Luces de esperanza

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Partí mi mañana normal, me bañé y desayuné, pero a medida que pasaba la hora todo se hacia insoportable otra vez, vino la psiquiatra a verme y le comenté mi angustia, que ya no quería seguir encerrada acá, que tampoco queria pensar en pasar de este encierro al psiquiátrico, dijo que le comentaría esto a la Doctora Gomez que es la que me esta tratando. Luego de eso, estuve con la kinesiologa, la cual vio que estaba mal y trató de aconsejarme, ya que, suelo hacerme expectativas en mi cabeza las cuales después terminan por decepcionarme y entristecerme otra vez, como por ejemplo, ahora que empiezo a pensar en que podrían sacarme la sonda el jueves o viernes, siendo que los doctores no han dicho nada y siguen monitoreando mi alimentación.
Tuve un momento de bajón, sumándole a que mis papás no pudieron venir, mi papá mas tarde me llamó y le explicó que por temas laborales no pudo y que mi mamá andaba en medico, ya que, mi hermana pequeña tenia gastroenteritis, y no me habían querido decir para no preocuparme, también hablé con mi mamá.
Mientras hablábamos le comente que estaba decidida a irme, que ya no quería seguir acá, que quería sacarme la sonda y continuar el tratamiento ambulatorio y le corté porque me comenzó a doler más la garganta con la sonda y tanta pena junta. Justo en el momento en que colgué la llamada decidiendo terminar con esto, aparecieron mis amigos preciosos Meli y Peña, fueron como una luz al verlos entrar por esa puerta, sólo atiné a abrazar a mi amiga y llorar, la necesitaba tanto, necesitaba escuchar sus palabras de aliento para seguir dando la lucha, ella siempre sabe que decirme, abrazar a mis niños fue lo mas reconfortante de todo este proceso, agradezco a dios siempre por tenerlos. Se quedaron mas tiempo de lo permitido, y fue genial porque pudieron acompañarme a tomar once hasta que el guardia llegó. Durante la once mi compañera la señora Mary me dio mermelada de damasco casera, estaba deliciosa, sabia a dulce de membrillo, fui muy feliz como una lombriz. En la tarde vi una película, pero se quedó pegado y no pude terminarla.
Mi compañera Mary nos contó que mañana por fin se va de alta, seguirá su tratamiento por cáncer al pulmón en su casa junto a su hijo, estoy muy feliz por ella, pero triste también porque la voy a extrañar mucho, ha sido la que he sentido mas cercana, conversaba harto con ella, hasta intercambiamos números porque a penas salga yo de acá la dejé invitada para que vaya a mi casa y conozca mi pueblo jajaja.
Cuando ya se me había pasado la pena y la rabia por la restricción de agua llamé a mi mamá para tranquilizarla, y contarle que ya estaba mucho mejor gracias a mis visitas, también salí con mi kinesiologo el cual me estuvo hablando de la teleton de este año, ya quedan solo tres días, quería poder verla desde mi casa.
En fin, fue un día lleno de emociones otra vez, espero mañana sea mejor, vienen mis papás, mi amiga Javi de la universidad, y mis amigos Nani y Seba de el liceo, ahora me comeré mi postre que ya es pura agua con este calor mientras veo la novela con mi Mami Mol.

Gritando Mi Silencio (Real)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora