Me enamoré de quien no pensaba

Capítulo 66

Estuvimos 4 días sin hablar hasta que en el quinto día, apareció en la puerta de mi departamento
- tenemos que hablar -me dijo
- quién te dejó subir?
- Stefi. Pero me aclaró que si cuando vuelve estas llorando, se va a encargar de en alguna parte de la coreografía patearme mi órgano reproductor -dijo como si intentara recordar las palabras exactas de su amenaza, una risa quiso salir de mí pero la contuve. Me hice a un lado y lo dejé pasar.
- sentate -le indiqué y así lo hizo. Estuvimos unos segundos en silencio sentados uno enfrente de otro.
- vas a hablar? -lo desafié con mis brazos cruzados
- sí, pero esta vez necesito que me escuches
- lo voy a intentar -respondí neutra
- Lucas sabe cómo hacer para que me sienta inseguro
- no me digas -ironicé
- sí, ya sé. Es que él de verdad me pone alerta... es que una vez... -empezó a contar y lo detuve
- Lucas me contó lo que pasó -el me miró y se quedó callado unos segundos
- entonces me tenes que entender. Me dio miedo de que me pasara lo mismo. Estoy más enamorado todavía de vos de lo que estaba de esa chica -eso me suavizó un poquito el enojo- imaginate el miedo que tenía
- te entiendo. Pero eso no explica lo del boliche y no me digas que no fue nada porque se nota que fue un beso bastante...
- sí pero no sentí nada más que culpa y asco de mí mismo -miré hacia otro lado, buscaba convencerme pero no podía dejar pasar el asunto tan tranquilamente- después, quería verte desesperamente
- se notaba en tu sonrisa -ironicé nuevamente
- no paraba de pensar en vos. Ya sabes que volví desesperado a buscarte.. perdón Mica, perdoname de verdad por favor - me pidió, casi que me rogó
Lo pensé unos segundos hasta que contesté
- te perdono -el se relajó y sonrió- pero eso no cambia nada, sigo enojada y decepcionada -se quedó mirándome en silencio y yo me puse de pie- así que si no tenes nada más que decir... -dije dándole a entender que era hora de irse.
Se levantó de golpe y pegué un saltito
-sí que cambia... te amo, eso lo cambia todo -dijo jalandome hacia él, juntando su cuerpo con el mio- te amo Mica -dijo mirandome a los ojos, a centímetros de mi cara- perdoname -susurró y me besó
Quise resistirme al principio pero al minuto lo tomé del cuello acercandolo, él me levantó del piso y rodeé su cadera con mis piernas.
La discusión terminó en la cama, toda la tensión y el enojo anterior se covirtieron en deseo y pasión.

- no es justo -dije acostada a su lado con nuestros cuerpos cubiertos por una sábana- sigo enojada y mal por lo que pasó, no me lo puedo olvidar tan fácilmente
- no va a volver a pasar. De ahora en adelante tus labios van a ser los únicos que voy a besar, tu piel la única que voy a acariciar y vos sos la única a la que amo y voy a amar
- claramente ya nos arreglamos, no hace falta que sigas con tanto romanticismo -le dije riendo
- es la verdad -dijo y hubo unos segundos de silencio- querés que vayamos a algún lado? Todavía tenemos que festejar de alguna manera nuestro...
- no termines! -lo interrumpi- empiezo a pensar que cada vez que queremos festejarlo, pasa algo. Ya festejamos bastante, mejor hagamos algo tranqui -propuse y sonrió asintiendo.

En los ensayos con Agus, todo comenzó a volver a la normalidad afortunadamente. Me dieron el resultado del análisis de sangre. Resulta que tengo una fuerte anemia, si hubiese seguido así un poco más tendrían que haberme transfundido sangre. Pero por suerte, con vitaminas y cuidado empiezo a mejorar.
En unos días me voy con Agus a Chile porque él va para promocionar la peli y yo voy para seguir ensayando con él. De todas formas, creo que Agus influyó para que fuera así me despejo un poco después de los días cargaditos que tuve.
Fer baila antes que nosotros, mientras estamos allá, así que se queda.

Después de la pelea y antes de separarnos unos días, Fer y yo estuvimos más tiempo juntos que nunca. Prácticamente, vivíamos juntos. Todo fue risas, besos, amor. Lo ayudé a seguir con la búsqueda de la nueva cantante de Rombai. Le mostré videos de algunas chicas que seguía en youtube e Instagram, algunas desconocidas y otras que sí las conocía. De las que le gustaron, sólo conocía personalmente a una. Era aquella chica que conocí en el karaoke, esa simpática que vive en Entre Ríos y que es fan de Justin Bieber. Es todo lo que recuerdo, es lo que le conté a Fer de ella.

En Chile, ensayamos pero también paseamos juntos y acompañé a Agus a las entrevistas. En cada una de ellas, me miraba y me sonreía cada vez que podía. Me sentí parte de su mundo y de su vida. Eso me hizo pensar que estoy más presente en la vida de Agus que en la de Fer. Y no porque yo no quiera sino que Agus me involucra y me invita. Conozco a sus amigos, a su familia, su casa en Uruguay, a los chicos de la banda, lo acompaño a entrevistas... no puedo decir nada de eso con respecto a Fer.
Agus se aproximó a mí con una sonrisa sacandome de mis pensamientos. Lo recibí de la misma manera, sonriente
- terminé por hoy -me dijo
- bien, estuviste muy bien -le aseguré y él rió tímidamente
- bueno qué queres que hagamos ahora? -me preguntó y lo pensé unos segundos
- queres que vayamos a bailar? -le pregunté
- vos querés? -me encogí de hombros inocentemente y él rió- bueno dale, vamos entonces

En el boliche nos la pasamos bailando juntos y riéndonos. Cuando Agus tomó un poco más de alcohol, comenzó a abrazarme todo el tiempo y yo le devolvía el abrazo riéndome de su estado. También se acercaba peligrosamente a mí, si fuera otra persona pensaría que quería darme un beso pero sé que es por la confianza que tenemos, somos mejores amigos y en este momento más que nunca.

Al llegar al hotel, lo acompañé a su habitación. No estaba totalmente borracho pero sí había tomado un poco demás.
- creo que yo te tendría que haber acompañado a vos -me dijo en la puerta de su habitación
- no, yo te acompaño a vos. No hay diferencia
- queres pasar? Y me haces unos mates? -me preguntó de una manera que era difícil negarse
- esta bien -accedí y él se hizo a un lado dejándome el paso libre para que entrara. Y así lo hice.