Estoy tan excitado que no puedo esperar a quitarle la ropa, pero ella no me deja, solo me besa y me acaricia por encima de la pierna, intento mover su mano con la mía para que vaya a donde realmente interesa, pero la quita como si le diera un calambre y lo mismo hace cuando yo intento tocarle algún sitio.
- ¿Se puede saber qué te pasa? Pensaba que íbamos a follar.
- No quiero, ¿por qué no podemos simplemente besarnos y pasar una tarde juntos?
- Porque eso lo hacíamos cuando éramos novios y tú fuiste la decidiste que lo dejáramos y simplemente siguiéramos quedando para follar.
- Ya... Pero... Hoy no me apetece.
- Joder.- Me separo de ella apoyando la espalda por completo en el respaldo del sofá.
- No te enfades.
- Es mejor que te vayas.
- Ashton, podemos pasarlo bien igual, como antes.
- Hoy iba a ir de camping con mis padres y mi hermana y no fui porque tú dijiste que hoy te apetecía follar, que tenía que ser hoy.
- Me encanta saber que te tengo casi a mi disposición.- Ella pone esa voz tan sexy que sabe que me excita demasiado.
- No me tienes a tu disposición y deja de poner esa voz.
- Vamos... Ashton... Deja de estar tan enfadado.- Ella pasa una de sus manos por mi pierna, arriba y abajo.
- Para, sabes que todavía siento algo por ti y por eso te aprovechas.
- Yo también siento algo por ti...
- Tú por lo único que sientes algo es por mi polla, vete.
- Eres un gilipollas, me das asco.
- Recuerda esto la próxima vez que me llames para follar.- Ella me hace el corte de manga y sale de mi casa gritando cosas incomprensibles como una loca. De todas formas sé que mañana volverá a llamarme. Aprovecho que se ha ido para buscar mi móvil, cuando ella llegó lo deje en mi habitación sin volumen para que nadie nos molestara. Lo desbloqueo y me encuentro con casi 20 llamadas de mi hermana y unas 10 de mi madre, me pongo nervioso al instante. Llamo a mi madre primero pero no me contesta y la tercera vez que lo intento ya da apagado o fuera de cobertura.- MIERDA, JODER.- Llamo a mi hermana y por suerte ella contesta al segundo pitido.- EMMA, ¿ESTÁIS BIEN?
- Ashton...- Le tiembla la voz, eso no es buena señal.
- ¿Qué pasa?- Me siento sobre mi cama.
- Intentamos llamarte para saber si estabas bien y como no contestabas, mamá se preocupó y decidimos volver antes...
- ¿Y dónde está el problema?
- Mamá puso nervioso a papá mientras conducía, él no se dio cuenta y se saltó un stop...
- ¿Habéis chocado?
- Si...
- ¿Mamá está bien? No me contesta al teléfono.
- Si, solo se rompió el brazo.
- ¿Y papá?
- Intentamos avisarte... No cogías el teléfono...
- ¿QUÉ COÑO LE PASA?
- Ha muerto hace unos minutos... Tenía una hemorragia muy grande... Quiso que te dijeramos que te quiere. - Noto como el corazón se me para, dejo caer el teléfono al suelo, me cambio de ropa como si fuera un robot y cojo la moto de la misma forma. Llego al hospital en el que supongo que estarán y después de preguntar a varias enfermeras por fin consigo que me lo digan, estoy en el sitio correcto. Tras varios pasillos encuentro a mi hermana desesperada caminando de un lado a otro.
- ¿Dónde están?
- Ya se lo han llevado.
- Quiero verlo.
- No puedes, Ashton ya está. ¿Se puede saber que estabas haciendo para no coger el teléfono?
- Nada...- Al fondo del pasillo veo llegar a mi madre, camino rápido hasta encontrarme con ella.- ¿Por qué lo pusiste nervioso? Sabías perfectamente lo que iba a hacer hoy y que iba a estar bien.
- Nunca tardas tanto en contestar y el teléfono de casa estaba desconectado.
- Si te hubieras callado él estaría vivo.
- Ashton...
- Déjame en paz.- Me alejo de ella apretando los puños, enfadado con todo el mundo, pero sobretodo conmigo mismo.