Capítulo 1

66.9K 2.8K 174
                                    

-¡Ellery, Keith! Ya dejen de besuquearse y bailen con nosotros.- Gritó Leah.

La mire con mala cara desde donde estaba (que no era muy lejos) y me paré tomando la mano de Keith para ir a la pista de baile. Empecé a mover mi cuerpo al compás de la música y sus fuertes manos no tardaron en posarse sobre mi cintura.

Llevaba alrededor de 6 meses conociendo a Keith, y tres siendo su novia. No diré que lo amo porque estaría mintiendo, pero si lo quería muchísimo.

Las luces, el Alcohol y la buena compañia eran muy buena combinación, incluso podría decir que estaba ebria, cosa que me pareció extraña ya que tengo buena resistencia al alcohol; pero lo deje pasar porque en realidad había perdido la cuenta de cuantos tragos había tomado.

-Creo que ya bebí demasiado.- Reí como loca y me tuve que agarrar de Keith para no caer.- Ya! No voy a reír más, lo prometo.- dije arrastrando las palabras y levantando mi mano derecha.

-Vamos a un sitio más apartado nena.- susurró Keith en mi oído haciendo que me estremeciera por su cercanía.

Apretó su agarre guiándome por en medio de la multitud, hace tiempo que había perdido de vista a los chicos; pero daba igual, seguro estaban por algún lado y ya los vería luego. La música aún se escuchaba pero no tan alta como antes.

-Keith. ¿Donde estámos?

Mi vista estaba más borrosa de la cuenta y esto me dificultaba ver donde nos encontrábamos.

-Tranquila nena, estás conmigo.

Keith empezó a besarme con fuerza, mordió mi labio inferior haciendo que sangre saliera de este. Reuní toda la fuerza que pude y lo aparté. ¡Que mierda le estaba pasando!

-¡Keith, basta!

De pronto los gritos de las personas se hicieron presente. Gente corría por todos lados, algunos caían y otros simplemente salían por una puerta (que hasta el momento no había visto) justo al lado de nosotros.

-¿Que carajos está pasando aquí?- quizo saber Keith furioso.

En el momento en el que mis ojos vieron aquella figura que irradiaba peligro y poder por todos lados, su vista se dirigió hacia mi. Sus ojos dorados observandome con fijeza. Salí de mi trance cuando Keith me tiró fuerte del brazo para que salieramos, pero eso no sucedió; la figura gigante arrojó a Keith al otro extremo del espacio donde estábamos y antes de que perdiera la vista y el conocimiento completamente esos ojos dorados me echaron un vistazo una vez más.






*Holaaa personitas que aún no leen mi historia (pero se que la van a leer) aquí les dejo un cap, espero que les guste.

_Besos 💋

RescatadaWhere stories live. Discover now