamente hacia el causante de la muerte de aquel joven lobo, le mostro los colmillos afilados a aquel joven pálido el cual siquiera pareció inmutarse por la actitud de ataque del lobo, este se hecho a correr hacia el para buscar un poco de equidad en las situaciones pero no fue tan rápido como espero ya que luego de un disparo en la pata hacia el lobo logro que este continuara su andar mas lento pero igual con el mismo objetivo de dañar a aquel humano.

El humano solo apunto hacia el lobo, formo una sonrisa hacia este para posteriormente lanzar un disparo hacia el animal.

Los segundos siguientes todo fue solo silencio en el bosque, solo se escucharon los pasos de el cazador Min de regreso hacia su casa, satisfecho por haber agregado dos criaturas más a su lista de caza.

Y no se detendría hasta acabar con la manada completa.