Celos 3

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Una reunión de amigas se llevo a cabo en el departamento de Starfire. Muchas miembros de la liga estaban hay celebrando el día de la mujer. Comida, tragos y música se repartían entre todas ellas. Poco a poco la fiesta se convirtió en una conversación sobre parejas y temas como "como obligarlo a hacer lo que una quiera" o "como saber cuando algo anda mal" se escucharon entre las que tenían mas experiencia. Kara, que conversaba animosamente, noto que la maga de los Titanes se mantenía callada sin opinar o debatir sobre los temas, así que ella obligo a compartir.

- ¿Oye Raven? ¿Que haces tu para que Damian te de cosas?

- No seas ilusa Kara, Damian es millonario. Raven no necesita hacer nada para que le de algo.

Dijo Canario negro riendo con las demás por la pregunta.

- Yo no le pido nada.

Respondió Raven tranquila a la pregunta de la prima de Superman. 

- ¿Como que nada? El otro día vi que te llego una encomienda llena de libros antiguos.

- Él me los compro. Yo no se los pedí.

- ¿Entonces el te hace regalos solo por que si?

- No es como si me llegaran regalos todos los días. Pero una que otra vez me llega algo de su parte.

- Y... ¿tu como le agradeces? ¿Eh?

Todas miraron a Raven que levanto una ceja ante la insinuación.

- ¿Tu crees que pago con sexo los regalos que me da?

- Bueno eso es algo entre chicas ¿no? Así saben como ganarse su "premio"

- ... Nosotros no nos damos "premios"... 

- No sabes lo que te pierdes. Cuando los "amarras con el premio" pueden hacer lo que sea por el.

Todas las demás reían y asentían por la orgullosa manera en que Kara decía una de los tan famosos "métodos" de las mujeres. Raven miro molesta la egoísta forma del método, mencionando que era una estupidez.

 - ¿Oh? ¿Entonces quieres competir? Te reto a obligarlo a darte algo que tu quieras. Yo haré lo mismo con Tim y la que llegue con el mejor regalo gana.

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Raven caminaba por el pasillo de la torre con una mirada molesta en su rostro, repitiendo la misma frase una y otra vez en su cabeza "estúpida, ¿por que mierda aceptaste?" 

Llego hasta la habitación de su novio, pero cuando entro se encontró con su ropa en el piso y la puerta del baño abierta. Preocupada lo llamo, acelerando el paso hasta el baño, donde lo encontró en la tina con el agua hasta el cuello, seria y callado sin moverse.

- Hola 

- ¿Damian que haces? Me preocupaste, pensé que te había pasado algo.

- Llegue de la misión con mi padre y llegue bastante adolorido y cansado. Deseaba tomar un baño caliente... pero esto no esta caliente.

Raven lo miro extrañada, se veía triste y aburrido consigo mismo. Trajo una silla de la habitación y se sentó a su lado junto a la tina. Toco el agua para ver si estaba caliente y encontró que estaba a la máxima capacidad de la caldera pero él seguía diciendo que estaba fría.

- ¿Paso algo?

- En mi antiguo hogar, después de los entrenamientos, era costumbre bañarse en las aguas termales de las montañas para recuperarnos. Este país hace todo mal y opuesto a lo que estoy acostumbrado. El agua no esta caliente, las tinas deben ser de roca volcánica negra y no de azulejos blancos y todo debe ser amplio y ornamentado, no cerrado y encapsulado...

- ... ¿Extrañas tu hogar?...

- ... A veces... me molesta ser el extranjero...

- ¿Podríamos ir a uno baños termales? 

- No... el agua de las montañas es especial... es re generativa, medicinal. Los guerreros se bañaban en ellas para sanar sus heridas, no para disfrutar.

- Me cuesta creer que extrañes tu casa... cuando todo lo que cuentas de ella es horrible.

- Cuando vives una vida horrible... es lo normal del día a día. Después de mi padre las cosas cambiaron... pero no significa que todo me guste.

Raven lo miro y con su mano acaricio el cabello de tu pareja dándole una pequeña sonrisa.

- ¿Quizás podríamos ir a comer a un restaurante de comida árabe? Hay algunos que me han llamado la atención.

- Supongo que vale la pena intentarlo.

Damian la miro unos segundos y su mirada cambio a una de intriga.

- ¿Por que estas enojada? ¿Paso algo en la fiesta?

Ella se reclino en la silla fastidiada del asunto de la apuesta.

- Una estupidez.

- ¿Tiene que ver conmigo?

- ¿Como sabes?

- Por que la gente disfruta mucho de fastidiar nuestra relación. 

- La gente piensa que somos raros... tu un asesino y el hijo de batman, yo mitad demonio y la llave del fin del mundo.

- Suena como la trama de las malas películas que Logan nos hace ver los fines de semana.

- Jaja... si... 

- ¿Que te dijeron?

- Una tontería... una estúpida apuesta. Sobre obligarte a darme algo y negarte estar conmigo si no me lo das.

- Ah... he visto a Grayson hacer grandes tonterías por eso...

Se quedaron callados, mirándose el uno al otro por un tiempo esperando que alguno hablara.

- ¿Hay algo que desees?

- ¿Crees que te voy a chantajear con sexo?

- No... pero imagino que aceptaste la apuesta y la prueba consiste en que obtengas algo de mi que valga chantajearme.

- No quiero nada... me gusta estar contigo y no hay nada de tanto valor como para no querer estar contigo.

- Entonces estamos en un camino cerrado.

- Eso parece.

Nuevamente se miraron.

- Se mi esposa.

- ... ¿Que pasa si me niego?...

- No me acostare contigo.

Raven se levanto para quitarse su ropa y meterse a la tina con él, uniendo su espalda con el pecho de él.

- Entiendes que jamas dejare de desearte ¿cierto?

- ¿Y eso es algo malo?

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Las mujeres se reunieron con Raven y Kara para ver los resultados de la apuesta.

- Ok Raven, Tim me regalo esto!

Mostrando un auto 0 kilómetro de color azul.

- Mejora eso.

Todas miraron a Raven que por debajo de su capa saco la espada de Damian.

- ¿Te dio su espada?

- Si.

- ¿Y por que te dio su espada?

- Por que en su cultura no se entregan anillos de compromiso.

Kara al escuchar eso, con sus manos doblo el capo del auto nuevo, en frustración por lo que sus oídos había recibido. Mientras que las demás mujeres gritaban y felicitaban a la nueva futura novia.


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