—¿Quién? ¿Tienes otro hermano? —inquirí con completa incredulidad.

—Es mi padre —aclaró con detenimiento e insistencia.

—¡Ah! ¿Qué hace tu padre?

Aegan soltó el tenedor, frustrado. Hundió las cejas y me dedicó una mirada dura.

—Joder, Jude, ¿qué tienes por cerebro? —me reclamó.

—Bueno, ¿y si no lo sé? —defendí.

Artie exhaló. Llevaba el cabello suelto en un genial desorden. La mascarilla que se había puesto antes de dormir le había dejado la piel tersa. Era muy bonita para estar sufriendo por Adrik. Por mi parte... no sé, tenía cara de caca recién pisada.

—Su padre es el congresista y candidato presidencial Adrien Cash —me informó ella al fin.

Waat —solté, cogida por sorpresa. Luego miré a Aegan con asombro—. ¿Tu padre es un político?

—Sale a cada rato en las noticias —continuó Artie—. Sus debates dan de qué hablar. Al parecer va a la cabeza en las encuestas.

Algo se me pegó en la garganta y tosí.

—A la cabeza —repetí entre la tos.

—¿Por qué te sorprende tanto? —inquirió Aegan, enarcando una ceja.

—Por nada, por nada —aseguré, dándome unos golpecitos en el pecho para calmarme.

—Bueno —habló él con cierta indiferencia al tiempo que se levantaba—. En unas horas vendrán a vestirlas y prepararlas. Aleixandre les dirá qué hacer antes de salir. Nos vemos al rato.

Apenas Artie y yo nos quedamos a solas, me incliné hacia ella.

—¿Un candidato a la presidencia? —solté en un susurro agresivo—. ¿Por qué diablos no me lo dijiste anoche?

Ella parpadeó con ingenuidad.

—Pensé que lo sabías. No es secreto para nadie.

Exhalé y me froté la cara.

—Dios, ¿sabrá ese hombre lo que sus hijos hacen? —susurré más para mí misma que para ella.

—No sabemos que es... eso hasta que lo veamos bien —susurró Artie, mirando hacia todos lados.

Por suerte no había nadie cerca. La terraza no era un área que requería decoración. Los invitados se concentrarían en las zonas inferiores.

—La buscaremos —dictaminé.

Artie abrió los ojos al límite y devolvió al plato la fruta que estaba a punto de meterse a la boca.

—¡¿En serio sigues con esa idea?! —murmuró con algo de susto.

—Sí, será en la fiesta —asentí—. Los tres estarán ocupados y los invitados estarán abajo, así que subiremos a buscarla en la habitación de Aegan.

Artie me miró con muchísima duda y aflicción.

—¿Y si no metemos tanto nuestras narices? —preguntó con una vocecilla de cachorro asustado.

Tuve que deslizarme con silla y todo para acercármele. Me aseguré de sostenerle la mirada para transmitirle seguridad.

—Escucha —comencé a decir en un tono muy bajo y confidencial—. Queríamos algo verdaderamente importante para destruir a los Cash, ¿no? Ese plan de dejarlo antes de los noventa días ya es una bobería. Aquí está lo que necesitamos. Ellos tienen secretos que pueden acabar con su reputación, y ahora sabiendo que su padre es quien es, se me ha ocurrido una idea para ponerle fin al asunto, solo debemos comprobar que el paquete es... ya sabes qué.

Perfectos Mentirosos © [Completa✔️]Where stories live. Discover now