Capítulo 8 | Propuesta de amor

4.1K 235 31
                                    

OCHO

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

OCHO

•PROPUESTA DE AMOR•

CLARISSA

Mis ojos deleitaban lo que sería nuestro apartamento durante esta noche, en realidad no era una pequeña cabañana como aparentaba ser desde el exterior. Tenía un aspecto rústico y moderno a la vez, pero eso si, era muy acogedor.

En la entrada se podía divisar la sala, la cual estaba repleta de almohadones combinados en tonalidades cálidas, frente a ellos se encontraba en la pared una inmensa televisión, ideal para las tardes de películas; a la derecha había un cuarto pequeño que asumo yo, era el baño; a un costado del comedor de madera, se encontraba dos puertas inmensas de vidrio que proteguían al balcón, éste tenía una preciosa hamaca colgada en una de sus paredes laterales para poder apreciar la bella vista hacia el mar.

Miré el reloj y no pude evitar sentirme extraña por la hora.

01:15 a.m

Al igual que un gato, ocupábamos horas nocturnas para podernos ver a escondidas de los demás. Es inevitable pensar como sería mi "relación" con Jake si fuera mi novio ante la sociedad. Tal vez impactaría a más de uno la noticia, y me juzgarían constantemente por el hecho de cambiar al "príncipe azul" por "el mujeriego".

─¿Qué celebramos? ─Pregunto a Jake al observar con detalle cada centímetro de la mesa.

Hay un sin número de platos cubiertos, un hermoso centro floral compuesto por claveles, velas por doquier y una enorme botella de champagne.

─Esta noche, es especial mi amor. ─Comenta Jake mientras me abraza por la espalda y me hace una silla hacia atrás para que me pueda sentar, sonrío por su actitud, sinceramente no conocía este lado de él.

Mientras cenábamos podía ver pequeñas gotas de sudor bajando por su frente, en un inicio creí que era por el calor que emanaba la habitación, pero el aire acondicionado refutó mi teoría. Cuando decidí preguntar que ocurría me miro con sus ojos abiertos como platos, seguramente creyó que no me daría cuenta ni me fijaría en cada una de sus facciones ¿Pero cómo no hacerlo? Es inevitable. En forma de respuesta sólo sonrío y segundos después, al ya haber terminado la cena, me extendió su mano para que la tome, yo sin pensarlo dos veces lo hice y me dirigió hacia un pasillo lleno de pétalos de rosas que formaban un camino, y en el fondo se podía apreciar una habitación la cual no era visible desde la entrada.

Toma la manija de la puerta temblorosamente, pero antes de girarla, agarra aire y un gran suspiro sale de él. Ciertamente esta situación me provocaba intriga y tal vez miedo, pero el estar junto a él me hace sentir segura.

Al abrirla me encuentro con una habitación enorme, un baño privado y desde ya puedo ver un jacuzzi. La cama está repleta con lo pétalos del pasillo en forma de corazón, hay globos rojos tirados en el suelo con la misma forma. Pero lo que más me sorprende es el gigantezco cartel pegado a la pared encima de la cama.

>>¿Quieres ser mi novia?<< Leo en la pancarta con la tenue luz que dispersan las velas por la habitación.

Me doy vuelta y veo a Jake arrodillado a mis pies, con una pequeña cajita en su mano la cual abre al notar mi mirada sobre él.

─Yo... ─Aclara la voz─ Para ser sincero no sé que decir, nunca he hecho algo similar y decidí no escribir nada y decirte lo que me salga del corazón. ─Pausa por unos segundos y continúa─ Antes de conocerte, antes de que nos encontráramos, mi vida no tenía sentido, era un chico más buscando experimentar cosas nuevas en personas diferentes todo el tiempo, sé que no llevamos demasiado tiempo juntos, sé que para ti esto debe ser apresurado, pero para mi no. Si hago todo esto es porque desde el primer instante en que te vi, me sentí completo, y creo que tu también lo sientes. No necesito conocerte mil años para poder amarte, porque sé que pese a todo lo que llegue a conocer de ti, seguiré amando como el primer día, y este anillo de aquí ─señaló─ es para sellar nuestro amor, para que todas las mañanas al despertar sepas que pese a las circunstancias, tu y yo, estaremos juntos. Clarissa ¿Quieres ser mi novia?

Me quedé sin palabras, totalmente callada y sin saber que hacer o decir, estaba segura de que Alan no merecía esto... pero si ya lo empecé, debería terminarlo ¿no?

─Jake, tampoco necesito conocerte mil años, porque te veo y ya siento que te conozco, claro que quiero. ─Mencioné con pequeñas lágrimas en los ojos, un detalle así me había impresionado tanto.

Alan ha tenido detalles conmigo y más grandes que lo que acaba de hacer Jake, pero por alguna extraña razón, ahora siento que este vale muchísimo más que todos juntos. Él se esforzó en hacerlo, lo hizo por mi.

¿Quién en su sano juicio no se volvería loca con algo así?

Extendí mi mano y él introdujo el pequeño anillo de corazón en mi dedo, sus manos temblaban y ayudé a que entrara, no sé como pero adivinó la medida exacta de mi dedo, encajaba perfectamente.

Depositó una de sus manos en mi mejilla y la acarició suavemente mientras que con la otra tomaba mi cintura para acercarme más a él. Despositó tiernos besos por toda mi cara hasta llegar a mis labios, allí los besos se tornaron más profundos y llenos de pasión, nuestros labios encajaban a la perfección, me atrevo a decir que fueron hechos para encontrarse y poder sellar un pacto.

El calor empezó a subir por mi cuerpo cuando sus manos plazmaban pequeñas caricias circulares por todo mi cuerpo, lentamente cada prenda de ropa desapareció de nuestros cuerpos, retrocedí algunos pasos y terminé recostada sobre la cama, con él encima viéndome fijamente, antes de que pasara a mayores, me preguntó si estaba segura, sólo lo besé como respuesta y él continuó.

No me preocupé por ningún otro detalle que no fuera su cuerpo con el mío, el simple roce de estos provocaba miles de emociones en mi interior, creía que el corazón se me saldría del pecho en cualquier momento, el tiempo en el reloj parecía haberse detenido para dejar congelado este momento en el tiempo. Jake entrelazó nuestras manos y me sentí segura ante su acto, lo hizo con cuidado y delicadeza, como si yo fuera fácil de romper al igual que un cristal. Luego de que pasara lo que tenía que pasar nos recostamos bajo las sábanas que aún tenían pétalos encima. Abrazó mi cuerpo desnudo y depositó un cálido beso sobre mi frente.

─Te amo. ─Dijo a manera de despedida antes de caer rendido.

Yo aún no podía dormir por lo que acababa de suceder...No me arrepentía de absolutamente nada, todo lo contrario, estaba feliz por primera vez en mi vida, esto era simplemente perfecto.

Si de algo estaba segura, era de que él es el indicado.

Y hoy y siempre lo será.




No olviden comentar y votar!
Estaré dedicando capítulos a las personas que más voten💕
•Nos leemos luego•

El Precio De Una Traición © |COMPLETA|Where stories live. Discover now