Provocadora.

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Mientras mas nos acercábamos a Beacon Hills, sentía mi corazón estrujarse,  no quería  volver a ver a mi novio a escondidas, quería poder salia a caminar con el tomados de las manos, que me lleve a la escuela y que vean lo hermoso que es, invitarlo a las fiestas, hacer cenas en mi casa, que papá y mamá lo aprueben, lo se, muy rosa, pero en verdad es lo que quiero, tener un noviazgo normal.

-¿en que tanto piensas?- llamo mi atención su voz.

Suspire, y el me miro.

-¿entonces?- dijo esperando mi respuesta.

-hay que decirles- dije volteándolo a mirarlo con una sonrisa muy alegre.

-¿que?- dijo sonriendo pero con sorpresa en sus ojos.

-hay que hacerlo, me la pase increíble hoy saliendo sin preocuparnos de que alguien nos vea, quiero que eso siga, no ocultárselo mas a nadie, no temer a que nos vean ser felices- 

El paro el auto en la orilla y tomo mis manos.

-si, hay que hacerlo- me miro de esa manera que me da la seguridad de pode hacer lo que sea.

-te amo- lo abrace.

Lo tome con tanta fuerza mientras aspirada su aroma del cuello, mi corazón latía tan tranquilo, no quería separarme, pero debíamos volver, y al fin decir todo.

Derek condujo hasta mi casa y se estaciono frente a ella, nos miramos unos segundos, estábamos nerviosos, pero seguros de lo que queríamos, ambos nos queremos, y queremos estar juntos, respire profundo y baje de la camioneta, el bajo y yo solo me quede parada, se que dirán que el es grande para mi,  que no es bueno salir con un hombre lobo, que sera peligroso, dios ¡deja de pensar en eso!, sentí la mano de Derek tomar la mía, ni cuenta me había dado de que estaba a un lado mio, puse atención y note que no había nadie en casa, genial, nervios para nada.

-no esta la moto de Scott, ni el auto de mamá, ¿quieres esperarlos o mañana lo hacemos?-

-no creo que tarden, le mande un mensaje a Scott que ya "iba", a si que debía salir de mi departamento ya, por lo cual hay que esperar, ¿tu madre a que hora sale?-

-no se a que hora salga ella, pero me conformo con decirle  Scott hoy, seria uno menos de quien preocuparme-

-bien, entonces hay que esperar- me sonrió con calidez.

-si, vamos a dentro- 

Entramos a casa y arroje mi bolso al sillón.

-iré a cambiarme, si quieres algo solo tómalo-

-te quiero a ti- dio esa sonrisa picara.

-a si- sonrei acercándome a el.

-si, pero no por que si llegan, creo que eso no los agradara nada- dijo y me sorprendió.

Es un hombre respetuoso, me encanta.

-bien- mordí mi labio -iré a cambiarme- subí corriendo las escaleras.

Al llegar arriba camine por el pasillo hasta mi cuarto, entre y me quite el vestido, saque de mi mueble de pijamas y ropa cómoda, esto:

No se por que pero quería provocar a Derek, y esta pijama  tal vez lo logre, baje las escaleras con una sonrisa mientras mordía mi labio

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No se por que pero quería provocar a Derek, y esta pijama  tal vez lo logre, baje las escaleras con una sonrisa mientras mordía mi labio.

-¿esa es tu pijama de siempre?- me miro fijo.

-no de siempre, ¿por que?- dije vacilando.

-nada, solo preguntaba- dijo intentando mirar otro lado.

¡Si!, lo tenia, gracias pijamas pequeñas de seda que seducen a los hombre.

-¿si?- dije acercándome -¿oh a caso te pone?-

-se lo que intentas hacer, y no-

-¿por que no?- dije con un puchero.

-¿tu que te imaginas que crees que pase si llega tu madre o Scott el cual puede oír a kilómetros de distancia mientras temernos sexo en la sala de tu casa?- me miro.

-tienes razón, ambos tendríamos serios problemas- 

No se la razón, pero enserio,  me sentía muy  excitada  tal vez la madurez que mostraba Derek, oh las consecuencias que se podrían causar.

-muchos problemas, así que no intentes seducirme con pijamas sexys, no funcionara-

-¿a no?- alce un  poco mas el short de la pijama, haciendo que se viera mas mi cuerpo -¿no crees que pueda lograrlo?-

-no,  esta vez no lo creo hermosa- sonrió.

-bien, lo intentare- sonrei y me acerque a el para sentarlo en el sofá.

El sonrió y nego, me senté encima de el y me acerque a su cuello, lo lamí hasta llegar al lóbulo de su oído y comencé a lamerlo mientras daba pequeñas mordidas con mis labios, escuche un pequeño gemido, y podía sentir a su miembro alborotarse, por lo cual comencé a mover mis caderas lentamente frotando su miembro.

-basta- dijo en un hilo de voz.

-no hasta conseguir lo que quiero-

-¿enserio?, ¿quieres que tu hermano, que aun tiene habilidades sobrenaturales  me de una paliza por abusar de su hermanita?-

-no dejaría que te tocara, solo yo puedo tocarte-

-no, no haré nada- nego mordiéndose el labio.

-bien, yo lo haré- sonrei y me arrodille en el suelo.

Desabroche su pantalón y note rápidamente como su miembro intentaba salí, lo libere y lo frote un poco causándole placer a Derek, de tanta veces teniendo sexo en mi vida y jamas había hecho un oral, intente hacerlo como mi mejor amiga de San Francisco  me había dicho, y al parecer no estaba tan desubicada, note como Derek tenia sus ojos cerrados mientras presionaba el sofá con sus manos y intentaba no producir ningún sonido, no le resulto tan fácil ya que algunos quejidos salían de el cuando abría sin querer la boca. 

Me pare y quite mi ropa lentamente mientras el me observaba con atención, me acerque  a el y subí encima, jugueteaba un poco antes de introducir su miembro dentro de mi, quería provocarlo mas.

-¿te gusta?- pregunte mientras seguía jugueteando.

-si...- lo mire como si le preguntara "¿solo eso?" -deja de jugar- me tomo de la cadera y me recostó en el sofá.

El estaba encima de mientras besaba mi cuello.

-lo lograste- dijo y entro en mi.

No pude evitar alzarme un poco, es que enserio el me hacia sentir lo que ningún otro chico logro, y no es por que fuera una zorra, bueno tal vez si un poco, pero a pesar del mucho sexo que eh tenido jamas sentí esto, eso que con solo una penetrada me causara enloquecer, el siguió cada vez mas rápido hasta que ambos llegamos al orgasmo, el salio de mi pero siguió arriba.

-me da igual si me matan por esto, fue increíble, no me importa si me destrozan los huesos-

-y decías que no lo lograría, no esta vez, decías- alce un ceja.

-lo siento, no puedo resistirme a ti, soy un poco débil-

-bien débil, párate que debes vestirte y yo tambien-

-bien- me miro unos segundos.

Se paro y se puso bien su pantalón mientras yo me ponía mi pijama.

Esperamos a Scott y mamá, y ninguno llegaba, pasaban las horas y ellos no aparecía, creo que mamá tenia turno doble, y tal vez Scott  no vendría, yo comenzaba a tener sueño, mis ojos se comenzaban a cerrar, no supe que hora era cuando quede completamente dormida en piernas de Derek.


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