Capítulo 3
Tarde
Chan no llegaba a entender del todo como habia pasado de estar entrando en una casi total depresión en el suelo de la casa de su padre, a estar caminando junto a Byeong hablando animadamente sobre que sabor de helado era mejor. Al no tener el clima adecuado, no podía comprobar la teoria del pelirrojo que consistia en que era mucho mejor el mezclar todos los sabores a conformarse con solo uno, aunque por el momento sonaba razonable. En algún momento la conversación pasó a lo que pasaba por sus vidas y su mente en aquellos momentos.
--No creo que tengan mucho futuro en mi...-- Era la primera vez en el poco tiempo que le conocía, que Chan había visto un semblante triste en Jason. Esperaba no verlo nunca más.-- Bueno, mis padres, en la escuela... Todos saben que me gusta bailar, que lo hago "bien", pero aún así...
Byeongkwan tenia una idea bastante clara de que era lo que queria de su vida, bailar. Ser un artista, un idol, una estrella, a quien la gente pudiera admirar, era seguro que lo lograria si no fuera porque le cortaban sus alas, iniciativa no le faltaba, es más, parecia estar dispuesto a todo por lograrlo.
--Yo creo que si puedes hacerlo.
--No me has visto hacerlo nunca.
Chan detuvo su camino para hacerle voltear y quedar frente a frente con el, en milisegundos analizó cada parte del rostro del contrario, admirando cada razgo y dejandolo memorizado en un lugar de su memoria en el cual sabría nunca lo perdería, cuando estuvo seguro de que ni por casualidad podria olvidar ni el más minimo detalle de sus facciones posó delicadamente sus manos en los hombros del contrario, manteniendo una respetuosa distancia entre ambos al hablar.
--No necesito haberlo echo para saber que lo haces de maravilla.
Hubo unos segundos de silencios en los que (al menos para Chan), todo el sonido alrededor, el movimiento, incluso las sensaciones exteriores habian desaparecido. Obviamente no tenía nada que ver con el echo de que estuvieran viendose frente a frente sin quitar la mirada en ningún momento, claro que no ¿Que estupidez era aquella? No había absolutamente nada más lejos de la realidad.
--Me mantendré cerca de ti cuando quiera subir mi ego, gracias-- Musitó Jason haciendo su sonrisa un poco más sincera de lo que había sido anteriormente.-- Muchas gracias~
-- Es mi trabajo, Kwannie~ Eso hacen los amigos ¿No?
[ o ]
Jamás, nunca, absolutamente nunca, jamás de los jamases, Chan habia estado en la calle tan tarde como aquella vez. Debía admitir que las estrellas y la luna se veian mucho más preciosas viendolas recostado en el pasto que cuando las veía antes de dormir por su ventana en casa de su señora madre.
La conversación había decaido lentamente a un ritmo que hacía parecer como si no hubiera pasado, al momento en que ambos chicos se quedaron en silencio no fué molesto para ninguno, era mucho más comodo que ningún otro momento anterior, solo las respiraciones acompasadas de ambos y algún cantar de un grillo ocacional les acompañaban entre el vacío de las calles. Hubiera sido mejor si estuvieran en un real lugar abierto y no en un parque a unas cuadras de sus hogares, recostados en el pasto sintetico lado a lado (estaban en direcciones opuestas, por lo cual si giraban la cabeza sus miradas se cruzaban). En un momento, casi sin pensar, Jason extendió una de sus manos hacia el cielo con la ilusión clavada en su mirar, YooChan lo sabía porque estaba mirandole cuando efectuó aquella acción.
--Una vez... Me contaron una historia de dos estrellas... --Susurró-- Se trataba de una princesa... Casi tan bonita como lo eres tu~
--¿Soy bonita?-- No rió, solamente porque no deseaba romper el ambiente que se habia formado.
--Mucho~ -- Sonrió el rubio-- A ella le gustaba tejer a orillas del río, todo el tiempo, por eso nunca tenía tiempo para encontrar a alguien de quien enamorarse y casarse. Pero su padre, el rey, le presentó a un chico, un pastor, se enamoraron nada más verse y se casaron de inmediato, estaban tan encariñados que dejaron de lado sus trabajos, todo por estra juntos el mayor tiempo posible, eso hizo enojar al Rey que decidió separarlos por el bien de todos...
-- ¿Y ellos dejaron que sucediera?-- Preguntó horrorizado Chan interrumpiendo la narración.
Le parecía una gran estupidez el separar a una persona de otra solo porque quisiera pasar tiempo con otra, aunque fuera unicamente una historia, no lograba dejar de pensar en ello. También era una estupidez el dejar de lado todo por aquello, ¿No habia un punto medio? Eso era lo malo de las historias, nunca había un punto medio. Todo era negro o blanco, nunca gris.
--Pués... Ella imploró a su padre para que les dejara verse~ Cuando el la vió llorar por su esposo, accedió y los dejó verse el septimo día del septimo més lunar, en un puente que les únia... Cada vez que eso sucede, las estrellas alrededor pierden un poco de su luz, dejando ver el puente donde se ven.
--¿Eso ocurre realmente?
--Claro que si, si no, no te lo estaría contando...-Guardó unos segundos de silencio-- Te irás al final de las vacaciones ¿No?
Chan asintió con pesar, el quedarse ya era una gran idea si podía mantener esas ocaciones, nunca habia disfrutado tanto hablando con alguien y saltado las reglas de sus padres sin temer a las concecuencias por ello. Eso le recordaba que probablemente ya debería estar llegando a casa...
--Falta bastante para eso, Jason... Además, volveré en las otras~ Al menos no tendremos que esperar al septimo día del septimo més para volver a vernos ¿No crees?
Tenían la peor suerte del mundo si se podía decir así, justo al momento en que Chan dejó de mirarle para dirigir su sonrisa hacia el cielo, Byeong giró a verle a el, sonriendole a el.
--Amén por eso, princesa.
--Amén, pastor~
Entre las risas de ambos jovenes, fué casi imperceptible el grito de un adulto realmente enojado gritando el nombre que Kang YooChan.
Casi.
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•Smile 4 Me• 「笑う」•A.C.E•
RomanceLa sonrisa de Chan es falsa, casi tanto como el color rojo del cabello de Byeong. Desea poder ser el mismo. Byeong está dispuesto a ayudarle, a pesar de que no fueran más que horas (y contando) desde que se hubieran encontrado por casualidad en la c...
