A veces el destino cambia, en la vida de ambos maestros el destino los hizo cambiar sus vidas ahora Tigresa y Po tendrán vidas completamente diferentes
En medio del bosque Isaac y Hinata estaban a corriendo tratando d evitar la lluvia que estaba cayendo esa tarde, Isaac cubrió a Hinata con su abrigo mientras los dos corrían más rápido-
No puedo creer que nos agarrará la lluvia a medio camino -dijo Hinata molesta- te dije que podría llover, también que debíamos quedarnos en la aldea anterior
Lo sé, metí la pata pero ya estamos cerca de una aldea solo corre -dijo Isaac molesto, los dos llegaron a una aldea y entraron corriendo al primer hotel que vieron, apenas entraron notaron que también tenía un bar en la parte inferior, algunos animales estaban bebiendo formando parejas, los dos caminaron un momento y vieron a una jabalí de gran tamaño usando un mandil con un corazón, el jabalí estaba colocando algunas bebidas- queremos una habitación para descansar por hoy
Solo me queda una habitación segundo piso por el pasillo a la izquierda -dijo el jabalí calmado- cinco doscientos yuanes
El paga -dijo Hinata sonriendo señalando a Isaac mientras se azotaba un poco el pelo de la cabeza dejándolo caer mojado-
Solo tiene una cama -dijo el jabalí calmado-
Hiiii...¡págale! ,págale, claro que el paga! -Hinata mostró la bolsa de monedas de Isaac pero el se la quitó guardándola en su ropa-
La tomamos -dijo Isaac calmado- por cierto, ¿que tan cerca estamos de la ciudad del relámpago?
Están a tres horas de camino, pero tengan cuidado escuche que últimamente los que están viviendo ahí han sufrido ataques de algunos salvajes -dijo el jabalí serio e Isaac se acercó-
Dime más sobre esos salvajes -dijo Isaac serio-
Solo se que son guerreros que se han dejado cegar por la codicia y ahora roban a todos en la ciudad, no se mucho pero deberán vigilar sus dinero si es que no quieren quedarse sin comer -dijo el jabalí sonriendo-
Debe ser el siguiente pecado, la codicia -pensó Isaac serio y Hinata solo cerró los ojos manteniendo la calma-
Ah por cierto -dijo el jabalí calmado y los dos le pusieron atención- no se emocionen ni rompan la cama, es muy débil -Hinata sonrió sonrojada mientras jugaba con sus dedos pero Isaac se cruzó de brazos manteniendo una mirada extraña-
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Eh? -Isaac estaba confundido viendo al jabalí, después de un rato los dos fueron al cuarto notando que era un cuarto sencillo, con un baño, un armario para guardar ropa, dos ventanas y una entrada al baño donde solo había un suelo de madera y una tina- bien debemos descansar, hay que cambiarse de ropa o nos vamos a enfermar
Claro iré a cambiarme tu aaah sécate -dijo Hinata sonrojada y nerviosa, ella tomó algo de ropa y entró al baño donde comenzó a quitarse la ropa para tomar un baño de agua caliente, Isaac estaba quitándose su camisa y traje y vio un traje diferente dentro de su equipaje, Hinata salió con un traje similar al anterior mientras que Isaac se cubrió con una toalla azul y su ropa- bien ya estoy lista
