Si Sólo Tú

Capítulo 16: "Aléjate"

— ¿Decirme qué?... ¿Tú no entiendes que no quiero escucharte?... Creo que no.— estaba aún más molesta—. ¿Qué es lo que quieres decirme para que me dejes ir?

   Sus ojos me miraron seriamente, como si su mirada desafiara a mi ser. ¿Qué quería decirle? De pronto parecía que lo había olvidado... Algo en mi cambiaba cada vez que me encontraba en frente de ella. Y aquello me desconcertaba por completo.

—  Solo funcionas en público, ¿verdad?... ¡Qué lamentable!— expresó al instante en que mis labios enmudecieron, al mismo tiempo, en que se acercaba alguien conocido por mí. Mientras yo soltaba su brazo.

— Edward... ¡Qué suerte es verte de nuevo! Esperaba verte después de la fiesta de este fin de semana— . Se acercó a mí, besando mis mejillas._ ¿Interrumpo algo? 

—  No, ya habíamos terminado de hablar...—  expresó seriamente Shannon.

—  Hola Cindy..._ le expresé a aquella persona, mientras mi mirada se iba tras los paso de Shannon.

— ¿Qué le hiciste?... 

— ¡Ah!...nada. No le hice nada.

— ¿En serio?...— Cindy se sonrió con ironía— . No quisiera estar en tu pellejo...

   Su manera de alejarse de mí y sus palabras habían inquietado lo más profundo de mi ser. Había llegado al lugar en donde nadie más había llegado. Y había pisado mi egocéntrica forma de ser.

— ¿Alguien ha hecho el milagro de cambiarte?_ me había expresado Niall en un tono burlón, al haber sido testigo de todo aquello que había ocurrido.

   Guardé silencio un momento. Aquellas palabras me habían hecho detenerme en aquello que aún mi ser no se había detenido a pensar.

— No estoy para tus tontos comentarios..._ expresé, tratando de de evadir todo aquello de mi cabeza. ¿Podía ser verdad todo aquello?

— Alguien ha logrado lo imposible... ¡Alguien ha logrado aplastar el ego de mi querido amigo Sparks!

Shannon:

—  Es fin de semana. ¿En verdad no te interesa salir un momento, ni siquiera a caminar por Cambridge?_ me preguntó Amanda, mientras me decidía a tomar uno de mis libros y ponerme a estudiar.

—  Conoces muy bien mi respuesta... Este fin de semana me quedare a estudiar.

—  Mmm... Vamos a ver... ¿Existe una razón muy fuerte que te hace decirlo?... ¿Podría estar equivocada?_ expresó en un tono entre irónico y gracioso.

—  ¡Amanda! No es gracioso... Recuerda que aún no te he perdonado lo del otro fin de semana.

— Entonces, se más especifica..._ sonrió_ No he hecho planes con Simon, puedes estar tranquila... Posiblemente se decida a ir a otra de las fiestas que se hace los fines de semana.

— No temo volver a cruzarme con Edward en un fin de semana.

— ¿Entonces?

   Respiré profundamente, mientras abría el libro en la página que quería.

— ¡Por mí!..._respondí minutos después al sentir sobre mí su mirada de interrogatorio_. Hace tiempo me hice una promesa y pienso cumplirla...

—¿Tan fuerte es esa promesa?

—Sí...

—  Espero que algún día tengas la suficiente confianza y me hables de esa promesa.

    No dije nada, mientras la veía salir de aquella habitación.

    Y cerré de golpe aquel libro al ver que era absurdo intentar estudiar, cuando no podía concentrarme.

    Cerré los ojos un momento. Intentando con ello buscar dentro de mí, aquella calma que perdía cada vez que el pasado regresaba a mi cabeza y las ganas de llorar se me hacía inevitable. Aun podía recordar aquella llamada desesperada de mi madre, en aquella ocasión que me expresó la angustia que sentía al saber sobre aquel secreto, que pensé que mi hermano guardaría como una tumba para siempre. Pero que la insistencia de mi madre había podido romper, cuando había visto en su rostro que él le ocultaba algo.

   Aquella vez había tomado las llaves del automóvil que mis padres me habían obsequiado y había buscado refugio lejos de allí. No quería verme vulnerable ni que me vieran así.

— Estás haciendo lo correcto... La vida continua. Lo sabes..._ respiré hondo y abrí los ojos_ Aléjate... Aléjate de todo aquello que pueda destruirte de nuevo...