Caperucita granate (One Piece)

Capítulo 6

Narra Perséfone.

Perséfone-¿En serio? ¡Qué guay!

Sentía que igual le estaba enseñando demasiado mis emociones, aún así a él parecía no importarle.

Law-¿Te gusta la medicina?

Perséfone-De pequeña quería ser doctora pero...Es muy difícil de estudiar y además en Foodvalten no hay universidad...

Law-Yo podría enseñarte algo.

Me gustaba la idea de que pudiese aprender algo de medicina.

Law-¿Por qué no te cambias de ropa mientras yo voy preparando todo? Tu ropa ya está limpia.

Perséfone-¿Podría darme una ducha?

Law-Claro, sígueme.

Narra Law.

Después de haber dejado a Perséfone-ya dentro del baño, me dispuse a dejarle la ropa encima de la cama. Vi que la había hecho pero yo por higiene (debido a lo ocurrido la noche anterior), cambié las sábanas.
Me pregunto qué habrá pensado esta mañana.

Por suerte mi casa era grande y tenía varios baños, por lo que podía ducharme en otra parte. Espero que pronto me pueda duchar con ella.

Perséfone-¿Law?

Law-Sí.

Perséfone-¿Dónde estás?

Los pasos se estaban acercando cada vez más, me adelanté a ella y abrí la puerta del baño.

Perséfone-Oh...Pensaba que estabas ya...[sonrojada].

Law-Solo me falta la camiseta.

Narra Perséfone.

¿Cómo podía estar tan tranquilo? Acabo de verle sin camiseta.
Salí de allí pitando en dirección al salón, me senté en el sofá y esperé hasta que el joven médico apareciese.

Law-¿Aún sigues roja? Increíble.

Perséfone-...

Ese comentario sólo consiguió que la intensidad del rojo aumentara.

Law me llevó hasta su biblioteca, me pidió que eligiera un libro y a partir de ahí, comenzó a explicarme cosas.

Law-¿Entiendes?

Perséfone-Sí, explicas muy bien. [sonriendo]

El ojigris iba a seguir enseñándome cosas pero se quedó quieto, como si escuchara algo.

Perséfone-¿Ocurre algo?

Law-Espera aquí un momento.

Perséfone-Vale.

Narra Law.

Había oído el timbre, a pesar de estar en la parte más profunda de la casa podía seguir oyendo todo a la perfección.
Abrí la puerta y me encontré con cierto híbrido de fénix.

Marco-¿Dónde está?

Law-¿Dónde está quién?

Marco-Ya sabes de quién estoy hablando.

Me quedé en silencio, no pensaba decirle nada más.

Marco-Lleva casi dos días desaparecida, ¿por qué no dejas que se vaya?

Law-¿Y por qué iba a hacerlo?

Marco-Porque quieras o no la gente se preocupa por ella.

Law-¿La gente o tú?

Marco-Tiene que volver a casa.

Marco intentó colarse, sin embargo, yo le cerré el paso.

Law-Buen intento.

Marco-¿Cómo sabes que no está marcada?

Law-Porque tendría la marca en un lugar visible.

Marco-O puede que no.

Law-¿De verdad piensas que me voy a creer eso? Dime Marco-ya, si la hubieses marcado, ¿no habría querido volver ya?

Marco-Tsk...

Law-Ahora será mi mate.

Marco-¿Me dejas al menos verla?

Law-No.

Marco-Somos amigos, te acabará preguntando por mí.

Law-Lo dudo mucho, no hay más que decir [cerrando la puerta].

Marco-Espera...¡Law!

Volví con Perséfone-ya, seguramente sé estuviese preguntado que dónde estaba.

Perséfone-¿Va todo bien?

Law-Por supuesto.

Comtinuará...