Divertida Pubertad ( Carlos de Vil )

1.3K 66 15
                                    

Imagina que ........................

Carlos tenía problemas. Y no del tipo "Voy mal en la materias". ¡Oh, como quisiera que fuera así! Prefería mil veces dejar la materias, que en el que estaba atorado realmente.

Nuestro pecoso malvado ya no era más un niño bonito de 10 años. Ahora era un guapo adolescente de catorce, y como todo jovencito normal tenía que pasar por la maravillosa etapa llamada pubertad, ese extraño y misterioso proceso en el que te conviertes poco a poco en adulto.

Cosas típicas le pasaban al hijo de Cruella, como que tenía que afeitarse un poco de vez en cuando. Su cara y su cuerpo también estaban cambiando. Su rostro dejo de tener ese aire de niño para dar paso a unas facciones más juveniles.

Oh si, la pubertad le estaba sentando bien.

Solo que Carlos no pensaba lo mismo...

Además de todos los cambios físicos incluidos en el paquete de madurar, sus sentimientos y emociones también estaban resintiendo un ligero cambio. Uno que no le gustaba para nada.

Él siempre había visto a las chicas de modo superficial. Como si fueran un árbol o una roca, algo que solamente llena el espacio. Sin embargo, ahora estaba comenzando a notar ciertas cosas que antes no.

¡Y que no quería notar!

Las chicas también estaban madurando un poco a su modo, y eso es algo que Carlos con toda su meditación simplemente no podía ignorar. Por ejemplo, comenzó a notar que Uma, con toda y su chocante personalidad, olía bien. Es decir, usaba buen perfume. Y no es como si no lo hubiera olido nunca, es solo que nunca le había prestado atención a ese detalle. ¿Y por qué ahora sí?

Claro, eso no cambiaba la opinión negativa que tenia de ella, ¡gracias al cielo!

También comenzó a ver a Evie y Mal de un modo diferente. Antes las miraba como un compañero más. Lo único que podía notar de ellas serían sus habilidades malévolas, algo que siempre admiro desde que las conoció. Pero ahora era diferente...

Comenzó a ver a ellas como lo que realmente son, unas chicas. Y unas muy bonitas, por cierto.

¡Es a lo que se refería!

Su cerebro empezaba a catalogar y a usar términos como linda, bonita e incluso hasta hermosa.

¡¿Qué rayos sucedía con él?!

Pero bueno, a pesar de que encontraba a Mal y a Evie bonitas, tampoco era un problema. Pero ahora las miraba con más cariño y consideración, como unas hermanas, más que solamente unas chicas

Pero el mayor, la manzana de la discordia de todos sus problemas como siempre, era ____________________. La chica que lo interrumpía y lo distraía de su rendimiento académico para darle un sinfín de besos en toda la cara, su tormento personal. Él siempre se había fijado en la hija de Gastón más que en cualquier otra chica que conocía. ¿Y cómo no hacerlo? Ella se daba a notar. Con sus increíbles habilidades y su sorprendente fuerza física era difícil de ignorar, más cuando una chica como ella estaba locamente enamorada de él. Pero ahora comenzaba a notarla sobre las demás no solo por sus habilidades o fuerza, si no por otras cosas.

Siempre supo que____________________  no era una niña fea. Algo dentro de su pequeño ser se lo decía. Pero ahora, no solamente podía notar que no era fea. La castaña era linda. Tal vez un poco más que linda, era bonita. Incluso hermo- ¡de eso estaba hablando!

¡Y eso no era todo!

Cada vez que miraba a otras chicas, su mente rápida y automáticamente las comparaba con ____________________  en todo aspecto, decretando que no se le acercaban ni un poquito. ¿Desde cuándo su cerebro comparaba chicas? ¿En qué terrible y monstruoso ser se estaba convirtiendo? ¡¿En Jay?! O peor aún, ¡¿en su clon?!

¡Pero eso no era lo peor!

Digamos que ya no encontraba los besos de  ____________________ tan desagradables como antes. Además, los besos de ella comenzaban a ser ligeramente diferentes. Ya no se sentían como besos infantiles, si no que eran un poco más profundos y sentimentales. Y el pecoso descubrió que no le desagradaban del todo. ¡Y eso lo asustaba! ¡Incluso un día correspondió uno sin pensarlo! Cuando reacciono y se dio cuenta de lo que estaba haciendo intento huir, pero ella no lo dejo. Estaba tan emocionada de que por fin la había besado de vuelta que no lo soltó en todo el día.

Pero lo más terrible era que cuando____________________. no estaba con él, como que la extrañaba. Es decir, si no lo asaltaba físicamente, lo hacía en su mente. Cada vez que intentaba estudiar, ella aparecía de forma inesperada. Pensamientos como: "¿Qué estará haciendo ahora?" "¿Dónde estará ____________________?" " ____________________ se miraba bien con ese nuevo vestido" "El shampoo de ella olía bien esta mañana"...

¡No podía concentrarse así!

¿Qué le sucedía? Carlos tenía miedo. No sabía cómo salir de esa.

Resuelto a ignorar todos esos cambios extraños que experimentaba, estaba decidido a huir de ellos. Los resistiría. Tendría control sobre sí mismo. Reprimiría esos pensamientos, sobre todos los de  ____________________.

Estudiaría día y noche hasta quedar exhausto, y solamente se enfocaría en ser el mejor estudiante de todos los tiempos. Nada de distracciones...

El pobre no tenía idea de que eso apenas comenzaba, y que no podía negar ni escapar de lo inevitable. El peli-blanco estaba creciendo, y sus sentimientos también. Pero él se dará cuenta tarde o temprano...

... o ____________________ lo hará, y ella se encargara de explicárselo, o convencerlo solo como ella sabe hacerlo.

¿No es divertida la pubertad?


Imaginas de Cameron Boyce ......Where stories live. Discover now