Apartamento de Candice Tradeau White

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Capituló 7

Candice.

Este hombre me pone nerviosa y obviamente ya se dió cuenta de ello,  y para mi mala suerte la ninfa que llevo dentro me ha traicionado y dicho en voz alta que se cae de sabroso.

Aunque esto me haya avergonzado, he podido darme cuenta que le gusto, su bragueta estaba a punto de abrirse" uff pero que miembro tan dotado".

Finalmente he enviado los documentos a mi jefe, el señor Villers.
Por lo que ya puedo retirarme tranquila.

Al salir del edificio, una limosina me está esperando.
Por momento creí que era él, cuando para mi sorpresa es el chofer de  mi padre,  y yo en estas fachas.

¿Será que me espera algo aún peor el día de hoy?

Nerviosa subo a la limosina y el señor Johnson solo me observa detenidamente.
Cuando entró, veo a mi padre sonriéndome.

-¡banbina! ¿como estas mi princesa?
-Padre, ¿qué haces  aquí?
No se me ocurre preguntar algo diferente, estoy nerviosa, se que estoy en problemas.
Mi padre no sabía nada de este empleo, la última vez que hablamos fue cuando aún estaba en la Universidad.

- ¿qué sucede hija? Creí que te daría gusto verme.
- Perdona padre, Pero por supuesto que me da gusto verte.

Me he puesto nerviosa... no hubiera querido que me encontrara de esta manera.

-¿qué haces aquí Candice y vestida así?
Tu madre está preocupada por ti, no has retirado la mensualidad  de tu cuenta bancaria.

- ¿ Padre, como sabe que estaba aquí precisamente?
- ¿se te olvida quien soy?

Mi padre es sobreprotector, mi madre es la única que apoya mis ideales, no es que mi padre no me apoye, pero soy su única hija mujer y la menor, por lo que me sobreprotege.

-Padre, tengo un empleo y puedo proveer para mis gastos...
Si los necesito no dudaré en usarlo.

  Solo me falta que se ofrezca a llevarme a mi departamento, se dará cuenta en el suburbio que vivo.

-Padre, ¿cómo esta la familia?- Pregunto tratando de desviar el tema del trabajo.
-todo bien, todavía no puedo creer que has declinado nuestra oferta de trabajar cerca de la casa presidencial.
Sabes que puedes regresar cuando lo desees mi princesa.
Ahora te llevaré a tu departamento, quiero conocer dónde vives.

Mark conduzca donde la Niña le indique.

-Padre, yo me estoy quedando en un hotel, no es necesario que me acompañe
-¿Como? ¿En un hotel? Y ¿piensas caminar así semidesnuda?

Lo sabía, pondría mi  mundo de cabeza... jamás le han gustado los hoteles cuando éramos niños nos quedábamos largas horas esperando que regresaran de sus eventos y entrevistas de prensa.
Sabe que odio los hoteles.

-Candice Tradeau White, no me mientas... sé que odias los hoteles, la única razón que no me darías tu dirección o invitarías a tu departamento es porque no la estás pasando nada bien económicamente.

-Padre, tengo lo necesario para vivir... mi empleo es bien pagado para lo que desempeño.
-Cuanto podrías ganar de asistente de vicepresidencia.
-¿cómo sabe que mi trabajo es de asistente?
-Candice , yo se todo de mis hijos, Y la razón que no me llevas a tu hogar es porque vives en un  barrio que no está a tu altura Candice.

No replico en lo absoluto, debo respeto a mi padre y él se preocupa por mí, la única vez que me  llama por mi nombre, es porque está molesto.

-Candice,  si no vives como debe ser...te llevaré a Ontario y no regresaras a America. No puedo permitir que una Tradeau viva en estas condiciones, una cosa es que quieras ayudar a los necesitados y que estés aquí por  la labor que el dueño de estas empresas tiene con su beneficencia con Africa, y otra muy distinta que mi propia hija quiera vivir en las mismas condiciones.
Te exijo te mudes a vivir al departamento de Delaware plaza y no quiero escuchar un No, o en este momento nos marchamos en el primer vuelo.
Sabes que lo hago, más no provoques mi ira.

La última vez que mi padre me habló de esta manera fue cuando tuve mi primer encuentro romántico  con el chico de la preparatoria.
No puedo decir que no , me llevará y es dejar el proyecto que está bastante avanzado, y lo que es peor, me alejaré del Patriarca solo por contradecir la palabra de mi padre.

Por lo que he dado mi dirección, recogimos  mis cosas y me mudé al departamento de Delaware. Esta cerca de la plaza en el centro de la ciudad de Chicago.

