Nombre: Jelous
Genero: Romance
Era un día tranquilo salí a la calle con Evan no teníamos la menor idea de que haríamos solo estábamos caminando.
-Quien está más guapo yo o James Mcavoy-Solo para molestarlo pensaba decirle que James y no el.
-James-Digo y suelto una risita. Evan se queda serio y hace que me divierta más.
-Por que el y no yo?-
-Mmm déjame pensar por qué si-Acelero el paso y tuve que casi correr para alcanzarlo.
-A donde vas tan de prisa-
—A ningún lado—Dice cortante.
—Estas celoso por que escogí a James en vez de a ti—
—No no estoy celoso—Dice con su tipica voz cuando trata de ocultarme algo.
—Entonces note molesta si lo veo mañana—
—Entonces yo te acompaño—Dice apenas termino la oración. Sonrió me parece tierno que tenga celos gracias a mi.
—Lo sabía sabes que solo te quiero a ti y aún haci tienes celos— Digo riéndome.
Me pegó a el y pone su brazo alrededor de mi. —Es que eres demasiado hermosa y cualquiera te podría quitarte de mi lado—
—Amo cuando te pones haci de romántico—
—Solo estoy haci cuando estás aquí conmigo—Me da un beso suave en los labios.
Es tan lento que pareciera que tiene miedo de romperme o algo haci. Con mis manos acarició su rostro.
—Te amo Evan lo sabes no es haci—Digo mirando hacia arriba para encontrarme con sus ojos oscuros como la noche.
—Nunca es malo que me lo repitas—Sus manos en mi cintura hacen que me derrita.
—Crees que en cualquier momento llegue una cámara y se ponga a decir la noticia de que somos novios.
—A no viste la cámara de antes cuando nos besamos—Me guiña el ojo y lo abrazo.
Volvemos después de un largo día a casa. Bueno a la casa de Evan mejor dicho.
Está decorada con distintos tonos de negro café y blanco. También está llena de cuadros sin fotos dentro por alguna razón.
Supongo que salía Emma en todas. Y oh vaya sorpresa aparezco en una cuando fuimos a ese bar.
Recuerdo como hicimos el ridículo aquella noche. Un buu de Evan hizo que me sobresaltara.
—Perdon pero eyabas muy perdida pensando en James—
—Pensando en James? Estaba recordando lo de esa foto—Digo apuntándole con el dedo.
—Y para que no te obsesiones con James y no vayas a matarlo la siguiente semana que te toca verlo tú me encantas mucho mas—Beso sus labios y me sigue el cuento.
