Capítulo 10 -La UDAV

709 27 10
                                    

Hoy es Domingo 10 de Agosto, me quedan solo dos semanas de vacaciones y tengo que aprovecharlas, claro después de los próximos tres días que me esperan con ansias. Tengo que visitar la universidad para conocer las instalaciones (lo hacen con los foráneos y yo soy una de ellos), conoceremos a algunos de los profesores y me darán mi horario, muchos  de los que se hospedaran ahí  verán su habitación, y según ésto nos servirá para convivir,  pues espero que sí, según Laila soy buena haciendo amigos así que iré con ese pensamiento.

Sobre el beso con Mason, no ha mencionado nada y yo menos por supuesto, espero que no lo haga, en serio. Hoy quedó en hacer la cena para celebrar que pronto entraremos a la Universidad, que por cierto, también es Artes, pero la carrera que yo estudiaré es  "Artes Escénicas"  y su carrera es "Artes Plásticas" lo cual agradezco mucho, aunque está en el mismo campus que yo, supongo que no compartiré clases con él, gracias al cielo.

— ¡Lydia ya puedes venir!- gritó Mason desde la cocina.

— ¡No grites! –contesté gritando — ya voy.

Entré con mi pijama ya puesta que consistía en un pantalón de seda verde claro y una blusa de manga larga  del mismo material y color, con mis pantuflas de florecitas y vi a Mason frente al horno viendo lo que estaba dentro.

— y... ¿con qué me alimentarás? -pregunté acercándome .

— Souffle -dijo sonriendo.

— ¿souffle? -pregunté y asintió — ¿Qué es eso? -pregunté sentándome  en un banquito frente a la barra.

— Sabe muy bien... en serio.

— ¿Qué es? -pregunté dudosa.

— Ya verás -contestó mientras sacaba un recipiente de muy buen tamaño del horno, los llevó a la barra y colocó uno frente a mí— ¡prueba! -dijo ansioso.

Dudé un poco, tomé el tenedor y probé un bocado — ¡oh dios mío!

— ¿Y bien? -preguntó levantando las dos cejas hacia mí.

— Está delicioso -comí mas.

Rió — Sabía que te iba a gustar

— Sabe como a pizza, pero en forma de lasagna -dije sorprendida.

— Es una receta original de mi abuela -contestó orgulloso.

— Pues me la felicitas –reí comiendo mas — aún no entiendo como es que cocinas mejor que yo.

— Es un don de familia -sonrió — ya aprenderás.

Sonreí — Sí, algún día, ahora siéntate y come conmigo.

— Como usted ordene, miss piggy.

Entre cerré los ojos — deja de llamarme así flori

— Entonces deja de decirme flori

— ¿Prefieres que te diga "floripondio" ?

Me fulminó con la mirada y reí — relájate flori, es broma.

— Y después te quejas de mis bromas –contesto comiendo.

— No  deberías comparar tus bromas con las mías.

— Está bien, pero me las pagarás – rió malvadamente.

— Ya veremos –reí y seguimos comiendo.

&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&

Simplemente confuso.Onde as histórias ganham vida. Descobre agora