Capítulo VII

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Después de la llegada de los hermanos Sakamaki a la residencia de Heinz, y descubrir la existencia aparentemente oculta de las hermanas Tokisaki. Nada volvería a ser como antes. Más que todo para los Sakamaki; los Mukami, al contrario, se adaptaban al cambio ya que ellos solo seguían las ordenes de Heinz, bastaba para ellos el hecho de complacerlo sin justificativos.

Aunque el pasar de las horas y los días no aclaraban la situación por completo, a nadie parecía importarle, cada uno se guardaba en su pequeño mundo esperando el momento indicado para que lo incierto salga a la luz.

Mientras tanto, Shuu Sakamaki fue el único que mantuvo una breve practica con una de las hermanas Tokisaki. Raramente, no había sido como el esperaba, en realidad, le había agradado y simpatizó con su presencia, ansiaba volver a verla, pero el no iba a ceder en buscarla, no tenia  una razón para hacerlo,y además que ¿le diría al verla de nuevo?; necesitaba encontrar el momento justo. Crecía en el un interés por aquella chica, algo que todavía no había descifrado, en todos estos ciclos el no se había interesado ni dado importancia a nadie, ¿Por qué resulta diferente ahora? ¿Que lo había cautivado tanto de aquella chica que le quitaba el sueño y no paraba de rondar su nombre en su cabeza?.
Mas adelante lo comprobaría, era todo un enigma para el, nunca se había sentido así desde la muerte de Edgar, su único amigo de la infancia, el cual había dejado un profundo dolor. 
Aunque no volvería a caer en sentimientos humanos, lo daba por seguro. Aunque, ¿por cuanto tiempo podría resistirse a esa cruel tentación?.

[...]

-Yoshino- pronunció Yoshinon a su mejor amiga, quien extrañamente se encontraba distraída mirando hacía la ventana de su habitación que daba al inmenso jardín del castillo- Yoshino, ¿Me escuchas?-.

-Lo siento, Yoshinon- dijo Yoshino algo apenada- ¿Que me decías?-

Yoshinon suspiro profundamente, había interrumpido su fiesta del té para centrarse en un tema mas alarmante,que ponía en riesgo su pequeño mundo.

- ¿No te parece curioso?- insinuó la marioneta.

- ¿Que cosa Yoshinon?- pregunto ella algo confusa, no comprendía a que iba la pregunta.

- ¿Acaso no te das cuenta?- respondió Yoshinon dándose una palmada en su pequeña cabeza frustrado.

Yoshino solo negó con su cabeza.

-Desde que llegaron al castillo ninguno de esos vampiros raros se acercó- explicó Yoshinon- Deben estar tramando algo-.

-Quizás solo son algo tímidos y por eso no se han acercado aún- interpretó Yoshino, quitandole importancia al tema.

Desde la singular llegada de los hijos de Heinz, Yoshino había intentado acercarse, su curiosidad era nata, aunque no hubo mucho éxito, ya que se abstenía cuando se acercaba el momento. Ya al darse por vencida, dejo de intentarlo y se sumergió de nuevo en su rutina.

-¡No seas ingenua Yoshino!- gritó Yoshinon algo enfadado, lo que provocó un sobresalto a Yoshino- Debemos armar un plan para cuando ellos ataquen-.

Yoshino acarició la cabeza de su pequeña marioneta con efecto tranquilizador.

-No creo que sea así, debes calmarte- dijo Yoshino tranquila a su amigo- No te preocupes, Nee-san nos dirá que hacer si llega a ocurrir algo- .

-Solo me preocupo por ti, no quiero que nadie te haga daño- expresó Yoshinon tristemente.

Aunque Yoshinon perdiera por momentos los estribos; su relación era tan fuerte que nada en el mundo lograría separarlos, eran el uno para el otro, eso nunca cambiaría.

-Ya lo sé, y por eso estoy muy agradecida de tenerte- ambos se dieron un  abrazo consolador dando a entender que el tema se daba por finalizado, por ahora.

Espíritus Diabolik Lovers | El renacimiento del FénixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora