¿Soy libre? (Yoonmin - NamMin) (3)

Capítulo 17

— ¿Qué? — dije confundido.

— ¿Quieres ser mi novio? Jimin. — repitió Yoongi. Sosteniendo mi mano. La de el temblaba cada vez que acariciaba mi piel con sus dedos.

— Yo no m~me esperaba esto Yoongi — dije intentando sonreír mientras mi boca lentamente empezaba a temblar. — Yoongi, yo siento cosas por ti.

— ¿Si? — pregunto esbozando una sonrisa más grande mostrando sus encías.

— Si, me enamore de ti sin darme cuenta. — Dije mientras dejaba de lado el regalo y agarraba su otra mano. — ¿Tu qué sientes por mí?

— Te amo tanto Jimin, quiero cuidarte, quiero amarte, quiero protegerte. Siento tantas cosas por tí, no se en que momento me empezaste a gustar, pero lo que si sé es que te amare. ¿Quieres ser mi novio y ver mi lado más cursi que tengo?

— Si acepto, Yoongi. — dije abrazándolo.

— Siempre te protegeré Mochi.

— Siempre te amare Min Yoongi.

Los minutos pasaron y nosotros seguíamos abrazados, cada uno habiéndoles minos al contrario, Yoongi dibujando corazones y Jimin círculos en la espalda del contrario.

— ¿Te estas durmiendo? — pregunto Yoongi sonriendo.

— Si — dije casi dormido — es muy relajante esto.

— Entonces vamos a dormir. — dijo Yoongi rompiendo el abrazo y llevando de la mano a su primer novio a la cama.

— Buenas noches Amor.

— Buenas noches Amor.

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Ese día hace tres años atrás se convirtieron en grandes amigos, y en el presente, el mismo día, se convierten en novios. Un lazo que se hizo más fuerte que el metal.

La primera cita fue el siguiente día. Yoongi estaba nervioso como la primera vez, llego una hora más temprano que lo acordado. Dió vueltas por el lugar esperando que sea la hora, pero siempre parecía que el tiempo se había detenido.
Jimin no sabía que ponerse, todo lo que tenía en el ropero ya lo había usado, prefirió ir a comprarse algo nuevo.
Le pidió ayuda a la chica que atendía el local de ropa.

— ¿Podrías ayudarme? Necesito verme bien en mi cita y no se qué ponerme.

— Claro, tienes que combinar colores.  ¿Que se pondrá tu chica? — pregunta mirando unas remeras que tenía a su alcance.

— Mi chico supongo que se pondrá algo negro. — dije sonriendo.

— Oh, entonces ya sé que puedes ponerte.

— gracias, me iré a probarlo.  — minutos después — me lo llevo.

— Que tengas suerte en tu cita.

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El tiempo se detuvo cuando vi a esa persona nuevamente.
Jimin entrando, tan elegante y hermoso al mismo tiempo. Sonrió cuando pudo verme.

— Hola.
— Hola.

Jimin se sentó delante mío. Era como si fuera la primera vez que nos veíamos, como un par de desconocidos esperando ser aceptados el uno con el otro.

— Estoy nervioso igual que la primera vez. — comento Yoongi moviendo sus manos temblorosas. — Te ves lindo hoy.

— tú igual. Pensé que te pondrías ropa negra, como siempre.  — hablo Jimin, mirando atentamente a su chico.

— Hoy es una ocasión especial, no me mires asi, me pones más nervioso de lo normal — protesto Yoongi, evitando la mirada del menor.

— ¿Por qué? Eres mi novio y puedo observarte todo lo que quiera. — dijo Jimin riendo.

— ¡Tienes los ojos muy abiertos!  Parece que me vas a comer — dijo Yoongi tapándose con el menú. — no me comas hoy, mañana tengo examen.

— Estoy examinando mi presa. — dijo Jimin divertido.

— ¡Cállate y mira que vas a comer! — dijo Yoongi sonriendo y con las mejillas totalmente coloradas.

— A ti.

— No tengo mucha carne, te morirás de hambre. — dijo Yoongi tocándose las mejillas, notando que sentía mucho calor.

— Voy a pedir algo de menú, pero igualmente te comeré Min Yoongi.

— Vuelves a decir que me comes y me voy — dijo Yoongi desafiando a su compañero.

— te voy a comer,Yoongi.

Yoongi se levantó y Jimin río al ver sonrojado al anterior.
Se fue directo al baño a mojarse la cara, estaba muy nervioso y sonrojado por todo lo reciente.
Era el mejor día de su vida, no podía creer que todo esto era real.

A Jimin le había llegado un mensaje y después otro y otro más. Empezó a tener miedo, se sentía observado, no contesto ningún mensaje y puso su celular en silencio.
Vio a Yoongi acercándose a la mesa, ya con su color natural en su cara, sonrió.

— Ya pedí la comida. — le comente.

— Genial, me muero de hambre.

— Un cocinero vendrá a buscarte.

— ¿Que? ¿Por qué? — pregunto confundió Yoongi.

— Te cocinarán en la sartén. — dije mientras reía por la cara de asustado de Yoongi.

— ¿Hoy te comiste un payaso, Min? Realmente eres caníbal.

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Almorzamos, paseamos y ya que el fin de semana recién empezaba, dormimos en la casa de Yoongi.
Los dos estábamos nerviosos, la primera vez durmiendo juntos como pareja.

— ¿Quieres ver una película? — pregunto Yoongi nervioso.

— Si, dale. — dije empezando a cambiarme.

La película era muy aburrida, era de terror y lo único que me daba miedo era cuando Yoongi movía el pie repentinamente.
Nunca lo había besado, supongo que a veces le miraba los labios sin darme cuenta.
Solo un beso en la mejilla y con eso empezó nuestro primer beso.
Yoongi se quedó sorprendido, pero después respondió, dando un beso en la boca. Uno suave y corto.

— Siento que realmente me vas a comer — dijo Yoongi divertido. — si no te como yo antes. — terminando la frase, salto sobre Jimin dandole cosquillas y pequeños besos en toda la cara.  Jimin reía y poco a poco empezó a atacar a Yoongi de la misma forma.
Nadie supo en que momento las ropas terminaron en el suelo, los dos tenían miedo, pero no hicieron nada, solo abrazándose para terminar los dos dormidos.

A la mañana siguiente, Jimin vio los mensajes que Namjoon le había mandado.

# luces muy lindo hoy, esa ropa te queda bien. Veo que estás con tu amigo
# Quiero que nos veamos.
# el viernes.