✨; F A N T A S Y - Jaeyong

Chapter 2

-¿Te gustaba mucho? -Susurro mientras fingía anotar en una pequeña libreta y el rostro de Lee se ilumino por completo cuando notó que le hablaba-

-¡Sí! Tomaba uno cada vez que iba en dirección a la universidad, solía caminar hacia ella porque odiaba el transporte publico, la mañana era demasiado tranquila, fresca y acogedora con una café en mano mientras apreciabas el paisaje semi-nocturno apunto de amanecer.

-¿Qué clase de persona prefiere caminar que tomar el transporte? -frunció levemente el ceño dejando la libreta aún lado- 

-Yo lo era, déjame decirte que el ejercicio es bueno para la salud -comento con total orgullo subiendose a la barra de pedidos para poder verle desde ahí mientras jugaba con sus pies-

-¿Vuelves a ser mi madre? -Volvió a fruncir el ceño y se dedico a acomodar los menús sobre la barra- a todo esto ¿Qué estudiabas?

-Si yo fuera tu madre, ya tendría canas verdes -Bromeó y luego ladeo su cabeza un poco pensativo- No lo recuerdo. Solo recuerdo caminar todas las mañanas a la universidad junto con un portafolio

-¿Algo más? ¿Utilizabas algún uniforme?

-Es la universidad, a esa edad ya no te obligan a vestirte -Arrugó tenuemente su nariz hasta que chasqueo su lengua contra el paladar al venirse algo en su mente- solo recuerdo el puente de un parque cercano a la universidad y el nombre de una cafería "La punta del cielo"

-¿Ibas con mi enemigo? -Alzó una de sus cejas haciendose el ofendido pero al notar que otro empleado regreso a verle fingió estar limpiando la barra de atención-

-Disculpa por no conocer la cafetería del "príncipe" -Se rió de manera burlona-

Yoon Oh miró al menor sentado en la barra negando con la cabeza, Lee le había puesto la cafetería "El príncipe" porque decía que Yoon oh era como un príncipe atendiendo en el café aunque el verdadero nombre del lugar fuera "My angel". En ese momento tuvo que fingir seriedad cuando entro a la cafetería un chico alto de cabellos negros usando unos lentes oscuros.

-Un americano por favor -Habló el recién llegado, tenía un pequeño parche en la cien de lado derecho que mantuvo perdido a Yoon Oh por un momento, más que nada por la curiosidad de aquella herida sin notar que Lee se había bajado de la barra completamente asustado, sin poder entender porque sentía un miedo incontrolable al ver el nuevo cliente del mayor- ¿Sucede algo? -preguntó el cliente cuando no había respuesta de Yoon oh-

-¿Americano? ¿Puede esperar unos segundos? En unos momentos estará lista su orden -Comentó Yoon Oh con una sonrisa al reaccionar, típica para dar a un cliente-

-Que lindos hoyuelos -Respondió el chico mientras picaba la mejilla de castaño, este frunció levemente sus cejas, no estaba acostumbrado a recibir halagos de un cliente, no le gustaban apesar de que todo el tiempo tenía a las chicas de jóvenes grados haciendo fila para ser atendidas por él y no podía evitar sentir un aura incómoda ante su presencia- Espero entonces.

El chico se fue a sentar a una mesa dejando Yoon Oh solo para que pudiera pasar la orden a sus compañeros y entonces notó que Lee no estaba ¿Qué habría sucedido con ese chico? Hacia unos segundos no paraba de hablar tal cual guacamaya y ahora desaparecía, lo pensó cuando pasó la nota a sus compañeros de trabajo y cuando regreso a la caja se dio cuenta del sollozo proveniente debajo de la mesa, era Lee que estaba en posición fetal abrazándose así mismo.

-¿Qué te sucede? -Fingió agacharse para recoger algo llevando su mano hasta la mejilla del menor para darle una caricia o el propósito de ella porque a penas y podía sentirlo-

-¿Y-Ya se fue? -Regreso a ver al castaño con los ojos llorosos mientras intentaba cubrirse un poco con sus brazos si no hubiera sido por esa caricia-