Warrior (the 100)

Some hours of love

"Algunas horas de amor"

N.África

Una vez los betas se calmaron se alejaron de Fynn y Bellamy.

–Lo siento... N-no pudimos controlarlo –dijeron al unísono África y Thomas.

–Tranquilos, no pasó nada –dijo Fynn cogiendo las manos de los dos como apoyo.

África y Thomas, sin embargo, vieron el brazo de Bellamy y se acordaron porque perdieron el control.

–Por favor, a la próxima confiad más, no valla a ser que estalle una guerra –dijo África con sarcasmo y doble sentido, pues en ese momento ya estaban en guerra, por decirlo así.

–L-lo siento –susurró Clarke.

Había sido ella quién había avisado a Bellamy y quién había hecho que llevarán armas, y Jasper quién había comenzado a disparar.

Sin contestar África se acercó a Bellamy y puso su mano en la herida de las garras.

Le empezó a absorber el dolor, sus venas se veían con sangre negra.

Cuando hubo acabado Bellamy ya no sentía dolor, seguiría teniendo la herida, si, pero ya no le dolería.

Acto seguido explicaron lo que eran, como lo controlaban y todo lo que conllevaba serlo.

Todos se sorprendieron excepto Octavia y Fynn que miraba fascinado a los dos betas.

Bellamy tenía una mirada extraña. Por una parte quería correr, abrazar a África y decirle que todo estaba bien que ya no perdería más el control con el a su lado. Pero por otra, sentía un miedo indescriptible, no sabía porque lo sentía total sabía que no le harían daño, pero sin embargo lo sentía.

África miró a Bellamy y olió su miedo y a la vez su... ¿Amor? ¿Ternura? No sabría definir ese sentimiento que tenía el chico. Ya había sabido que tendrían miedo, pero esperaba que lo disimularan un poco, nada más.

Miró a Thomas y el, entendiendo su mirada, asintió.

Se echaron a correr hasta llegar a un río. Ahí pararon y metieron sus pies en el agua para tranquilizarse.

No pensaban en nada. Ni que habría pasado luego de su partida, ni si los estaban buscando... Nada.

Solo querían tranquilizarse, no querían que volviera a pasar lo mismo de hacia un rato, y, antes de irse justo, les estaba a punto de suceder de nuevo por la presión y todas las miradas (menos una) en ellos.

Estuvieron allí bastante rato, cuando decidieron bañarse y lo hicieron.

África se quitó el pantalón de deporte que llevaba desde que llegó del arca y Las botas militares y se metió con el top y la ropa interior baja.

Thomas hizo lo mismo y se bañó en boxers.

–Hey Thommy, una katana a quién aguante más bajo el agua –dijo África.

Así eran siempre, apostaban por todo y, podría ser que alguna vez tuviera alguna consecuencia, pero por el momento seguirían apostando.

–Uno... –empezó a contar Thomas como respuesta al reto.

–Dos... –siguió África sonriendo divertida.

–Tres –acabaron los dos al unísono.

Se sumergieron en el río y estuvieron un rato debajo.

Finalmente salieron los dos a la vez después de un 1 min y 75 seg, habían empatado, como siempre. Bueno podría decirse que tampoco les sorprendía.