Capítulo 37

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Brayden y yo entramos por la puerta del restaurante y miramos entre todas las personas, hasta que encontramos la mesa donde estarán todos esperándonos, llegamos diez minutos tarde de lo acordado. Al reconocer el cabello morado de Mel, ambos nos acercamos hacia la larga mesa en la cual están todos sentados en sus sitios.

Todos nos miran y se levantan para saludarnos uno por uno. Están todos: Mel, Lander, Cody, Louis, Rob, Alex, Derek, Olivia y Maggie. Alissa parece que al final no ha venido.

Todos me saludan menos ella y Maggie, quienes están ambas juntas mirándonos a ambos y riendo y hablando entre ellas. Frunzo el ceño e intento ignorar las miradas que ellas me dan, centrándome en Lander quien está hablando con Brayden.

—Bueno, tomad asiento. A la parejita le hemos dejado un lugar juntos.

A un lado de él y de Mel, lejos de Alex y de Maggie. Suelto un suspiro, menos mal. Al menos están lejos y hay un poco de certeza en que no va a pasar nada, o al menos eso quiero creer.

Brayden suelta mi mano y me deja pasar a mi primero sentándome al lado de Mel, quien esboza una sonrisa ladeada y yo sé la devuelvo. Brayden se sienta a mi lado justo al lado de Lander y pedimos lo que vamos a tomar.

—Me alegra ver que seguís juntos –dice Mel– sois tan bonitos, me alegro tantísimo de que estéis juntos, de verdad.

Sonrío y ella me devuelve la sonrisa.

—No durarán mucho.
–escucho la voz de Maggie por detrás.

Alle, ignórala, solo quiere pelea y discutir y tú no vas a darle ese gusto.

Ignoro su voz afinada y me centro en Mel quien me habla de nuevo.

—Entonces, ¿qué tal lo pasasteis en el cumpleaños?

—Bueno, fue bien dentro de lo que cabe. Ya sabes, Brayden y Aleksey.. no se llevan precisamente bien.

Mel asiente con la cabeza y ríe; —Sí, lo sé.

Río junto a ella y noto una mirada clavada en mi, y al buscarla, aparece la mirada de Alex. Está mirándome fijamente y serio, hasta que ve que le estoy observando y esboza una ligera sonrisa.
Sonrío yo también y le devuelvo la sonrisa.
Alex está enfrente mia a dos sillas de Derek y Rob.

Al tener nuestra comida enfrente nuestro, empezamos a comer mientras hablamos unos con los otros. Con miradas de Alex durante toda la cena, miradas cómplices que sin quererlo, nos damos y sonrisas de por medio.

Quiero hablar con él, preguntarle cómo ha estado durante todo este tiempo. Es mi amigo también y quiero hablar con él. Pero sé que a Brayden le va a molestar y prefiero tener la noche en paz y que no hayan peleas de por medio entre ellos dos, es lo que menos quiero.

—Vamos a brindar.
–dice de repente Maggie y todas las miradas se centran en ella.

—¿El qué? ¿Que te has tirado a cinco tíos en una misma noche?
–dice Rob riendo y ella rueda los ojos.

—Sabes que eso no me ofende, sé más listo la próxima vez y curratelo más.
–le guiña un ojo y se levanta colocándose de pie alzando la copa que tiene entre sus manos.

Miro hacia Mel quien me mira confusa y extrañada.
¿Para qué hace esto Maggie?

Su mirada viaja hacia Brayden y hacia mi, mirándonos, con una sonrisa forzada y nada real y alza su brazo hacia arriba.

Entre nosotros y el destino Donde viven las historias. Descúbrelo ahora