narra Jake:
Aburrida. Aburrida es la vida. Llevo sintiendo un vacío en mi interior toda la vida, soy feliz pero siento como que me falta algo.
Estaba yo en mi oficina, (soy jefe de la mafia china), recogiendo mis cosas. Cuando Finn uno de mis subordinados entra en mi oficina. -Hey, jefe- me dice sonriendo como siempre.-¿que quieres?- le digo con mi tipica cara seria. -hemos encontrado en la calle algo interesante- me dice con una sonrisa malefica -aver ¿qué es?- le digo sin interés acompañado de un suspiro.
-Eso lo tendrás que ver tu mismo- me dice aún con su sonrisa llena de malicia -Tsk- digo chasqueando la lengua enojado.
Salimos de mi oficina a la sala de espera, y me encuentro todos alrededor de el sillón.
-Apartaos- les digo, estos obedecen. Miro curioso al sillón y me encuentro con una sorpresa. Un chico con el pelo negro, alto (1.82), delgado, muy atractivo, inconsciente acostado en el sillón. Y... algo que parecía... ¿una cola?.
-Haber- dije -que os tengo dicho de recojer gente rara por la calle-al acabar de decir esto solté un respiro. Todos me miraban con cara de corderito pidiendo que lo curara. -Tsk. Hacer lo que querais- le dije un poco enfadado. Me senté en un sillón observando como curaban a aquel chico con una cola. Cuando terminaron de curarlo, éste se empezó a despertar.
Abría los ojos poco a poco, hasta que se sentó y empezó a mirarnos a todos confuso.
Dió un gran salto sorprendente para ser un chico, y cojío la katana que estaba apoyada en el sillón. Y la desenfundó haciendo que unas llamas azules salieran de sus ojos azul turquesa y otras llamas envolvían su katana.
Parecía bastante decidido a atacarnos. -Mierda- le escuché susurrar. Depronto se puso recto cerrando los ojos y suspirando lentamente. Las llamas azules desaparecieron, y volvió a enfundar la katana.
Miré hacia mis subordinados y todos estaban con la boca abierta. Yo solo seguía con mi expresion seria pero en el fondo estaba igual de sorprendido.
El chico después de estar mirandonos unos segundos, soltó una sonrisa de oreja a oreja. -Lo siento por asustaros- dijo este mientras que movía su larga cola de un lado a otro. Al parecer este se dió cuenta y rápidamente la escondió debajo de su sudadera.
El chico empezó a reirse nerviosamente. Yo me quedé mirandole, al parecer se dió cuenta y empezó a mirarme tambíen, A los segundos de mirarme me suelta una sonrisa. Yo le miro sorprendido.
-¿qué eres?- le pregunta Finn. -un demonio- le dice tranquilamente como si fuera la cosa más normal del mundo. Todos lo miran sorprendiodos por la tranquilidad que había dicho eso.
Entonces, de reènte el chico vuelve a sacar su katana y de nuevo salen las llamas azules, sale corriendo hacia una de las ventanas de la habitación y se tira sobre ellas. Un montón de cristales salen disparados hacia afuera.
Todos corremos a mirar por las ventanas y lo vemos luchando contra un horripilante y feo monstruo. Al cabo de unos segundos lo corta a la mitad, antes de que el monstruo desaparezca salta hacia la azotea de un edificio de delante que había enfrente.
Después de este acto cae inconsciente.
