Capítulo 15

50 3 0
                                    


Lucas le contó a Zafiro todo lo que había ocurrido aquella noche y ella no sabía qué decir.

- Pero, en la foto que vi había dos niños, ¿quién era el otro? - Lucas se quedó callado. - Dímelo, por favor.

- El chico de la otra foto era tu mejor amigo de la infancia... - Lucas miró a Eric quién no se atrevía a mirar a Zafiro.

- ¿Y qué pasa con eso? - ninguno de sus amigos la miraban. - ¡Hablad! Exijo saber que ocurre. ¿Lo han matado? - aunque insistía, nadie le respondía, así que fue directamente a Eric. - Eric, dímelo, sé que tu crees que es lo mejor.

- Zafiro, yo no soy el que tiene derecho a decirte algo. Es algo en lo que debemos estar de acuerdo. Lucas no cree que deba decírtelo.

- Mirad, necesito saberlo. No va a ser peor que todo esto. Por favor, no más mentiras, no me mintáis o me ocultéis información. 

- Está bien... Eric, díselo. Eres el que más de acuerdo estabas con contárselo.

Eric se acercó a Zafiro y le cogió las manos con fuerza. - Ese mejor amigo tuyo está vivo. - suspiró - Es...Alan.

Zafiro no podía creerlo. Le parecía demasiado irreal. ¿Cómo pudo ser amiga de Alan si ahora ni siquiera lo soportaba? ¿Qué estaba pasando?

- Zafiro, ¿estás bien? - le preguntó Eric.

- Em...sí. Bueno todo lo bien que se puede estar. - hubo un minuto de silencio. - Necesito irme un momento. - dicho eso, se levantó y fue a la habitación donde había dormido aquella noche.

Eric intentó ir tras ella, pero Lucas le pidió que le dejara espacio.


Una vez en la habitación observó los libros. Libros que seguramente había escogido su madre para ella, libros que no había podido leer...


Se sentó en la cama y tuvo la necesidad de buscar en los cajones a ver si encontraba algo de interés. En el segundo cajón había unas fotos de su infancia. Había una de Alan y Lucas, parecían llevarse bien. Había otra foto en la que aparecía ella, otra con Alan y mis padres y, por último, una de Alan solo.


- Ven, Zafiro. Cógeme. - reía un pequeño niño de ojos avellana y pelo negro.

- No tan rápido. - reía una niña de azules ojos. - Alan,espera, no te alejes tanto.

- Zafiro, ¿a qué no me pillas?

- Ya verás. - la niña corrió con todas sus fuerzas y, finalmente, lo alcanzó. - Pillado. - ambos rieron.

- ¿Sabes? Me lo paso muy bien contigo.

- Yo también disfruto de tu compañía. - dijo ella con una gran sonrisa.

- Vamos a jugar  en el columpio. - le propuso ella.

- Venga, vamos allá.

Y así, ambos se alejaron riendo.


De repente, alguien llamó a la puerta.

- ¿Sí?

- Zafiro, ¿podemos hablar? - era Eric.

- Sí...claro. Pasa.

Eric se sentó en la cama con cuidado. Se quedo un rato mirando a Zafiro. - ¿Cómo te encuentras?

- Estoy bien. Solo...son demasiadas cosas... Y sigo teniendo dudas. Hay cosas que no entiendo o que no recuerdo.

- No sé exactamente cómo te debes sentir, pero espero que sepas que todos te apoyamos. Vamos a ayudarte en todo lo que podamos. No estás sola. - dijo mirándola a los ojos.

- Gracias Eric. - dicho y hecho, lo abrazó.

- Vamos a cenar y después vamos a dormir. Mañana hablaremos de todo, ¿vale?

- Me parece bien. Em... ¿Eric?

- ¿Sí?

- ¿Te importaría dormir hoy conmigo? - ella parecía un perrito abandonado y a Eric le rompía el corazón verla de esa forma.

- Claro que no, hoy no te dejaré sola en ningún momento. No te preocupes. Anda, vamos a comer algo.

Ambos bajaron a comer para más tarde ir a descansar.

Mi primer beso (II)Where stories live. Discover now