Capítulo 11: Tener lo suficiente

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Gu Yunjue repentinamente llamó a Yue Mingze, "Hermano mayor Maestro de Secta, no hay necesidad de irse todavía. Antes dijiste que no habías planeado contárselo a el Maestro. ¿Quién te hizo cambiar de opinión?

Yue Mingze estaba asombrado mientras miraba a Gu Yunjue a los ojos. Él realmente quería encontrar algunas pistas en ellos. Era una pena que además de la curiosidad infantil, no pudiera encontrar frialdad o maldad dentro de ellos. Él sonrió levemente y respondió suavemente: "Era el élder Zheng, que también era hermano mayor del tío Marcial mientras ambos estaban bajo el mismo Maestro".

Mu Chen se burló fríamente y levantó una ceja hacia Yue Mingze. Mu Chen se preguntó si vencer a Yue Mingze resolvería el problema del otro de ser débil de corazón. [1]

Yue Mingze sintió que algo andaba mal y él se escabulló de inmediato.

Una vez que Yue Mingze regresó a casa, pensó en cómo debería escribirle a Secta de las Diez Mil Espadas.

Pensando hasta ese punto, el Maestro de Secta Yue ya no podía seguir fingiendo. Él ferozmente agarró su cabello. Tenía ganas de golpearse la cabeza contra la pared todo el tiempo. La razón que su tío marcial le había dado no podía usarse. ¿Qué razón podría usar para rechazarlos que no causaría ningún problema? Yue Mingze de repente pensó en los ojos de Gu Yunjue desde antes. La mente de Yue Mingze se movió. ¡Él tenía una idea!

¿No sería Quinto Hermano Menor la mejor razón? El discípulo de Mu Chen era demasiado joven y no podía separarse de su Maestro. Este tipo de razón era algo que incluso Secta de las Diez Mil Espadas no podía rechazar. En este momento, el Maestro de Secta Yue se sentía como si fuera un genio.

Mientras Yue Mingze se sentía emocionado, no sabía cómo se sentían las otras personas que lo vieron antes ...

Después de que Yue Mingze se había ido, Gu Yunjue juntó sus manos en la cara de Mu Chen. La expresión en sus ojos era escalofriante. Dentro del corazón de su Maestro, no debería haber nadie que le pareciera atractivo a excepción de Gu Yunjue. ¿Por qué debería preocuparse por una pequeña persona como Ji Qingyuan? Si Mu Chen quería los tres reinos, Gu Yunjue todavía lo alabaría antes de ofrecerlo todo a él. Su Maestro no necesitaba pensar mucho en eso. Todo lo que su Maestro tenía que hacer era mantener sus ojos solo en su discípulo.

Mu Chen se quitó impotente las dos garras que tenía en la cara. A este pequeño discípulo realmente le gustaba hacer este tipo de acción. Quizás tenía que ver con su intimidad y dependencia hacia su Maestro. Sin embargo, Mu Chen no podía dejar que su discípulo se acostumbrara a esto. Como un Maestro estricto que no estropearía a su discípulo, necesitaba detenerlo.

Gu Yunjue se acercó tercamente a Mu Chen una vez más. Sus dos manos descansaron sobre los hombros de Mu Chen. Gu Yunjue y Mu Chen estaban tan cerca el uno del otro que sus respiraciones eran conmovedoras. No importa qué, Gu Yunjue no pudo calmar la preocupación dentro de su corazón. Se sentía como si hubiera una vacante dentro de su corazón. Sin embargo, no sabía cómo llenarlo. Sólo al estar más cerca y tocar al hombre a su lado, Gu Yunjue podía sentir que este hombre le pertenecía. Los cautivadores ojos de flor de melocotón de Gu Yunjue no podían ocultar la malicia dentro de ellos. Si bien sus ojos negros como la brea estaban serenos como el Mar Negro sin olas dentro, parecía haber una loca tormenta en sus ojos.

Sonrió levemente y le preguntó a Mu Chen: "Maestro, ¿con quién dijiste que querías casarte ahora?"

Mu Chen una vez más le quitó las manos a Gu Yunjue. Él firmemente se aferró a las dos garras de Gu Yunjue para evitar que volviera a actuar. Mu Chen inclinó levemente la cabeza y por lo tanto perdió la expresión actual en la cara de Gu Yunjue.

The Daily Task of Preventing My Disciple from Turning to the Dark Side-EspañolWhere stories live. Discover now