Bulimia || ym

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Había llegado ya la última carta, que era un tanto diferente a las demás, pues este tenía un pequeño moño dorado adornándola.

Con nervios comenzó a abrirla y supo que está contendría algo importante por lo que la tomó con suavidad y por fin decidió leerla.

[Carta número 4]

"¿Sabes que día será mañana? ¿No lo sabes? Mañana será tu cumpleaños bebé. Mañana cumplirás otro año más de vida y me gustaría seguir a tu lado todo el tiempo posible. No te miento, en estos momentos me siento muy mal, te extraño tanto JiMin, por favor, vuelve.

Siempre te amará; Min YoonGi."

En estos momento JiMin estaba soltando pequeñas lágrimas que se resbalaban con rapidez por sus mejillas, su corazón dolía, sabía que estaba haciendo todo mal. Estaba siendo egoísta con YoonGi y tenía que arreglarlo lo antes posible. Además de que sin haberse dado cuenta, ya estaba siendo su cumpleaños.

Se levantó rápido de su cama y decidió darse una ducha rápida, su tiempo se estaba acabando. Apenas terminó de ducharse, se secó rápidamente y se vistió con algo presentable para después salir corriendo hacia la casa de YoonGi que estaba a su lado.

Se detuvo afuera de puerta y alzó su mano para tocar la puerta pero antes de poder hacerlo, YoonGi se adelantó y abrió la puerta y dejó ver un ramo de flores en su mano.

Ambos se miraron desconcertados y YoonGi fue el primero en dar un paso y atrapar a JiMin entre sus brazos. Se abrazaron como si fuera su última vez juntos. Ambos tenían su corazón latiendo rápidamente, podría decirse que estaban en una competencia por ver quién latía más rápido. Tardaron minutos en su abrazo pero sinceramente ninguno quería separarse.

YoonGi se aparto con una sonrisa y JiMin pudo ver sus mejillas húmedas.

¿YoonGi había llorado?

JiMin tomó de los brazos de YoonGi y lo acerco para darle un pequeño beso en la comisura de sus labios. YoonGi quién lo vio sorprendido, tomó de sus mejillas y se acercó lentamente para tomar de su labio inferior y succionarlo mientras un leve jadeo salía de la garganta de JiMin.

Ambos disfrutaban de aquel beso, sus bocas se juntaban a la perfección y sus chasquidos era lo único que ambos podían escuchar.

Cuando el aire hizo falta, ambos se separaron con los labios rojizos y las mejillas sonrojadas. YoonGi sin decir nada tomó la mano de JiMin e hizo que entrara a su cálido hogar.

Hasta aquí termina este bello maratón. Se los debía desde hace muuuuucho, repito, es mi primera vez así que lo siento si fue un poco aburrido. Espero que lo hayan disfrutado ❤️.