Decisiones Nocturnas |Izzy Stradlin|

Capítulo 46: Primera Evidencia.

Narra Solange.

- ¿Y qué haces bonita?- Axl se paró a mi lado e imitó lo que hacía. Estábamos los dos frente a la ventana de la sala, observando la calle. Él era el único que andaba despierto a esta altura de la tarde.- ¿De verdad no vas hablarle al imbécil de Izzy?

- No, y ahora deja de molestar con lo mismo. No tengo ganas de ni si quiera verle la cara.- Contesté molesta, sin verlo al rostro, pues prefería distraer un poco mi vista.

- Si no quieres verlo a la cara ¿Para qué viniste a la casa? Pensé que ibas a trabajar hasta tarde de mesera.- Volvió a abrir la boca, haciendo que poco a poco mi paciencia se fuera desvaneciendo. De verdad que no tenía ganas de hablar con nadie, pero que por más no quisiera, debía de hacerlo. Algo de información podría sacarle a Axl.

- Mmm... a ver.- Entoné de forma fingida mi amabilidad.- Estoy aquí, porque tu mejor amigo, hijo de puta, se fue con Annica anoche.- Cerré la cortina, dejando de hacer lo que hacía y así, observar los ojos verdes del pelirrojo.- ¡ES QUE LO ESTOY COMENZANDO A ODIAR AXL! ¡IZZY ME DESESPERA!

- ¿Te desespera?- Axl, me tomó por los hombros y me sonrió como si entendiera muy bien el por qué de toda mi discusión entre Izzy y yo, aunque también podía deducir que su sonrisa, no era más que diversión absoluta.- No creo que lo odies, y no creo que se haya acostado con Annica ¿Ahora dime por qué diablos lo odias?

- ¿Cómo que por qué?- Contesté molesta.- Tú lo sabes muy bien Axl.- Coloqué mi dedo sobre su pecho desnudo y lo seguí con la mirada.- Tú e Izzy han estado en ese mismo sucio negocio ¡Tienes que ayudarme! Él es tu mejor amigo.

-Pero tú no eres su perra mamá.- Me incriminó rápidamente. Haciendo que sea la primera razón, de las muchas que me faltaba por descubrir.- A ver, Sol.- Dió un suspiro forzado, y volvió a hablar.- Entiende que si él se largó de Lafayette, fue para que nadie lo controlara y nadie lo jodiera ¿Y ahora tú vienes y pretendes controlarlo? -Rió y me soltó finalmente con suavidad.- Eso no va a pasar Solange.

¿Pretendo controlarlo? ¿Yo pretendo eso? Me cuestioné, rápidamente. Es que era muy evidente, era obvio que no ¡Claro que no! Esa no era la verdadera finalidad de estar aquí. Ese no era el plan. 

- ¿Controlarlo?- Reí.- Tú sabes muy bien Axl y te haces.- Continué enojada, realmente quería que él entendiera mi punto.- Eres el único que junto a Izzy sabe lo del negocio de mi familia. Estoy cansada de esto. Izzy actúa como si fuese normal, cuando no lo es. Él cree que es habitual recibir diariamente amenazas, y peor aún, piensa que estar escondiéndonos, va a ser el modo de vida. Creo que si uno lo piensa bien, se va a dar cuenta que esto no tiene pies ni cabeza. Una relación así, no va a funcionar. No, mientras sigamos en este mismo círculo vicioso.

- Pero si sabes que no va a funcionar ¿Por qué mierda estás con él? 

He ahí la pregunta que responde a todo estos escritos. Es esa maldita pregunta que responde a todas estas cuestiones y a todo este secretismo que se genera en lo que escribo. Y lamentablemente  en mi experiencia con Izzy Stradlin. No había forma, de ninguna manera había forma de que yo le pudiera responder a Axl con alguna respuesta coherente. Era impensable hacerlo en aquel momento. Era la primera evidencia de una larga lista que me ponía bajo la luz.

Desvié la mirada hacia un lado de la habitación, esperando que la respuesta "idónea" saliera de la pared, sin embargo y obviamente eso nunca pasó. Mi mente en blanco, me trajo muchos recuerdos y muchas cosas que me hacían convencerme una vez más de que estaba bien lo que estaba haciendo, y que para nada debía de mirar para atrás, era simplemente seguir adelante, como siempre. 

- ¿Oye?- Volvió a llamarme.- ¿Por qué mierda sigues con Izzy, entonces?

Maldito bloqueo mental, pensé. 

- Porque... Porque me gusta. Me encanta, y me jode que el idiota aún no venga. Es que de verdad no sé que hacer ¡No sé! Maldita sea.- Pasé mis manos por mi rostro y como un recorrido, mis dedos fueron hasta mi cabello, jalando un poco de estos. Tenía muchos pensamientos en conflicto.

Estaba segura que a esta altura de la conversación, Axl estaba pensando que me veía como una completa loca, o quizás como alguien extraña, que siempre daba respuestas inconclusas o  que simplemente se demoraba en darlas, porque en mi mente, antes de hablar, yo era consciente que a ciertas respuestas, le daba algunas "pinceladas".

- Mierda... ¿Sabes? Quisiera seguir hablado del idiota de Izzy, pero tengo una "cita" con Erin.- Remarcó lo palabra cita, siendo más que seguro que se iba a follar alguien más que no era ella.- Debo de irme. Slash está en su habitación, por si sales de casa.

- Claro. -Di una sonrisa triste que no se leía muy bien y que fue lo necesario para despedir al ojiverde. 

De verdad que me mataba, toda la situación se me hacía tan agónica, que no sabía como manejarlo. Sin embargo, también pensaba en la parte amarga y agria que no quería recordar. Annica.