Segundo portal (parte 5)

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(Sé que es la casa de Marceline y es solo para dar una idea aunque la cueva de la que hablo es mucho más extensa)

No sabia que decir, si lamentarlo o no, así que era mas preferible escucharla así que me detuve en la puerta de la casa, di media vuelta y me senté en el sillón.
que fue lo que paso?
-yo... yo estaba sola, sin nadie que me acompañe, vagando por cualquier lugar y me ocurrio lo mismo que a ti, fui acorralada por unos dragones, pero, yo ya me habia dado por muerta, pero, justo cuando se lanzaron contra mi aparecio una extraña chica de cabello rojiso como el mio con unos crandes cuernos, con la piel pálida y con una tigera partida en dos, una en su mano derecha y la otra en la izquieda y me salvo la vida.
-hekapoo.
-si, ella. A todo esto, como la conoces?
-yo.. solo tengo que derrotarla para recuperar algo que le pertenece ha una gran amiga.
-tu... tu eres Marco?
-si, acaso no te lo habia dicho?
-pero... Marco Dias?
-que si¡
-no puedo creerlo¡¡
Se lanzó encima de mi sin avisar, caí de espalda y ella cayó encima de mi
-ya¡, cállate, levántate y continua.
-lo lamento, es que no puedo creer que seas tú y por lo visto hekapoo tenia la razón.
-a... a que te refieres?
Me miró atentamente como si estuviera inspeccionando cada parte de mi cuerpo mi cuerpo, era incomodo.
-uff.
-pero, a que te refieres?
-Na... nada, no, no es nada.
-pero...
-CALLA, te... te golpearé si no te callas.
-mmm...
Me sonroje un poco, cuando ella se enfadaba es tan adorable y dan ganas de abrazarla aunque igual era incomodo ya que se parecía a hekapoo, pero... pero no quiero recordar.
-merco, oye, no me ignores y dime qué sucede.
-lo siento, es que eres muy adorable y eso me llevó a otros pensamientos, pero, no me tomes en cuenta.
-qu... qu... queeeeee??!!
Se sonrojó de un momento a otro y quedó cabizbaja contemplando el infinito, se levando te repente y me golpeó y al parecer quede inconsciente.
-auch.
Desperté en una cama algo extraña, pero, sabía que estaba en el segundo piso ya que conocía esta casa como la palma de mi mano y veo que estaba hikary recostada en la cama junto a mí y yo trataba de salir lentamente para no despertarla.
-n... no me de... dejes.
Tenía lágrimas en los ojos y me habrazo la pierna fuertemente pero... aún estaba dormida.
Fin del capítulo.
Lamento no haber subido cap, solo es que se me fue la noción del tiempo además de quedarme sin ideas pero espero que les haya gustado y gracias por apoyar la historia con sus votos.
Sin nada más que decir.
Fer se va.

En aquellos 16 añosWhere stories live. Discover now