¡Jimin y Yoongi son novios! [ym]

Capítulo 2.

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Al segundo día nada podía ir mal, Jimin abre la puerta de su armario con una sonrisa preciosa, mejillas rosas por despertar recién, su precioso gato duerme aún en la cama del hotel con los primeros rayos de sol acariciandole el pelaje.

La mayoría de los invitados llegan dentro de dos días y hoy sólo se encargará de que todo vaya al pie de la letra, y cómo lo organizo él sabe que todo estará bien.

Deja caer su ropa interior en el suelo del baño y la patea, toca la puerta que conecta a la habitación de Taehyung antes de caminar desnudo a la bañera, suspira al sentir el agua caliente en su cuerpo y deja caer su cabeza en el respaldo mientras deja que el agua lo consienta unos minutos.

Escucha una puerta abrirse y cerrarse y llama a Taehyung para empezar a dictar los primeros detalles, cierra los ojos y disfruta el olor del aromizante de fresa.

—de acuerdo. —dice tan pronto escucha asos acercarse. —el padrino aún no ha llegado, pero llega al vuelo de las ocho así que tenemos que ir a recibirlo abajo junto a Suran, Woong fue por él así que no te preocupes por la camioneta que va por la prima Lee de Suran al aeropuerto del otro lado de la isla, las habitaciones de ambos están listas y tienen el regalo de bienvenida con el intenerario. —gime al estirarse un poco y escuchar sus huesos tronar. —el desayuno de hoy es todos juntos, sólo hay dos vegetarianos y siete niños, la lista de reproducción está en mi mochila, se la das al hombre que se la pasa viendo el trasero de todos. ¿Lo tienes? —escuchó un sonido de afirmación pero no se atrevió a abrir lo ojos. —vale, no es el fin del mundo, el pastel está bien y Suran ahora está durmiendo así que puedes explicarme porque nadie me dijo que Min Yoongi, ese Yoongi está aquí.

—bueno, normalmente invitan a alguien porque le quieren presente, Jimin-ah. —el rubio abrió los ojos y se sentó en la bañera, al ver a la puerta estaba el pálido hombre con los brazos cruzados y una sonrisa ladina. Tenía una pokera blanca arrugada y un onatalon de pijama cayendo ligeramente por su cadera. —no creo que me quieras viendo tus maletas así que... Supongo que me confundiste.

—¿qué - tú-digo...? - ¿puede darme un minuto, Yoongi hyung? —el mayor se río y asintió empezando a irse, Jimin sostuvo su cara y empezó a negar.

Claro que algo puede salir mal, es Park Jimin.

—por cierto. —volvió a ver a la puerta, sintió los ojos de Yoongi bajar por su pecho húmedo y subir de nuevo a su rostro. Antes de hablar pasó la lengua por sus labios. —cuando dije que me invitaras a una actividad recreativa imaginaba el recorrido a caballo, no un baño juntos, aunque... No mintieron al decir que había mejor servicio del que esperábamos.