*Depresión en los ojos azules

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{Las partes editadas presentarán un asterisco en el título}
Por alguna razón no me dejaba publicar la edición :( pero ya está resuelto.

—¡Natural!—Grité.—No tienes porque hacer esto ¡Podemos encontrar una forma de resolver esto juntos!

—Touko—.

—¡No la escuches Natural, solo quiere distraerte!—Replicó el mounstruo detrás de toda esta catástrofe.—¡Es el enemigo!—.

N solamente se quedó parado justo en medio del palacio en ruinas sin saber que hacer.

—N...—Supliqué.—Sabes que esto no es lo mejor.

—Y bien idiota, ¿Ya te decidiste que hacer?—Protestó Ghetsis.

—Pienso que... Ghetsis tiene razón, Touko.—Mencionó en un tono tétrico y escalofriante.

—Bien hecho,N—Alagó el hombre mayor.—Acaba con ella—.

—¡N!—Chillé—¡No lo hagas! ¡Aún podemos salvar a los Pokémons de otra forma!
Pero no me escuchó.
Zekrom preparó una gran bola de electricidad y la lanzó en dirección a mí, chillando por no querer morir aún.



*

*

—¡Touko! ¡Touko! ¡Touko!—Desperté rápidamente y me incorporé en la cama.—Me has asustado, creí que estabas muriendo por los gritos que pegabas.

Al observar más calmada vi como mi hermano mellizo yacía sentado en mi cama con una cara de preocupación.
—¿Te encuentras bien?—Preguntó.

—Si...no...no lo sé, tuve ese sueño de nuevo.

—¿El sueño en el cuál N enloquece y decide borrarte de la faz de la Tierra?

—Ese mismo...—Mi voz se hacía cada vez más débil.
Desde hace dos meses que Touya se convirtió en mi fiel confidente.
Es algo vergonzoso contarle a alguien sobre mis problemas, aún si es mi hermano, pero un día realmente necesitaba contarle a alguien.
No podía soportar reservarlo para mí.
Le conté todo lo que viví en mi viaje por la región, incluso le llegué a confíar mi más grande secreto.

—Aún le quieres ¿Cierto?—Exclamó devolviéndome a la realidad.

—Recuérdame el porque te conté eso.—Lo miré con una ligera sonrisa.

—Por que me quieres y soy tú hermano favorito.—Musitó con cara de Lilipup degollado.

—¡Solo tengo un hermano!—Protesté entre risas.

†•°†•°†•°†•°†•°†•°†•°†•°†•°

Se fue hace dos meses.
¡Soy una completa idiota!
¡¿Cómo putas se me ocurre,en el nombre de Arceus, enamorarme de mi peor enemigo?!
Para colmo este último desaparece de la región cual nieve en verano.
De verás que a veces me sentía como estúpida.

A veces recordaba vagamente su promesa, prometía que volvería después de reflexionar sobre todo lo que había ocurrido en relación al Equipo Plasma.
Realmente nunca lo ví como un integrante de esos malditos, siempre lo ví como un ser dulce e inocente que amaba a los pokémon y lucharía para protegerlos.

Me encontraba en casa,casi nunca salía.
Sentía como una gran ola de tristeza y depresión se apoderaba de mi lentamente.
Touya salió hace semanas a ver a su novia, que vive en Jhoto, así que las cosas por acá eran muy aburridas.

¿Desde cuándo era tan dependiente y apegada a él? La respuesta era muy simple:
Desde que Natural se fue y me hundí en mi propio ser.

Tanto Bel como Cheren trataban de animarme, me invitaban a salir, me retaban a combates, entre otras actividades que se podrían realizar con amigos.
Siempre terminaba por rechazarlos o cuando sabía que vendrían a mi casa salía por la ventana montada en Billy, mi Volcarona, para ir a cualquier otro lugar.

Promesas [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora