Capitulo 34

5.8K 321 3
                                    

Estaba recostada en la camilla, cuando veo que la puerta se abre y él aparece...

__¿Diego?- el camina hacia mí y me da un beso en la frente- Diego, lo siento ¿dónde has estado?

__Tranquila-acaricia mi cabello- hablaremos de eso luego.

Estuvimos en el área de maternidad por casi dos horas, caminar por los pasillos, pensar y moverme me ayudó bastante;  ya las contracciones eran más seguidas y más largas, pero no sentía temor, ni dolor, sólo tranquilidad y ganas de conocer a mi hijo. Estaba contenta y relajada.

Diego estaba conmigo, su presencia me hacía sentir segura y que nada malo iba a sucedernos ni a mi ni a mi hijo, dentro de estas frías salas de hospital. En todo momento estuvo conmigo, conversábamos de cualquier cosa para no entrar en pánico; nos reíamos, y así estuvimos sin darnos cuenta de lo rápido que pasaba el tiempo.

Las contracciones me vinieron cada vez más intensas. La doctora entró por la puerta y me hizo un tacto para ver la dilatación. Le pedí que no me lo realizara bruscamente, ya que había oído historias bastantes escalofriantes al respecto, pero por suerte, ni siquiera lo sentí. Estaba con 5 centimetros de dilatación.

Las contracciones ya sucedían una tras otras, yo me movía, gritaba y hervía en fuego, mientras la doctora y Diego me apoyaban con masajes y cariños que me ayudaron bastante. Estaba un poco cansada y busqué una posición para darle vida a mi hijo. Me sentía fuera de mí, agotada y ya no sabía como recibir las contracciones. Mi hijo estaba cada vez más cerca de nacer, mi cuerpo estaba exhausto. Agarré fuertemente la mano de Diego.

Después de varias pujadas salió.

Lloré de alegría y emoción... Es una situación única, apasionante, una experiencia que no se puede transferir a otro cuerpo y sólo se comprente cuando se vive.

__Es... Es una niña- dice, Diego y empieza a llorar- es hermosa.

Verlo así me hacía feliz.

__Gracias por haber permitido que yo esté presente.

__Eres su papá, te necesitaba, Lupe me contó todo.

__Hablaremos de eso luego.

__Tenemos que llevarnos a la bebé, es muy pequeña, tenemos que revisarla- dijo la doctora y salieron de la habitación. Me sentí desilucionada ni siquiera pude verla.

__Es hermosa, le avisaré a tus padres que ya nació, me besó la mano y se fue.

𝐌𝐢 𝐏𝐫𝐨𝐟𝐞𝐬𝐨𝐫✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora