Capitulo 51: Ella es mi fortaleza.

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Pienso en él, y pareciera como si fue ayer cuando lo observe sonreír,  lo escuche reír, y hablar lleno de vida pese a estar en su situación.

Pareciera como si fuera ayer que me encontraba pensando que él iba a estar el día de mi graduación, pese al miedo que sentía, eso pensaba ya que tenia la esperanza de verlo allí, sonriéndome, diciéndome cuan orgulloso esta de mi.

Ayer él estaba conmigo, lo sentía así. Pero la realidad era otra, y hoy lo íbamos a despedir. Estábamos en su funeral, el padre estaba hablando, pero no era capaz de prestarle atención a sus palabras. Mis ojos estaban en el cajón, la vista se me nublaba a causa de las lágrimas.

Si, asi es la vida, naces, vives, y mueres. Es lo que muchos dicen, pero nadie te prepara para el momento en el cual un ser amado se va. Nadie piensa en como seria, y como lo afrontaría. Simplemente pasa, y tu mundo se te derrumba. Es muy extraño pensar en todos los momentos vividos con mi padre, para ahora ponerle un fin. Un punto final. Es extraño, pero mas que eso es triste.

Los recuerdos con él vivirán por siempre en mi. Inclusive las peleas. Esas discusiones, donde uno de los dos terminaba aflojando y pidiendo disculpas, aprendiendo mas del otro y conociéndonos. Además de  los recuerdos, también tengo cosas de él, y no me refiero a lo material, me refiero a sus enseñanzas y a como soy en personalidad. 

Muchas cosas nos quedan cuando un ser amado se va. Cosas que están conservadas en la memoria, y en el corazón. Momentos que no se olvidan. Que triste son esas familias que se pelean por quien se queda con cada material de la persona difunta, es como si hubieran esperado a que su muerte llegara y así adueñarse de sus cosas. Influyen mas lo material, que los recuerdos, y lo que esa persona significo, y significara siempre.

Por suerte en mi familia eso no esta pasando. Todos estamos observando el cajón en silencio, mientras el padre sigue hablando, todos lloramos mientras recordamos quien fue mi padre y quien sera siempre en la vida de cada uno.

Heather estaba a mi lado sosteniendo mi mano con una fuerza leve. La observo y estaba observando el cajón, como todos, y tenia lágrimas en sus ojos. Nota que la observo y me mira. No hacemos gesto alguno, pero nos hablamos con la mirada, o eso sentí yo. Al lado de ella estaban Andrew, Ayleen, Ben y Connor. Con la misma mirada de Heather, les dije que no era necesario que vengan, pero insistieron.

El padre da por finalizada su bendición, y tras el amen, cada uno se levanta a despedir a mi padre dejando una rosa en su cajón.

Quiero ser el ultimo, así que me quedo sentado mientras todos se dirigen hacia allí, y a pasar por mi lado me apretaban el hombro como señal de consuelo.

Lizzie y mi madre se acercaron tomadas de la mano, mi hermana le deja un dibujo. Me lo había mostrado antes de venir aquí para preguntarme si a él le gustara, en el dibujo estábamos todos, inclusive Heather. Pero mi padre tenia algo que ninguno tenia, alas. Le dije a Lizzie que papá lo amaría.  Me dolía ver a mi hermana así, me dolía que pasara por esto siendo tan pequeña, pero Lizzie a su manera es fuerte. Estoy seguro que se convertirá en una gran mujer. Mi madre seca sus lágrimas, y Lizzie hace lo mismo. Me observan y suspiro. Era mi turno.

Nos ponemos de pie con Heather, y caminamos hacia allí. Sentía mis pasos pesados, pero llegue a estar cerca del cajón. Heather deja una rosa encima del mismo, y cierra los ojos como si estuviera diciéndole un mensaje mental, luego de unos segundos los abre y me mira.

- Me gustaría estar solo -susurro, y las tres mujeres mas importantes en mi vida, se alejan sin decir nada. Me acerco mas al cajón y pongo mi mano sobre él- Te fuiste demasiado pronto -niego con la cabeza mientras las lágrimas caían- Te imaginaba en mi graduación ¿Sabes? Pero... quizá de alguna forma estés allí -me encojo de hombros- Te fuiste y me dejaste con muchas cosas por decirte, y no se que hacer con todas estas palabras que me hubiera gustado decirte -las lágrimas seguían cayendo como si no quisieran parar- ¿Que sentido tiene decírtelas ahora?  Tal vez hasta es una locura que te este hablando como si me fueras a sonreír y decir que todo estará bien -niego con la cabeza- Solo... solo gracias por hacerme sentir siempre tu hijo, y jamas tratarme como si fuera un intruso en la familia -sonrío y seco mis lágrimas. Respiro profundamente y miro al cielo- Adiós, papá. Adiós por ahora.

Save her (2014)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora