Ambos son personas frías e indiferentes ¿Polos opuestos se atraen? Ellos son la respuesta.
____ la alumna más inteligente de toda la preparatoria siempre en el primer puesto, no suele expresar lo que siente, no le gusta hablar con sus compañeros; si...
Jin y mi lindo enamorado no estan peleados y me alegra saberlo.
Si algo sé es que nadie sabe de mi relación con mi profesor. Nos escondimos en los baños en la salida para poder besarnos es maravilloso.
Ha pasado unas tres semanas desde que Tae esta conmigo y no hay sospechas de nada.
Jin saldría de viaje unos días con Namjoon y me pidió que me comportara.
Son las tres de la tarde y no se que hacer por mi vida. Estoy aburrida en mi casa.
El teléfono de mi casa sono y fui a contestar.
-Linda ven a mi casa-dijo Taehyung con su voz ronca.
-¿Estás bien?-me preocupo.
-No mientras no estes a mi lado-su risita me enloquecio.
-Okey.
Termine la llamada y salí de mi casa.
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Me vestí, aseguré mi casa con la llave y corrí a la casa de Tae.
Esta se encontraba abierta, ingrese y cerre su puerta.
-Tae ¿Dónde estás?-pregunté.
Deje mi cartera en el sofá.
No me respondió y fui a buscarlo por el segundo piso, pensé que podría haberle pasado algo muy malo.
Subí un poco rápido por las escaleras y escuche unos sonidos en el dormitorio de Tae.
Abrí la puerta y encontre a Tae sentado mirando su laptop.
-Tae-llame su atención.
Él giro para verme, mire como se...masturbaba. Me sonroje.
-Lo siento-dije y salí corriendo.
Pero sus brazos estaban enredados en mi cintura. Podía sentir un bulto chocando con mi trasero.
Me sujeto fuerte a su pecho y me cargo.
Me obligo a sentarme encima de su entrepierna frente a su laptop.
-¿Sabés qué es ese video?-me pregunto.
Abri mis ojos para ver el video y apenas lo vi cerré mis ojos.
-Lo sé-me sonroje peor que un tomate.
-¿Quieres intentarlo?-su voz esta mas ronca que antes.
-N-no-dije segura de mis palabras.
-¿Quieres?-sabe como atacarme.
-S-soy virgen-confesé.
-Lo sé-me dijo sonriente.
Me cargo hasta su cama.
-Será un gusto ser el primero-su sonrisa me daba un poco de miedo.
-Tae aún soy menor y puede pasar muchas cosas-me asustaba lo que podía pasarle.
-No tengo miedo si es lo que te preocupa.
Él comenzo a desvestirse y yo cubrí mi cara de la vergüenza. Sentí como abría mis piernas y comenzaba a desvestirme.
-Tae mejor no-intente parar.
-Es muy tarde para controlarme-dijo sacando mi última prenda.
Mire de reojo como sacaba un condón de un sobre.
-Supongo que ya sabes como se llama-dijo poniendose ese condón.
Sus labios estaban sobre los míos.
-Estás lista ¿amor?-dijo con una sonrisa perversa.
No respondí. Jamás pensé experimentar esto, siempre escuche las experiencias de los demás pero nunca lo hice.
Sentí como algo penetraba mi interior, ardía demasiado, dolía.
-¡A-ah! duele mucho-chillé.
Unas lágrimas cayeron y el dolor desapareció. El placer aparecía.
-P-profesor-gemí.
Tae embestió más fuerte.
Me cargo a su baño y nos encerramos dentro. Giro la perilla de la ducha, el agua caía sobre nosotros. Las embestidas eran más fuerte que me debilitaba.
-Repite como me llamaste-su voz era muy tentadora.
-P-profesor Kim-gemí con dolor.
Tae dejo de penetrarme y me giro para verlo. No tenía fuerza ni podía mantenerme de pie.
Nos besamos y lo abracé.
-Me gustas mucho, Taehyung-confesé.
-Tú también me gustas, ___-su sonrisa apareció en su rostro.
Una sonrisa que tranquilizaba.
...
Me quedé en casa de Tae porque no podía caminar. Ahora sé que cuando tienes por primera vez sexo te desangras.
Una incógnita borrada de mi cabeza. Tae me ha consentido mucho es un amor.
Al tercer día pude caminar normal y salí de la casa de Tae. Me despedí de él y camine hasta mi casa.
Lo primero que hice fue ponerme mi pijama y mirar películas. Al día siguiente hice los mismo.
-Nunca me aburrire de ver esta película-dije mientras miraba Harry Potter.
La puerta sonó y alguien ingreso.
-¿Quién...-no puede seguir hablando-¡Jin! Hermanito ¿Qué tal tu viaje?
-Genial, Namjoon es muy fantástico.
-Lo sé y lo repites cada segundo-reí-ya deberían casarse.
-Por el momento creo que no, mis amigos y yo pensamos que podríamos dejar de ser profesores para ser cantantes.
-Mi hermano cantante seria muy asombroso-soñe por unos segundos.
-Verdad que sí.
-¡Sí!-grite de la emoción.
Me contó cada detalle de su viaje pero luego se cansó y fue a dormir. Yo hice lo mismo.
Mire por mi ventana la casa de Tae y él salió para verme también.
Saludé con mi mano. Él hizo un corazón son sus manos. Y yo solo sonreí.
Fueron unos segundos y me dormí.
La sangre se esparcía por el suelo. El grito de la gente que indicaba lo peor. Todos tipo de sonido era molesto. La sangre que corría de ese cuerpo tan delicado.
Me levanté de inmediato, el sudor se hizo presente en mi cuerpo. Mi respiración estaba agitada.
