•Día 30: Muerte•

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-Te amo tanto- dijo Burbuja una vez que volvía a abrazar a Boomer.

Habían estado cuatro años juntos, pasando viajes, comidas, salidas y departamento. Cuatro años de puro amor. Es cierto que en algunas ocasiones discutían por algunas situaciones complicadas pero siempre volvían a arreglarse. No podían no estar juntos. Estaban hechos el uno para el otro. Como los brownies con crema, una combinación perfecta.

-Yo te amo más- murmuró Boomer mientras acariciaba su mejilla con su nariz- Hueles tan bien; azúcar, flores y muchos colores....- Burbuja río al escuchar tal ocurrencia.

-¿Cómo huelen los colores?- preguntó con intriga.

-A ti- dijo mientras le daba un beso en los labios. Se acomodaron mejor en el sillón, de una forma en la que Burbuja quedó abrazando su cintura con sus piernas. Las manos de la rubia tomaron posesión del cuello de su novio. Lo atrajo hasta sus labios, mordiéndolos y acariciándolos. Boomer sonrió malicioso cuando vio las intensiones de su querida novia- ¿Así lo quieres?

-No quiero ser la adicta al sexo pero sí, así lo quiero- dijo cuando le sacaba la remera tocando cada abdominal que se cruzaba en su camino- Estás súperbueno, ¿lo sabías?

-Siempre lo supe- sus besos iban bajando cada vez. Burbuja recibía constantes descargas eléctricas cada vez que sentía sus manos en su cuerpo, cada vez que sentía los besos húmedos, cada vez que lo sentía a él. Sus piernas sentía que les fallaba. Ese hombre era su debilidad. Boomer sabía cuál era el efecto en ella, sabía cada punto sensible de su anatomía.

De repente las caricias se anularon.

-¿Qué pasa?- preguntó Burbuja excitada.

-Sonó el teléfono- dijo Boomer con una mueca de disgusto sabiendo qué iba a pasar.

-Cariño, no atiendas, por fi- suplicó ella esperanzada en que se quedaría.

-N-no me tardo- murmuró el muchacho poniéndose la remera de nuevo y tomando su móvil para hablar en una zona más privada.

La rubia se acomodó mejor su ropa para disimular un poco la situación que habían tenido. Sabía que el rollo no se iba a volver a repetir en esa noche.

Boomer al terminar la llamada tenía una cara peor que con la que contestó el móvil. No quería ni hablar con Brick pero si lo quería como familiar tenía que ayudarlo. Burbuja lo vio para saber qué mierda había pasado.

-Tengo que irme a lo de Brick- dijo dudoso ya sabía la reacción de la chica de ojos celestes.

-¡No! Olvídalo. Ya le diste dinero el domingo pasado. ¡No!- gritó exasperante Burbuja. El rubio se acercó y la miró a los ojos.

-Burbuja....es mi hermano y yo sé que puede cambiar, tengo fe en eso. Quiero ayudar a Brick- dijo tocándole suavemente la mejilla.

-Ve...pero por favor vuelve bien, ¿sí?- y se dieron un tierno beso de puro amor.

27 días después

Habían encontrado el cuerpo de Boomer hace ya varios días. Un vecino de un departamento lo encontró en su basurero. Cuando le hicieron los exámenes de la anatomía encontraron cortaduras, golpes y tres balazos en la espalda. También algún que otro resto de cocaína y marihuana pero no en la sangre.

Aunque no habían testigos, Burbuja ya sabía lo que había pasado; Brick no tenía plata para pagar sus "medicamento", entonces fue Boomer con el dinero como no era suficiente mataron a su novio, y si el mundo quería, Brick también estaría muerto.

Burbuja lamentaba el día en que se le estrujó el corazón por las palabras de su novio; Burbuja....es mi hermano y yo sé que puede cambiar, tengo fe en eso. Quiero ayudar a Brick.

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Espero que les haya entretenido, se me complico un poquito en hacerlo pero bueno, me gustó el resultado.
Este ya es el último capítulo, gracias a todos los que leyeron, comentaron y votaron. Estoy plenamente agradecida.
Los quiero.

PD: es mi primera historia terminada :).

30 Días de azúcar, flores y muchos colores [TERMINADA] [EDITANDO]Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz