•INVISIBLES E INVENCIBLES• -Taekook-

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Más que un apartamento, se podría considerar una habitación. Todo en un espacio reducido. Una cama al fondo, un sofá a la izquierda, cerca de la entrada, con una estantería al lado llena de libros. Una mesa delante del mismo, la puerta hacia el baño a la derecha y la cocina un poco antes que el baño. A Jungkook le encantaba.

Él no era nada pretencioso. Así, acogedor y pequeño se sentía bien. Tampoco era un hoyo, él se encargaba de mantenerlo presentable.

Todavía no podía creerlo. Aceptado en "LY". Una locura.

Realmente no se que vió aquel hombre en él que los demás no, pero tendría que esforzarse para que no dejara de verlo. A fin de cuentas, estaba ahí por él, se preguntaba qué tanta autoridad tenía aquel rubio.

Acarició sus libros por el lomo y tomó el primero que le pareció que no había repetido las veces suficientes. Descartándolo de inmediato cuando se dio cuenta de que si no dormía lo necesario, no rendiría bien al día siguiente.

Su primer día en la editorial de sus sueños.

Y así se fue Jungkook a dormir, imaginándose frente a manuscritos y olor a papel.

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-Los manuscritos son enviados mediante correo electrónico. Una persona se encargará de repartirlos y reenviarlos a las cuentas personales de cada uno de los estudiantes en prácticas. La tuya tiene la sesión iniciada. Cambia la contraseña en cuanto comiences a trabajar con ella. ¿Alguna pregunta?

No. Ninguna. Claro que ahora todo se realizaba vía internet. Él que pensó que podría sentir en sus manos aquella historia en la que debería meterse... iluso y tradicionalista Jungkook.

-No, muchas gracias.

Aquella secretaria seguía sin darle buena espina.

Se sentó delante de "Su ordenador" y cambió la contraseña.

Kim Taehyung:
Bienvenido a "LY" oficialmente. Espero que sea eficiente, señor Jeon.

Jungkook casi carcajea. Hasta se tomaban la molestia de dar la bienvenida a los practicantes. Vía internet, claro.

Kim Taehyung:
Deberías contestarle a tu jefe.

Eso sí que era nuevo. ¿Se refería directamente a él? Había dejado las formalidades de lado y aquel email estaba en su cuenta. Contestaría entonces.

Jeon Jungkook:
Buenos días, ¿Jefe? No se preocupe, daré lo mejor de mi.

Kim Taehyung:
Confío, Jungkook. Y sí, "jefe", créeme que a la única persona a la que no quieres decepcionar, es a mi.

Jeon Jungkook:
Intentaré mejor no decepcionar a nadie, señor Kim.

Jeon Jungkook:
Jefe. Perdón.

Kim Taehyung:
Puedes llamarme Señor Kim.

Y Jungkook no entendía. ¿Por qué a él le hacían este control? ¿Habrá sido el único? "Nah" pensó. Si algo no era Jungkook, era especial. Él lo sabía.

Esperó a que llegaran sus primeros manuscritos a evaluar y esa fue su mañana.