Fue Aquella Navidad

🎄Diez🎄

>Último Capítulo<

Y por favor lean la notita al final.

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Como lo suponía, la platica con mi madre fue un tanto incomoda. Sobre todo porque se enojo con nosotros por haber inventado aquella mentira. Tenía un montón de argumentos atravesados en mi garganta listos para defendernos a Tyler y a mi. Pero ver la desaprobación en los ojos de mi madre me impidió hablar.

Me sentía muy mal por haberla engañado, por haber tenido que recurrir a una mentira para estar bien con todos y sentirme bien conmigo mismo.

—Estoy muy decepcionada de ti— dijo mi madre con los brazos cruzados sobre el pecho. No sé porque, pero ella lucía mucho más severa cuando estaba en la cocina —No creí que fueras capaz de mentirle a tu propia familia.

Murmuré un lo siento y clavé la vista en el suelo. Me sentía como un niño siendo regañado por hacer una travesura.

—La verdad no es culpa de Xander —Tyler rodeó mis hombros con su brazo y me pegó a su costado. —La idea de fingir ser novios fue mia.

—Bueno, no creo que hayas puesto una pistola en su cabeza para obligarlo a aceptar, así que los dos son igual de culpables.

—Y tiene razón, pero ¿Sabe? —el pelinegro suspiró y aunque no estaba viéndolo sabía que estaba sonriendo. —volvería a hacer todo esto si fuera necesario, solo para revivir el momento en que Xander y yo dejamos de fingir para hacer las cosas bien. Porque ahora realmente estamos saliendo.

Me hacía sentir un poco raro la idea de estar saliendo con Tyler de un momento a otro. No en el mal sentido, de hecho se sentía emocionante.

Alcé la cabeza para espiar la expresión de mamá y ella aun parecia enojada, pero también un poco curiosa.

—Aun me es difícil creer que hayan estudiado juntos desde pequeños y no se hubieran hecho tan cercanos hasta ahora —Pues a mi también me sorprendía —Pero supongo que es como mi abuela solía decir, los amores verdaderos se cocinan a fuego lento.

—Creame señora Harrison, entre nosotros hay mucho fuego.

—¡Tyler!—le dí un puñetazo en el brazo cosa que solo lo hizo reír. —Ya estabas tardando en decir algo indecente.

—Solo digo la verdad.

—Cállate.

—Cállame con un beso.

—Estamos frente a mi madre— me quejé— comportate.

—Por mi no te prepcupes Alexander, estoy perfectamente bien— mi madre se recostó contra uno de los gabinetes y jaló el cuenco con uvas, como si estuviera entretenida con una de sus telenovelas. —Vamos, sigan en lo suyo.

—Gracias suegrita, usted si me entiende— Tyler intento besarme, pero coloqué mi mano en su boca.

—Empiezo a pensar que soy la única persona cuerda en esta casa. —Mi madre se rió y se encogio de hombros. —Pero volviendo al asunto, quiero que sepas que lo siento mamá, no era mi intención mentir y se que no tengo excusa, pero lo hice porque no quería que volvieran a burlarse de mi por no tener pareja.

—Sipongo que es culpa mia y del resto de la familia. Nunca creí que nuestras bromas te afectaron tanto.

—En realidad lo que más le afecta son los comentarios pasivo-agresivos de su tia Beril. Ella siempre trata de dejarlo en ridículo —comento Tyler envolviédome entre sus brazos otra vez. Al parecer mi familia le había pegado la manía de abrazar. —Quizá debería de hablar con ella.