- El placer es todo mio, Toneri- kun - una pequeña reverencia le siguió a esas sinceras palabras las cuales hicieron sonreír a peliblanco.

La cena fue muy grata para ambos los cuales prometieron volverse a ver, con el paso del tiempo ambos se volvían más sercanos, Hinata se sentía especial con sus palabras, le encantaba saber que podía confiar en el y que siempre estaría para ella; que no la jusgaría y la apoyaría, por lo cual esa amistad se volvió un romance lleno de amor, dulzura y mentiras.

- Por favor Hinata, ¿Cuánto tiempo más estarás de esa manera?-

- Lo siento, pero no puedo -

-Siempre es lo mismo, te estoy esperando pero aun así tengo mis necesidades- dijo el peliblanco

El amor puro e inocente se transformó en uno lleno de grietas el cual se resumía en celos, posesividad, control, exigencia y víctimisarce por parte de Toneri el cual ejercía todo ello en Hinata haciendo que ella estuviera siempre culpandose por no satisfacerlo como ahora, el Otsutsuki quiso nuevamente estar con la Hyuga pero ella lo rechazo al no querer el contacto físico con el. Para Hinata Hyuga la castidad era algo lo cual en su inocencia quería proteger Hasta la noche de su boda pero le era imposible con llevarla serca de el, la inocencia de esta no miraba las oscuras intenciones del albino hacia ella las que se resumía en el interés monetario, físico y social de su pareja.

- Se que las tiene pero ¿puedes entenderme a mi?- dijo ella con su vos lastimara y quebrada por el nudo en su garganta, le dolía que el no la entendiera y no se diera cuanta que aunque ella quería complacerle solo podía hacerlo en el matrimonio lo cual el se negaba rotundamente a ejercer a su lado, el jamás se casaría con ella, solo quería lo que tenia y ya, nada más. Un matrimonio lo ataria a una mujer la cual el solo la acompaña por conveniencia, nada más que eso

- Hinata, una mujer esta echa para satisfacer a el hombre, para nada más. No quiero casarme contigo porque si lo hago no tendrás al oportunidad de trabajar y te quedarás en casa como es debido así que entiende lo y quita esa idea estúpida de tu cabeza- con vos dura sentenció esas palabras las cuales dañaron el frágil corazón de la Hyuga, solo quería ser feliz pero de una u otra forma siempre tenía un problema con Toneri.


¿Alguna ves as sospechado que tu pareja te está engañando?

¿Alguna ves te as sentido tan inútil por no hacer nada para que la persona que amas no se aleje de ti?

¿Alguna ves te as sentido tan poca cosa y el causante de ello es el amor de tu vida?

Tres preguntas

Tres respuesta

Todas positivas

Esa era la descripción gráfica de como se sentía ahora, se sentía inútil para Toneri, se sentía traicionada por lo que sospechaba y que le ocurrió en el pasado, se sentía tan poco por todo lo que pasaba en su vida; tal ves Toneri no la golpeara pero se sentía herida y si fuerzas para poder hacer algo, tenia miedo de perderle, miedo de que todo lo que la hirió en el pasado se repitiera, miedo de tener razón en todos sus confusos sentimientos y pensamientos. No sabia que pensar o sentir, cada día era lo mismo, la indiferencia que le dedicaba Toneri, como la ignoraba, como parecía odiarla cada día más, su cara expresaba algo lo cual no desifraba ¿fastidio? ¿odio? ¿irritación? ¿asco? Eso algo que la torturaba por la noches y no la dejaba tener un sueño tranquilo.

- Estoy ocupado en el trabajo Hinata, no molestes ¿quieres?-

-Solo quería saber como estabas, lo siento-

-Estoy bien ¿feliz? Ahora deja de molestar que estoy ocupado-

- Lo siento, yo-

El hombre de mis sueños Where stories live. Discover now