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Voy entrando al edificio más seguro de mí, pensando que tal vez hoy no sea un día como todos, pero la verdad es que estaba muy equivocado. Al cruzarme a Josh en el pasillo le regale una pequeña sonrisa por impulso y él se acercó muy rudo, el terror volvió a mi rostro y caminé en reversa hasta chocarme con los casilleros.

-¿Por qué me sonríes marica? ¿Acaso quieres provocarme?- golpea con fuerza mi hombro.

-N.. no, y.. yo solo.. no sé lo siento- cubro mi cara con mis brazos y mi estómago con la pierna izquierda. Comienza a golpearme como siempre. Que iluso, nunca pudiste confiar en las personas ¿Por qué eso cambiaria ahora?

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Vuelvo a mi casa y, sí, hoy fue un día como todos, tal vez Josh en el fondo sea bueno pero eso lo hace para parecer rudo, o quien sabe tal vez me usó.

Igual no entiendo por qué para ser rudo me golpea solo a mí, llega un momento que a la gente le cansa que siempre el mismo sea el golpeado, tiene algo conmigo, no sé qué mierda le habré hecho, pero me tiene mucha bronca encima, puedo sentirlo.

Entro a mi casa y mi mamá abre la boca para hablar, sé que me va a pedir un favor.

-Hoy no, mamá- la interrumpo sin siquiera dirigirle la mirada y voy directo al baño a seguir con la rutina diara.

Me veo destrozado, a veces llego a pensar que estoy enfermo, cuento días, para que esto se termine, o simplemente para morirme, no tengo nada que me haga algo feliz, pero soy muy cobarde como para quitarme la vida.

Recuerdo que en la noche Josh vendrá conmigo al bosque y me pongo nervioso. Las horas pasan muy lentas. Estoy dando vueltas por la habitación, mis piernas tiemblan, juego con mis nuevas heridas, sintiendo el dolor, a decir verdad me da algo de placer sentirlo.

No sé cómo pasó pero me entretuve con algo hasta ser interrumpido por un sonido que provenía de la ventana.Ya estaba oscuro, no tengo noción del tiempo. Me asomo por ésta y puedo ver movimiento entre unos arbustos así que tomo mi abrigo y salto.

-¿Estabas evitándome?- pregunta el teñido saliendo de entre las plantas con sus manos en los bolsillos del gran abrigo que traía puesto.

-Eee no, solo me entretuvo y me olvidé- titubeo agachando la cabeza.

Vamos caminando en silencio por la carretera, él mirando al frente y yo aún con la cabeza gacha.

-Y ¿qué haces tú allí?- pregunta sin sacar su vista del camino, me encojo de hombros, ya bastante sabe con que voy todas las noches.

Caminamos unos minutos más y me animo a preguntar.

-¿Q.. qué te hice?- oculto mi nariz en el cuello de mi abrigo

-¿Qué me hiciste qué?

-P.. para que.. me odies- se encoje de hombros, no digo más, tengo miedo de que si siga me golpee.

El resto del camino seguimos callados, el único sonido que se escucha es el de nuestros pies arrastrándose por el pavimento. Vamos tranquilos, en el paso, pues yo estoy muy nervioso.

Se lanza a los pies de un árbol tal como lo había hecho la noche anterior y se baja el gorro hasta tapar sus ojos. Yo me acomodo a su lado sentándome con las piernas cruzados y me pongo a jugar con una hoja.

-¿Por qué me sonreíste hoy?- escupe de la nada, me quedo unos segundos en silencio pensando una respuesta que no suene idiota.

-No lo sé- me limito a decir –Y tú ¿por qué me golpeaste?- pregunto tímido.

-Siempre lo hago no sé qué es lo que te parece raro-

-Y.. ¿Por qué lo.. por qué.. por qué lo haces?- insisto, la misma respuesta de antes, ya me estoy cansando –tiene que haber un porque-

-Solo por diversión

-Y ¿por qué solo en la escuela? Estoy junto a ti y ni siquiera me insultas-

-¿Mereces un descanso no lo crees?

-¿Qué tengo yo que los otros no?- se vuelve a encoger de hombros, lo miro confuso pero él no puede ver mi expresión.

-Hay cosas que simplemente no tienen por qué- no sabe por qué me golpea, eso es aún más estúpido. Dudo un poco antes de hacer mi siguiente pregunta, tengo miedo de la respuesta.

-¿Y.. n.. no te cansas? Es decir, ¿cuándo vas a dejar de hacerlo?- eso sonó muy estúpido, suelta una sonrisa, realmente eso fue estúpido.

-¿No crees que sería extraño que de un día para el otro deje de hacer algo que estuve haciendo durante mucho tiempo?

-Es signo de cambio, madurez quizá

-¿Me estas llamando inmaduro?

-¡No! Es decir, si, pero, no, solo que..- comienzo a temblar, sé que me va a golpear, pero solo ríe, intento seguirlo pero me sale una risa nerviosa.

-Bien, te dejare de golpear tanto, solo porque me estas ayudando con mi insomnio- ¿enserio dijo eso? Susurro muy bajo un gracias esperando que no lo escuche pero el silencio es tal allí que logra hacerlo y puedo notar como se forma una sonrisa de lado en su rostro. Minutos después se queda dormido y aprovecho para salir a caminar como suelo hacerlo.

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-Qué demonios Josh tienes hojas en tu cabello- Dallon, el amigo del teñido, le está revolviendo los rizos para quitarlas, es gracioso ver su cara de temor a que le pregunten donde estuvo.

La gente mira extrañada al notar que paso con total tranquilidad por su lado sin que me toque un pelo, pero noto su distracción sobreactuada para evitarlo, río bajo, sé que no será así toda la mañana pero lo disfruto.

-Así te quería encontrar mocoso- oigo su voz por detrás mientras estoy orinando. No termino de hacer mis necesidades que guardo mi miembro para que no haga nada con él y me volteo con nerviosismo. Él sonríe como gato cuando atrapa al ratón, y como de costumbre me arrincona y me golpea. Puedo notar que no lo hace con tanta fuerza como siempre, es extraño.

Cuando termina, yo estoy acurrucado en el suelo y él se agacha a mi lado y me susurra algo pero no logro escucharlo. Lo miro confundido pero el solo sonríe victorioso y se larga.

Why Are You Like That? [Joshler]Where stories live. Discover now