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POV Hana __________
Al día siguiente desperté sintiendo un cosquilleo en el cuello, dándome cuenta de que Hyungwon todavía estaba metido en la cama conmigo. Normalmente cuando yo despertaba él estaba en la cocina preparando el desayuno, por lo cual se me hacía muy extraño el que siguiera durmiendo, pero me parecía todavía más extraño el despertarme a su lado, porque nunca habíamos dormido juntos de esa forma. Había dormido con él uno de los primeros días que llevaba viviendo aquí antes, pero no en la misma situación, porque aquella vez ni él ni yo queríamos dormir juntos, es más, nisiquiera él estaba consciente de que yo estaba en su cama. Giré mi cabeza hacia atrás para poder verlo, sus ojos cerrados y haciendo un puchero con sus labios, ¿quién diría que a muchos les resultaba intimidante esa adorable persona?
Escuché como soltaba un sonido similar a un ronroneo y se acercó más a mi, colocando su nariz contra la parte de atrás de mi cabeza. Me quedé inmóvil sin saber que hacer, nunca lo había tenido tan cerca, y su respiración chocando en esa zona en específico me ponía nerviosa.
— Buenos días. — Habló él, haciéndome sentir escalofríos al escuchar su voz mañanera.
— Buen día...— Respondí, aún sin moverme.— Creí que seguías dormido.
— Acabo de despertar... — Sentí como su caliente respiración chocaba contra mi cuello otra vez.— ¿Como dormiste?
— Uh... y-yo dormí b-bien...— Le respondí tartamudeando, realmente estaba nerviosa, sentía que estábamos tan cerca que si hacia cualquier tipo de movimiento mi trasero tocaría una parte de él que no debería ser tocada, contuve la respiración intentando no moverme.
— ¿Te pasa algo? — Cuestionó, seguramente ya se había dado cuenta de lo nerviosa que estaba, solamente esperaba que no lo estuviera disfrutando.— Estas tensa...
— N-no... estoy bien...— Respondí, respirando entrecortadamente, toda aquella situación era demasiado para mi.— ¿Y tú qué tal dormiste?
— Muy bien...— Me dijo aún con su voz ronca, sentí como tomaba mis caderas y se acercaba más a mi, depositando un leve beso en mi cuello, cosa que me hizo dar un respingo y hacer exactamente lo que no quería hacer.
Apenas y sentí aquello en el trasero salí de la cama casi volando, pero como seguía envuelta en las sabanas, por poco y caigo al suelo.
— ¡Lo siento, lo siento, lo siento! — Le dije haciendo movimientos extraños con mis manos mientras me ponía de pie, sentía que mi cara iba a explotar de la vergüenza.— ¡Te juro que no fue mi intención!
— ¿Que te pasa? — Preguntó Hyungwon, con el ceño fruncido y mirándome con confusión desde la cama, donde por cierto, ya se encontraba sentado.
— ¡No lo hice a propósito!
— ¿No hiciste qué?
— ¡No quería tocarte ahí es que yo... — Me agaché cubriendo mi rostro con mis manos, quería que la tierra me tragara en ese momento.— ¡Dios mío, que vergüenza!
