17.- SALIDA NOCTURNA (EDITADO)

4.6K 207 14
                                    

Abrí bien los ojos cuando escuché lo que mi querido primo me dijo

–¿Qué? –pregunté incrédula– Pero... –me interrumpió.

–Nada de peros. Mi madre está durmiendo y tú hermano igual. Es perfecto.

En ese momento me fijé en algo que se me había pasado por alto. Thomas estaba vestido con jeans y chaqueta. Iba en serio lo de salir.

–¿Y adónde vamos a ir? –aún no me lo creía del todo.

–Es una sorpresa –me guiñó un ojo.

Miré un punto fijo en la pared.

Tenía dos opciones: podía quedarme aquí en casa e intentar dormir o podía ir con mi primo a quién sabe dónde.

–Está bien –Thomas me sonrió y yo salí de la cama. Busqué en mi closet algo que ponerme, me decidí por unos vaqueros, una camiseta y un abrigo por el frío.

–Esta vez no me puedo ir – Thom se reía.

–¿Por qué?

–Porque mi madre duerme con la puerta abierta y si me ve paseándome por los pasillos comenzará a sospechar –me dijo muy seguro.

–Dijiste que estaba dormida – entrecerré los ojos.

–Puede despertarse, nadie sabe –mi primo puso tal cara de víctima que ni él mismo se la creía.

Puse los ojos en blanco y lo tomé del brazo. Caminamos hacia la puerta de la habitación y cuando la abrí me encontré con el pasillo sumido en la oscuridad. Empujé a Thomas fuera de la habitación.

–Si no metes ruido no tiene por qué despertarse –sonreí y le guiñé un ojo antes de cerrar la puerta por completo.

Me saqué el pijama lo más rápido que pude y me puse la ropa que había elegido. Me peiné un poco y volví a abrir la puerta. Thomas me esperaba con una sonrisa.

–¿Vamos? –le pregunté en un susurro. El asintió con la cabeza.

Iba a pasar por su lado para bajar la escalera, pero me detuvo y volvió a meterme en la habitación.

–¿Qué haces? –me preguntó con el rostro confundido–.Creías que íbamos a salir por la puerta, ¿cierto? Mi madre tiene el sueño ligero.

Si no salíamos por la puerta la única opción era la ventana. ¡Ay, no puede ser!

–No, no, no, estás loco si crees que voy a salir por la ventana, Thomas –murmuré alterada.

–No grites, Jules, vas a despertar a los demás –frunció las cejas–. Si salimos por la puerta nos van a descubrir y mi mamá va a estar vigilándolos los días siguientes. Créeme que no quieres eso.

Me mordí el labio inferior y maldije internamente.

–Bien, pero si me caigo prométeme que irás a mi funeral y llevarás unas flores muy lindas.

Thomas se rio bajito.

–No voy a dejar que te caigas, bebé –me dijo muy seguro–. Yo bajaré primero.

Thomas salió por la ventana y comenzó a bajar. Desde aquí arriba parecía demasiado fácil, pero sabía que cuando llegara el momento en el que me tocara hacerlo estaría muerta de miedo.

–Te toca –dijo lo más despacio que pudo cuando sus dos pies tocaron el suelo.

¿Ya era demasiado tarde como para arrepentirse?

Tomé una bocanada grande de aire. Saqué un pie primero y cuando encontré un lugar donde apoyarlo saqué el otro. Cerré los ojos unos segundos y me agarré bien del borde de la ventana.

Solo eres mi primo  (SEMP1)Where stories live. Discover now