Después de recoger mis cosas me instalo en el departamento,  es todo lujo.
Y no es que no me guste vivir cómoda , pero todo lo hice para estar cerca de él, el Patriarca, si sabe quien soy probablemente no me hubiera dado el empleo.

Cuando mi padre está a punto de despedirse y regresar a Ontario me ofrece una fuerte cantidad de dinero para la fundación... insistió en que  quiere asistir al evento. pero no me conviene , Albert se daría cuenta de inmediato.
Por lo que he aceptado  subastar una semana de vacaciones en nuestra cabaña en lago Louis, Canadá.

- Princesa me voy más tranquilo y llevaré buenas nuevas a tu madre , recuerda que te estoy vigilando Candice.
Hasta que te cases podré estar tranquilo, un día cuando tengas tus hijos nos comprenderás.

Las palabras de mi padre me han tocado el corazón y hecho reflexionar, tiene razón además aunque esté en America, si alguien me reconoce, hará un escándalo que perjudicará a mi hermano quien es el ministro actual.

Llegado el lunes, como todas las mañanas voy con ánimos e ilusión por encontrarme con él, para mi sorpresa,  mi jefe nos ha dicho que estará toda una semana de vacaciones.
Ahora que necesito hablar con Rosemary no se aparece por ningún lado.

Los días pasan y yo lo extraño, deseo verlo, sentir su aroma, ese aroma tan varonil , su olor a madera y sándalo que me enloquece.

- Candy estás perdida en tus pensamientos... ¿que te sucede? Preguntó Weisha
- no pasa nada, solo estoy preocupada, el joven Ardlay hizo este viaje así tan de pronto, de la nada.
¿Estará bien ?, ¿crees que salió con su novia?

- ¿Candy estás interesada en él?
- ¡Por supuesto que no! De donde sacas ese disparate.
Albert es todo un caballero y jamás me ha dado indicio de gustarle.
- ¿Albert ? Escúchate a ti misma , nadie le llama por su segundo nombre , ni siquiera el señor Villers...
- Weisha vamos a tomar una copa cuando salgamos, este lugar me asfixia.
- Valla,antes no querías salir de aquí hasta que todo el mundo se iba... apenas son las 4:00 Pm y tú ya quieres salir.
- no hagas más preguntas y salgamos.

Como puedo gritar que lo extraño, que me estoy muriendo de celos de imaginar que este con alguna mujer.
Diablos Albert, todavía no me follas y ya no puedo estar sin verte.

Llegamos al restaurante y lo primero que quiero es una botella completa de vino.
El ambiente está bueno, pero no dejo de pensar en él.
Unos tipos se acercan al bar y Weisha amablemente les acepta una copa.
Uno de ellos no me quita la mirada por lo que suelto mi cabello y me colocó mis lentes culo de botella.

- tu cara parece conocida.
- ¿ en serio? La tuya también.
¿visitas algún club Gay? Seguramente ahí nos hemos visto, mucho gusto soy lesbiana.

El tipo se aleja y Weisha quiere fulminarme con la mirada.

-¿ Candy pero que rayos te pasa ? El chico solo quería hacer conversación...
- pues yo no quiero hablar con nadie, estoy bien sola.
- ¿Sabes que te hace falta? Poner ese celular aún lado y dejar de observarlo cada dos minutos.
- lo tengo cerca por si Albert me habla o envía email, o el jefe Villers.
- ¿a estas horas ?
- Weisha por favor, disfruta, déjame en paz.
- Sabes que sucede contigo, te hace falta una buena cogida amiga, para que te quiten ese estrés.
- por Dios Weisha mira al rededor nadie se compara con él.

<La concha de su madre, otra vez volví a decirlo en voz alta>

- ¡Candice! ¿ estás enamorada del Patriarca ?
- Noo, tú me confundes , además he tomado unas copas demás.
Más bien tengo una propuesta para ti.
- no me cambies la conversación Candy.
- iremos a Irlanda.
- ¿Irlanda? Y conque dinero muy apenas tengo para pagar la mensualidad de mi apartamento.
- déjalo en mis manos , me acompañarás tenemos una Misión y es parte del proyecto " Fundación toca tu corazón.
A ver, tócatelo.
- Candy , ya estás pasada de copas.

Fue lo último que escuché cuando en eso entraron dos emails de él,

" el lunes estaré de regreso, espero que todo esté marchando bien"

¡Bah ! Email para todos los del banco y empresas.
y yo aquí con la concha mojada por él.

Continuará.....

El Patriarca AldlayWhere stories live. Discover now