Capítulo 30

570 27 0
                                    

-No me pasa nada, lo juro, solo que estoy teniendo unos problemas en el trabajo y me mantienen distraída, pero no es nada del otro mundo, solo que estaba harta y quise desahogarme llorando.- vi como asentía y supe que lo dejaría pasar aunque no le había convencido, era lo que mas me gustaba, que no insistía
-Lo dejare estar, pero como te este pasando algo grave y no me lo cuentes, recuerda que lo sabré de todas formas y en ese entonces me voy a enojar contigo mucho-Asentí, sabia que se va a enojar y no me va a perdonar, pero tenia una pizca de esperanza.
A la mañana siguiente me levante decidida a ir a hacer una denuncia, después de hablar por horas con Lina me termino de convencer, al llegar a la comisaría, les dije que quería hacer una denuncia y me guiaron a un despacho, diciéndome que en breve vendrá un policía, me quede esperando un buen rato y hasta que Amir llenó mi punto de vista, nos sorprendimos los dos.
-¿Sabrina que cojones haces aquí?-¿no es obvio? Vine a hacer una denuncia
-Vine a hacer una denuncia- lo dije cabizbaja. Se asustó, cuando se iba a sentar lo interrumpe
-No quiero que seas tu por favor que venga otro policía.-Se sorprendió al instante, se que no esperaba esa oración
-¿como?- Vi sorpresa y tristeza en su cara y me arrepentí al instante, pero no me sentiría para nada cómoda contándole parte de mi pasado, ese que quería olvidar.
-porfavor Amir, quiero acudir a ayuda pero no quiero que seas tu quien me la brinde. No me siento preparada aun para contártelo.-se lo dije sin pelos en la lengua, vi como asentía y se marchaba, sabia que se había enojado, pero eso no era lo importante, lo iba a remediar todo cuando tenga ese problema resuelto. Después de unos minutos entro otro policía, empezamos a hablar.
-A ver Sabrina, quiero que me expliques todo con sumo detalle, recuerda que hasta la mínima pista nos puede ayudar-Asentí y empece a contar
-En primaria estudiaba con uno llamado José, estaba enamorado de mi pero que mas daba, éramos pequeños, estuvo por años enamorado de mi y me lo confeso varias veces, pero yo no le daba importancia, pasaron los años y su amor por mi iba aumentando, cursamos secundaria juntos y luego nos separamos, y cada uno tomó su camino. Unos meses después de empezar mi carrera, lo volví a ver en la estación de autobuses, y desde ese maldito día no paraba de perseguirme, lo encontraba a todas partes y a todas horas, no sabia como deshacerme de el, me esperaba en la puerta de la universidad, cuando iba a trabajar, cuando volvía, era brutal su insistencia, pasaron meses y vi que cada vez se obsesionaba mas conmigo, no me dejaba tranquila, me perseguía a todas partes y a todas horas, no podía ver a ningún chico hablándome, le pegaba, se quedaba hasta las tantas delante de mi casa y cada vez que abría la ventana lo encontraba sentado ahí, ya no sabia que hacer ,hasta un día, intente buscar a su madre, y hable con ella, me confeso que tenia una enfermedad llamada limerencia.
-Se que usted es enfermera, así que le pido que me explique de que se trata esa enfermedad.
-es un estado mental involuntario el cual es el resultado de una atracción romántica por parte de una persona hacia otra, combinada con una necesidad obsesiva de ser correspondido de la misma forma.
-Resumiendo, es una obsesión hacia una persona.-Asentí
-Bueno, cuando me dijo que tenia esa enfermedad mental, supe que su obsesión no tenía límites y fue allí donde supe que necesitaba protección. Después fui directa a la policia y les conté todo, empezaron a protegerme y tal, hasta un día, un día que salí a tirar la basura, no se de donde carajo salió y me tapo la boca, quería abusar de mi-Recordar todo lo sucedido puso mis pelos de punta, lo recordaba todo como si fuera ayer
-quería violarte- termino el policía, porque vio que no continuaba, era incapaz de decir la palabra. Asentí y seguí contando
-bueno como que siempre había policías vigilándome, pudieron llegar a tiempo y salvarme, pero antes de detenerlo, me prometio que me haría suya tarde o temprano, me lo prometio, lo llevaron a un psiquiátrico y estuvo en rehabilitación por meses, cuando pensaba que todo había acabado y que seria incapaz de hacerme daño, va y vuelve a aparecer dispuesto a terminar lo que había empezado.-vi como apuntaba unas cuantas cosas a medida que iba explicando.
-Bueno no se preocupe, haremos lo que este en nuestras manos para volver a protegerla-Sonrei porque confiaba en ellos, después de intercambiar información, me fui a casa.
Estaba cenando cuando vi un mensaje de Amir que ponía" baja rápido ", deje de comer y baje
-Hola- lo salude pero ni siquiera me miro.
-Sube al coche- su voz era distinta, no era la dulce voz con la que me hablaba siempre, esa estaba llena de veneno

Sin alasWhere stories live. Discover now