¡FELIZ CUMPLEAÑOS!

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Hoy es un día especial, no porque se acerca año nuevo ni porque se esté cerca de la fecha de cobro. El día de hoy treinta de diciembre es el cumpleaños de TaeTae.

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Después de ser despertado por sus padres cantando "Feliz Cumpleaños ", recibir muchos besos y abrazos, y por supuesto regalos, parecía que el día de TaeHyung seria maravilloso.

El pequeño cumpleañero se pasó todo el día organizando su fiesta, queria que todo fuera perfecto para cuando llegaran sus familiares y amigos. Ayudó a armar los globos, a poner las guirnaldas, a acomodar las mesas y las sillas y por supuesto a armar las bolsitas con golosinas y juguetes para sus invitados más pequeños.

Luego de revisar que todo estuviera completamente en orden, TaeHyung fue a darse un baño para comenzar a alistarse... bueno decir que fue por cuenta propia es absurdo, ya que, sus padres debieron meterlo a bañar casi a la fuerza.

Ahora sí, Tae ya estaba completamente preparado. Tenia sus zapatos favoritos, su remera anaranjada de la suerte, el short azul que le habia regalo su abuela y un peinado con gel que según él se parecía a el de Hulk. De está manera nuestro increíble homenajeado comenzó a recibir a los invitados, quienes no podian evitar morir de ternura al ver al pequeño Tae.

El cumpleañero caminaba por la casa de un lado al otro, todos los invitados adultos querian tener un poco de su tiempo y esto hacia que él descuidara un poco a sus mejores amigos, quienes les pedian ir a jugar cada dos por tres; y eso hacía que Tae se sintiera terrible al no poder estar con todos al mismo tiempo. Tal vez si se hubiera peinado como Flash podría ir de un lado a otro más rápido.

NamJoon notó a TaeHyung un poco desanimado y decidió que debían de hacer algo para alegrar a su mejor amigo, porque después de todo hoy era su cumpleaños y el que debía disfrutar la fiesta era él, y no los invitados.

- Chicos hay que hacer una sorpresa para Tae -

- Pero ya le dimos sus regalos, Nam - Dice Jin un poco decaído.

- Si, pero podemos hacer otra cosa - Agrega un YoonGi súper consentrado - Algo que no lo olvide nunca -

- ¡Ya sé! ¡Un abrazo! -

- No, Jiminie. Eso se lo das cualquier día, tiene que ser algo especial - HoSeok descarta la idea de su amigo.

- Yo hice dibujos - Dice JungKookie.

- Eso es muy lindo, pero hay que hacer algo más especial, más... MÁS... Ya sé lo que haremos chicos. Acérquense -

Al parecer a NamJoon se le ocurrió una idea estupenda.

Luego de la reunión secreta los niños comenzaron a recorrer la casa entera. Entraban y salían de la cocina, de las habitaciones, de la casa del árbol. Al parecer la sorpresa se llevaría a cabo en el dormitorio de Tae.

El tiempo pasó y el cumpleañero no veía a sus amigos hacia hace un rato largo. Los buscó en el patio, en la sala de estar, en el comedor, pero parecia que no habia señales de ellos, tal vez se habían ido a sus casas porque él no pudo jugar a los policías y ladrones.

El muy desanimado TaeHyung vuelve al patio en donde todos los demás invitados charlaban y comían las botanas que había sobre la mesa. De repente siente que alguien lo empuja con fuerza. Al darse la vuelta ve a JungKook con una sonrisa, extendiéndole su manito para que lo siguiera.

- ¿A dónde vamos, Kookie? -

- Shhhh -

TaeHyung no preguntó nada más y se dejo guiar por el pequeño. Entraron a la casa, pasaron la sala de estar, subieron las escaleras y se detuvieron enfrente de la puerta de la habitación, su habitación. JungKook le hace unas señas para que espere afuera, mientras el más pequeño entra a la habitación.

- ¡Ahora! -

Se escucha desde dentro del cuarto, y sin esperar más TaeHyung toma la manija de la puerta y la abre con fuerza.

- ¡Sorpresa! ¡Feliz cumpleaños! - Gritan todos juntos sus amigos. Mientras le tiran ¿Porotos? Al parecer la idea de Namjoon era recibirlo como hacen con las novias en un casamiento, pero al no encontrar arroz decidieron que era mejor usar algo que sea "parecido", en éste caso resultaron ser legumbres.

Los porotos terminaron impactando en el homenajeado, haciendo que éste pidiera que dejen de lanzarselos, pero no lograba hacer que sus amigos detengan su acción, ya que les daba tanta gracia y no podian parar de hacerlo... había que admitirlo era divertido ver a TaeHyung intentar esquivar los proyectiles de legumbres. Cuando éstos se acabaron el verdadero juego comenzó. Se habían separado en dos equipos, la maknae line y la hyung line. Ambos grupos tenian sus trincheras de almohadas, cada uno en los extremos opuestos de la habitación. Así comenzó la guerra de legumbres, entre risas y carcajadas, entre dolor y lágrimas.

Ese día se convirtió en un maravilloso recuerdo para todos y un cumpleaños que TaeHyung jamás olvidaría.

Bangtan Club (BTS)Where stories live. Discover now