Scars (Sterek)

Capítulo 2

Stiles solamente miraba por la ventana, no quería mirar la cara de su padre, ni el rostro del piloto. Él sabía que una vez estuvieran dentro del pueblo empezara una cuenta contra reloj, una cuenta en la que si no la cumplía se arrepentiría. La mano del piloto empezó acariciar su pierna, Stiles simplemente tragó saliva y se tensó, odiaba que los lobos lo tocaran.

- Espero que cumplas las expectativas, aunque castigarte me divierte.- El gruñido que dejó salir Noah se escuchó por todo el coche mientras que Stiles simplemente lo ignoraba. No tiene caso darle importancia, si Deucalion no daba la orden nadie lo tocaría más de lo debido. La mano de Ethan dejó un apretón muy cerca de su ingle, pero hacia ya años que no sentía la necesidad de nada sexual, desde que los reentrenamiento empezaron, él simplemente dejó de pensar en eso. Negó mientras suspiraba y apartaba la pierna de su tacto. Abrió la mochila y revisó las dos pistolas con balas de acónito. Mientras volvía a poner el cargado una idea se le cruzó por la cabeza pero una mano en su muñeca lo detuvo.- Ni lo pienses, Deucalion acabaría contigo antes de que mi cadáver cayera al suelo.- Dijo la voz grave de Ethan, Stiles simplemente separó su mano del contacto y guardar las pistolas.

- Voy a necesitar el coche cuando lleguemos.- Dijo mientras volvía a mirar al exterior, Ethan carraspeó y lo miró serio.

- Ni lo pienses.- Stiles por primera vez en todo el viaje giró su cara para mirar con indiferencia a los ojos del lobo. Este se mantuvo serio y seguro de su respuesta.

- Lo necesito, es un mecánico, no puedo entrar así por así en su taller.- Ethan tragó saliva y miró serio a Stiles. El lobo sabía que tenía razón pero no podía dejar solo a Stiles con un coche.- Sabes que no me voy a escapar, tenéis a mi padre.- Dijo mientras lo miraba serio, Ethan pareció relajarse. En cambio Noah se tensó demasiado, esa frase le hizo darse cuenta de lo dominado que tenían a su hijo por su culpa, teniendo la posibilidad de escapar con un coche la negaba por él. Negó mientras mordía su labio y miraba por la ventana.

- Te lo dejare, pero como no vuelvas antes de una hora me cargaré a tu padre y después iré a por ti.- Dijo Ethan mirando serio a Stiles, este apartó la mirada satisfecho mientras asentía con tranquilidad, conocía sus habilidades y sabia que podría llegar antes de la hora.

*

Stiles entró al taller mientras sentía el cuchillo en su cintura, otro en su pierna y el ultimo, por si las moscas, en su muñeca. Bajo del todo terreno y se apoyó en la puerta esperando que alguien saliera atenderlo. Miró por encima el taller solamente había un vehículo, un camaro negro. Se quedó mirando el vehículo, era del año y no parecía estar estropeado, únicamente unos cuantos rasguños en la chapa.

- Buenos días, soy James.- Dijo una voz a su espalda haciendo que se girara, un hombre de la edad de su padre y lleno de grasa le sonrió mientras se limpiaba las manos.- ¿En qué puedo ayudarle?- Preguntó el mecánico mientras sonreía, Stiles asintió y carraspeó mientras bajaba lo máximo sus mangas.

- El motor hace ruidos raros.- El mecánico asintió y alargo la mano para que le diera las llaves, Stiles se las dio y el hombre miró al camaro que estaba unos metros levantado.

- Me quedan cinco minutos con este y reviso el suyo.- Stiles asintió mientras mordía el labio, no podía permitirse perder mucho tiempo.- Puede esperar en la sala de aquí al lado.- Stiles se dirigió a la sala mientras miraba su reloj de bolsillo, no le tenían permitido tener teléfono. Iba bien de tiempo, solo debía esperar que el dueño del camaro se fuera. Entró en la sala y no vio a nadie así que se sentó en una de las sillas y empezó a mover su pie nervioso. El tiempo corría en su contra y sabía que a Ethan la excusa de había alguien dentro no le servirá. Volvió a mirar el reloj y cerró los ojos, si en veinte minutos no le atendían se iría a casa y vendría mañana. La puerta que había al lado del mostrador se abrió dejando ver un lavabo y de ahí salió un hombre un poco mayor que él, moreno y muy atlético. Stiles solo le dio una mirada rápida y solo con eso supo que delante tenía a un lobo. No se movió, no se asustó y su ritmo cardíaco fue el mismo. Ninguno de los dos hacía nada, uno por entrenamiento y el otro por la sorpresa de ver a un chico tan atractivo y desconocido. Derek intento acercarse pero un olor a muchos lobos hizo que se detuviera y mirara con el ceño fruncido al chico del abrigo negro. Olía a demasiados lobos, pero su aroma era casi todo humano. Gruño mientras se acercaba despacio pero se detuvo sorprendido al ver que el humano ni se inmuto.

