Why Are You Like That? [Joshler]

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-Tyler...

-¿Por qué?

-¡¿Crees que hay un por qué?!

-¿Qué tengo yo?

-Tyler.. tú

-¿Por qué no podías demostrármelo de otra forma que no sea golpeándome?

-¡TYLER YA MALDITA SEA!

-RESPONDEME JOSH

-¡Siempre me gustaste! Y no creas que te golpeaba para impresionarte ni para hacértelo notar por favor ¿quién haría eso?- rodeo los ojos con obviedad pero está concentrado en sus palabras y no lo nota –sólo no me gustaba la idea de que me guste un chico y tenía mucho miedo de que mis amigos lo notaran entonces..- ¿Josh Dun con miedo? –entonces te golpeaba para que piensen que te odio así no sospecharían nada, además era como una descarga porque pensaba que así me dejarías de gustar pero no lo haces y cada día se me hace más difícil golpearte pero no podía dejarlo así como así y luego te vi saltando de tu ventana y me dio mucha intriga seguirte y..

-Ahora estamos aquí- digo en un largo suspiro después de la explicación del mayor. Él me mira asustado esperando que no salga corriendo como aquella vez que me besó por primera vez, pero decidí quedarme.

-Oye ty enserio perdóname yo no quería sentir ésto pero es todo muy..

-Tranquilo, lo entiendo y está todo bien no te preocupes pero..- su rostro de preocupación empieza a expresar desespero y noto que comienza a sudar –no te preocupes, pero.. no soy homosexual...- una lagrima cae por su mejilla pero la limpia rápidamente ocultando su cara en el cuello de su abrigo por la vergüenza.

-Sí, lo siento no debí besarte, no sé por qué lo hice fue un impulso, enserio quería hacerlo pero no debí porque tú no sientes lo mismo y es muy estúpido enserio..- apoye mi índice sobre sus labios para callarlo, hablaba demasiado rápido –lo siento..- termina de decir en un susurro y me acerco a su boca lo suficiente para unirla con la mía sin antes susurrarle:

-Igual me gustó.

Cuando me separo y abre sus ojos me mira muy sorprendido e intenta decir algo pero su voz se corta y su labio tiembla demasiado.

-Podemos seguir haciéndolo, claro sólo si quieres- al no recibir respuesta no puedo evitar sonreir de lado, siento que lo tengo al fin en mi poder pero en realidad no quiero lastimarlo.

-En.. en serio no hace.. no hace falta.. no.. no te gustan los chi.. chicos y yo puedo entender.. lo.. enserio no quiero que.. por favor no juegues conmigo ya sé que tienes razones para hacerlo porque yo te he arruinado la vida pero en serio... perdóname- otra vez estaba balbuceando pero ahora entre cortado y entre sollozos.

-Shhh, Josh, tomémoslo como un juego ¿sí? Como si viniéramos a practicar como defendernos pero solo nos besaremos- le digo al oído para terminar depositando un corto beso en sus labios causándole un escalofrío.

-Sigue sin convencerme la idea, en serio siento que esto no es necesario

-Ya cállate

_

Días después, ya todo era diferente. Sentía el poder. En los pasillos Josh siempre me buscaba con la mirada para cuando me encuentre sonreírme, es como si me estuviera tratando de mostrar todo el afecto que no me dio estos años. Pero el reinado y la paz no duraron mucho tiempo ya que un día volví a sentir un fuerte golpe en mi espalda dejándome desparramado por el suelo sosteniéndome de lo que tenía a mi alcance. Con la mirada perdida pude identificarlo a él parado justo frente a mí, con la misma pose de control que llevaba siempre a la hora de golpearme pero había algo distinto. En sus ojos no había rabia. Si no suplicas de perdón. Cualquier persona podría notar que lo estaba haciendo bajo órdenes de otro pero nadie lo hacía. Todos caminaban a nuestro lado sin hacer nada al respecto, sólo Dallon nos estaba observando a unos metros de distancia con la mirada diabólica, ya la verdad ese ni sé que quería.

Comenzó a patearme y mi cuerpo solo reaccionó a cubrir las partes más débiles para que no sean afectadas. Fue muy sorpresivo ese ataque por lo cual no tuve tiempo de pensar mi defensa y al terminar quedé destruido y jadeando con un Josh de ojos llorosos mirándome desde lo alto pidiéndome perdón entre susurros desesperados sin movimientos que los acompañen. Luego se fue corriendo hacia su amigo fingiéndole una sonrisa de victoria a la cual el contrario respondió de igual forma.

_

-¿Qué demonios te pasa?- grité al verlo doblando en la esquina de la cuadra.

-Tyler.. yo.. ya sabes, te dije que no podía dejar de..

-Te estoy dando cariño Josh

-Tyler.. lo sé, Tyler por favor

-Cariño que no sale de adentro de mí pero aun así te lo entrego, cariño que debería guardar para una persona que me haga bien y sin embargo te lo doy a ti y te vale madres

-Tyler...

-¿Puedes por favor dejar de decir Tyler?

-Ven a mi casa..

-¿Qué?

-Ven a mi casa por favor

-N.. no

-Ven o te llevo

-No lo permitiré

-Por favor- puso los típicos ojos de perro que todos llaman, los cuales nunca me parecieron tiernos y nunca tuve que hacer esfuerzo para resistirme a ellos, pero él tenía algo diferente provocándome que por instinto tome su mano y lo mire esperando que me guíe.

Minutos después estábamos caminando a su casa, en silencio y de la mano, y al llegar a la entrada él me detiene colocándose frente a mí mirándome fijo sin decir nada. Intenta besarme pero lo esquivo con delicadeza dejando su cabeza apoyada contra mi cuello donde comenzó a negar y pedir disculpas entre sollozos.

-Sólo dime que quieres

-Que me perdones y me entiendas

-Yo también quiero que me entiendas

-Tyler, yo te entiendo y trato de hacer lo mejor para que no pases por eso pero..

-No lo logras porque para lo único que sirves es para lastimar personas- se queda en silencio, aun con su cabeza recargada en mi hombro abrazándome sin esperar que corresponda.

-¿Puedes entrar?- lo observo unos segundos para luego asentir y adentrarnos juntos a la casa en silencio.