16

417 40 10
                                    

-¡Joshuaa!- una voz femenina a un tanto de distancia llamó nuestra atención al entrar a la casa repleta de gente bailando y emborrachándose. Josh giró la vista a dónde provenían los gritos mientras yo seguía observando a todas las personas y la enorme lujosa casa que destruían poco a poco.

Pronto, una chica pelirroja de grandes ojos con un vestido negro estaba a nuestro lado, saludado a Josh con un abrazo lo que provocó que me separe un poco de él ya que estaba literalmente pegado a su brazo para que no me deje solo.

Me los quedé mirando saludarse por unos segundos mientras la muchacha se mostraba muy feliz por verlo. Tal vez un tanto por estar bajo el efecto de algo.

Pronto Josh me señaló en señal de presentación y giró hacia mí a lo que tuve que cambiar mi rostro serio a una sonrisa para demostrar simpatía y levanté la mano en gesto de saludo porque seguramente mis palabras no se oirían por el fuerte sonido de la música.

-Tú debes ser Tyler ¿Verdad?- preguntó bastante exaltada por la adrenalina del lugar. Asentí en respuesta mientras Josh me miraba con una sonrisa de orgullo. -Bueno pues, bienvenido a mi fiesta pequeño, espero que la disfrutes- dijo para volver a girarse a Josh -y tú también lindo, búscame cuando quieras-  dio media vuelta para irse pero al dar dos pasos en dirección contraria a nosotros giró bruscamente su torso para gritarme -¡por cierto, linda camisa muchacho!- Josh giró sonriente hacia mí y soltó un "te lo dije" a lo que me volví a sonrojar como un tonto.

Caminamos un poco para adentrarnos a la fiesta y salir del frío de la puerta. Josh me guió a la barra para buscar un trago y darme de probar.

-Estoy seguro de que probaste todas las drogas del mundo pero nunca haz tomado alcohol- mire el vaso que me extendía unos segundos pensativo, pero al final lo tomé negando aun con el rostro serio y lo observé mientras servía uno para él. -Bien, entonces, salud- dijo para chocar nuestros vasos levantando el suyo hacia arriba tras el impacto y tomando. Supuse que yo también debía tomar porque así funcionaban esas cosas y ahí lo vi sonreír, el apenas achinado en sus ojos delató la curva de sus labios que escondía tras el vaso y lo imité por puro instinto.

-Bien, marica ¿qué quieres hacer primero?- pregunta apenas termina su bebida y la deja sobre la mesa. Le doy el último sorbo al mío e imito su acción para luego limpiarme los restos de liquido que habían quedado en mi bigote con el brazo.

-¿Qué se supone que se debe hacer?- pregunté un tanto desconcertado volviendo a ver a la muchedumbre moviéndose al compás de las música en conjunto.

-Puedes bailar como ellos- respondió Josh quien se había girado también hacia la pista.

-No sé bailar

-No hay que saber bailar para meterte en esa pista llena de perdedores- reí -Baila conmigo y luego te dejo seguir el ritmo solo ¿quieres?- me giro a él un poco inseguro pero me regala una sonrisa de confianza y rápidamente me toma de la mano para guiarme a la pista y comenzar a moverse.

"Sólo sígueme" me dijo al oído para que pueda oírlo y comenzó a girarme ayudándome a tomar el ritmo de la canción para terminar coordinando con él en los pasos.

Pronto estaba totalmente perdido del mundo, Josh era lo único que sentía además de la música invadiendo mis oídos.

Cerraba los ojos de vez en cuando dejándome llevar por los tironeos de Josh y la melodía que ya había tomado el control sobre mi cuerpo.

Cuatro canciones después, Josh me vuelve a sonreír demostrándome confianza para luego indicarme con un gesto que volvería a la barra y que me quedaría bailando solo, que no me preocupe. La verdad no hacía falta que me lo diga ya que estaba en un momento de completa despreocupación y en cuanto me soltó seguí moviéndome por mí mismo de la misma forma que lo hacía con él.

Entre canción y canción divisé a Josh a lo lejos, sentado solo, tomando de su vaso, viendo directo hacia mi y sonriendo. Le sonreí de vuelta en muestra de agradecimiento por todo y seguí bailando con esa gran sonrisa en mi rostro porque la verdad que la estaba pasando muy bien.

No sé cuanto tiempo ya llevaba en la pista pero no sentía mis piernas por lo que decidí ir a buscar a Josh para sentarme con él en algún lado a relajarnos, pero cuando me acerco a la barra ya no estaba ahí.

Le di una ojeada a la pista pero no creía que se haya metido sin acercarse a mí en algún momento. Recorrí todos los rincones del gran salón donde no había gente bailando, pero no estaba. También asomé la cabeza al jardín delantero donde había muchas personas fumando, pero recordé la primera vez que fumamos juntos me dijo que nunca lo había hecho antes, entonces no me gasté en buscarlo entre ellos.

Mi última opción era una puerta que dirigía a otra habitación donde pude distinguir algo de movimiento y creí que no habría problema si también ingresaba. Habían bastantes personas rondando, llevando y  trayendo bebidas. Era la cocina.

Buscaba con la mirada si encontraba la cabellera roja cuando la descubro en un rincón que estaba siendo tapado por un muchacho que mantenía la puerta del refrigerador abierta. Entonces sonreí convencido de que era él y comencé a acercarme.

Me llevé una gran sorpresa cuando el chico por fin cerró la puerta y tras de ella no sólo se encontraba la tan impactante cabellera roja. Allí estaba Josh, apretando con una muchacha... Debby.

Pensé, tal vez ambos estén muy borrachos. Pero si Josh estuviera borracho debería buscarme a mí, no a esa chica, él es gay.

Quedé unos minutos impactado mirándolos fijamente sin saber exactamente que hacer. Cuando veo que separan un poco sus labios para mirarse y sonreírse dulcemente, fue lo que necesitaba para terminar de volverme loco. Así era como me había mirado antes de besarme en el jardín de mi casa antes de venir.

Comencé a temblar. Por suerte nadie estaba viéndome, todos estaban demasiado ocupados emborrachándose para alterarse por un idiota que está teniendo un ataque de ansiedad en medio de la fiesta por ver a su amigo gay, por quien tal vez  podía estar sintiendo algo, besándose con una muchacha.

Tan pronto como pude sentir mis piernas, salí corriendo de allí y no paré el paso acelerado hasta llegar al bosque. Me sentía más cómodo yendo a ocultarme allí que en mi hogar.

Me lancé contra un árbol y comencé a llorar.

Why Are You Like That? [Joshler]Where stories live. Discover now