- Señor Hale su camaro ya está listo.- Derek volvió a gruñir y salió de esa pequeña sala, dejando a Stiles solo. Este espero a escuchar el motor y dejó salir el aire aliviado. Si en esta zona había lobos él y su padre estarían en peligro. Salió de la sala con un tela que cubría su boca, dejando solo a la vista sus ojos color whisky. Revisó el taller con la mirada asegurándose que no había nadie y se acercó sigilosamente por la espalda.

- ¿¡Pero qué!?- Grito el mecánico mientras un brazo le apretaba el cuello impidiendo que saliera el aire. Stiles sin decir nada clavó tres veces seguidas el cuchillo en el costado del mecánico antes de llevarlo a su pecho y clavarlo por última vez. Noto como el cuerpo perdía fuerza y lo dejó caer al suelo con un ruido sordo. Limpió la sangre de su mano y guardó el cuchillo en su  cadera. Miró alrededor y con un poco de sangre dibujó el símbolo que Ethan le había dicho. Fue hacia el todoterreno pero se detuvo al ver un joven parado en la entrada mirando el cadáver del hombre.

- ¿Papá?- Preguntó mientras se acercaba, Stiles tragó saliva antes de dejar un suspiro, odiaba muchísimo estos trabajos. Se acercó al chico y lo cogió del cuello manteniendo a su espalda.- Por favor no me mates.- Stiles trago saliva y miró el cadáver del hombre. No podía hacerle eso a un chico. Guardó el cuchillo pero no soltó al chiquillo.

- Escúchame bien, tu no me has visto, cuando has llegado solo estaba tu padre ¿Entendido?- El chico asintió y Stiles lo soltó mientras se iba a su coche y salía del taller a toda prisa. Miró el reloj y se había entretenido demasiado, así que sin importar la policía aceleró lo máximo para llegar en diez minutos a la casa y así impedir otro asesinato más. Aparcó y entró a casa sin decir ni una palabra, Ethan salió a recibirlo y sonrió con orgullo al oler la sangre en él.

- Bien hecho pequeño.- Dijo mientras acariciaba el pelo, Stiles huyó de su tacto y subió las escaleras hasta donde su padre lo esperaba con la puerta abierta.

- Tienes la bañera preparada.- Stiles asintió y entró mientras se deshacía de su ropa sucia, después la quemaría en el patio. Se hundió en el agua solo dejando su pelo a la vista, su mente le pedía que sacara la cabeza mientras que su corazón rogaba que se quedara ahí para siempre que así dejara de sufrir, pero esta vez fue la mente quien ganó y salió soltando una gran bocanada de aire. Salió mientras pensaba en la cara del chico, había dejado a un niño sin su padre ¿Podría ser un monstruo más despreciable? Suspiró y salió vestido con una camiseta de manga larga marrón y unos pantalones negros. Su padre lo miró y sonrió mientras intentaba acercarse a él pero Stiles como siempre se apartó, no quería contaminar a su padre, él estaba sucio y usado.

- Te parece bien ir a practicar al jardín trasero.- Stiles simplemente asintió, necesitaba distraerse, dejar de pensar en la cara del chico y en el hombre lobo. Stiles cogió sus sais y salió seguido de su padre. Stiles desfundó los sais y miró a su padre mientras él cogía su bastón bo de madera.- ¿Listo?- Stiles asintió y Noah empezó atacando, si de algo podía enorgullecerse Stiles era de la habilidad que había adquirido todos estos años. Con gran facilidad esquivaba los golpes de su padre y simulaba dar certeros. Unos aplausos lentos hicieron que ambos se detuvieran y limpiaran el sudor de sus frentes.

- No entiendo con la habilidad que tienes con esas armas no las uses para los asesinatos.- Noah se tensó mirando a Ethan que los contemplaba desde el porche trasero, Stiles solamente enfundó sus armas y se dirijo al interior de la casa. Al pasar al lado del lobo este lo estampo contra la pared haciendo que una mueca de dolor atravesará fugazmente su cara.- Háblame cuando te hablo.- Gruñó furioso mientras una de sus manos bajaba serpenteando por su cuerpo. Stiles apartó la cabeza mientras deseaba que se detuviera.

- No quiero mancharlas de sangre, son una herencia familiar.- Dijo mientras sentía la ansiedad controlando su cuerpo al sentir la mano del lobo demasiado cerca de su culo.- Por eso no las uso.- Dijo mientras se tensaba, Ethan sonrió satisfecho y soltó a Stiles antes de entrar. El aire salió como una bomba de la boca de Stiles y se dejó caer hasta quedar sentado en el suelo. Quería huir, desaparecer, pero no podía, no si condenar a su padre. La mirada de Stiles se dirigió ahí y su padre lo miraba con lastima, queriendo acercarse pero sabiendo la respuesta que recibiría. Stiles se levantó y le sonrió levemente antes de empezar a subir a su habitación. Necesitaba bañarse ya.