Capitulo 5: "Propuestas"

216 28 11
                                    

Capitulo adelantado porque mañana tal vez no voy a tener tiempo y sé que desean leerlo jajaja 

Espero lo disfruten y así... no escribo mucho porque hace mucho frio donde vivo y solo quiero acosarme con mi pijama de stitch <3 jejeje

Voten y comenten si les gustó el capitulo.

Besos :*

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Capitulo 5: "Propuestas"

POV Peeta.

Por un momento casi olvidé lo exagerada y alarmista que puede ser mi madre. Después de mi desvanecimiento no permitió que saliera de la cama más que para lo más indispensable como ir al baño, tomar una ducha o dar pequeñas caminatas en mi habitación. Estuve recluido por casi dos semanas, gracias a la intervención de Haymitch Abernathy. Effie lo llamó para que me evaluara y aunque no tenía una fractura en las costillas, si existía un daño de consideración que necesitaba reposo casi absoluto. Me dieron justificantes para la escuela y cada tarde, Johanna me visitaba para hacer en parte, de niñera y en parte de maestra para evitar que me atrasara en el semestre.

En ese tiempo nuestra amistad se fortaleció más, pero no tanto como para atreverme a hablar de nueve de aquel beso sin aparente explicación y seguramente, si lo hubiera hecho, Jo atribuiría los hechos a una contusión en mi cabeza que me hacía distorsionar los recuerdos.

Prácticamente en esas dos semanas tuve muy poco tiempo solo, en las mañanas mamá me llevaba el desayuno y me hacía compañía hasta que era su hora de entrada, horas después llegaba Johanna para hacer tarea y no se iba hasta que Effie regresaba del hospital para cenar los tres juntos, a veces incluso Haymitch se unía al plan. Sin embargo, a pesar de tener mi mente ocupada, siempre existían momentos muertos, dejándome espacio libre para recriminarme. Es extraña la facilidad con la que uno se ve envuelto en el juego de las culpas y las miles de posibilidades que se dibujan al estar desocupado. ¿Y si no hubiese faltado a aquella clase? ¿Y si Katniss me hubiera rechazado desde el principio? ¿Y si solo me hubiera limitado a tratarla como compañera? ¿Y si me hubiera alejada antes de saberla gravedad de su situación? ¿Y si...?

A la única conclusión que he llegado con eso es que soy un cobarde. Ni siquiera soy capaz de entregar las cartas que he escrito para ella, en lugar de eso, me preocupo por guardar cada una de ellas en el fondo de mi armario, junto con la pequeña caja del regalo de la chica Everdeen. Ese regalo que tiene casi tres meses en la misma condición que Katniss lo dejó.

No hay día que no lo tome entre mis manos, aunque sea solo por unos breves minutos, sopesando la idea de por fin abrirla, sin embargo soy consciente de lo que eso significaría para mi relación con Katniss y no estoy seguro de querer dar ese gran paso.

— ¿Qué haces fuera de la cama, Mellark? Hoy es el ultimo día de tu encierro y no quiero que quieras ganar tres días más solo por jugar a esconderte— aparentemente Johanna había salido antes de lo esperado ese día y me encontró en pleno momento de autoflagelación por el pasado—. Mueve tu lindo trasero de regreso a la cama.

Puse los ojos en blanco y la obedecí, no quería que fuera con el chisme con mi madre ni con Abernathy. Por un descuido olvidé regresar el regalo a su lugar, ocasionando que mi amiga abriera demasiado los ojos por la sorpresa. El interrogatorio, sin duda, sería muy largo.

—Creo que tienes una fijación con mi trasero— intenté bromear con el fin de cambiar de tema, sin embargo su rostro me dejaba en claro que no se rendiría tan fácilmente. Suspiré pesadamente al verme vencido—. No digas nada— supliqué a pesar de que sabía que era inútil hacerle esa petición a Johanna Mason.

AyúdameNơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