Internado De Vampiros Y Lobos *Terminada*

capitulo 2

Miré por la ventanilla del avión esperando a que despegara.

Se veían unos hombres con chalecos naranjas fluorescentes, corriendo unos carros con cosas dentro.

Siento que alguien se ubica a mi lado y me giro encontrandome con una chica mas o menos de mi edad, rubia, de mi misma altura y de ojos celestes.

Llevaba puesto un vestido rosa claro con un cinturón color marrón crema en la cintura, y una botas por debajo de las rodillas del mismo color que el cinturón.

Su celular comienza a sonar, ella lo atiende al instante llevandolo a la oreja y después de unos minutos cuelga la llamada que al parecer era con su madre, guardando el celular.

Miro nuevamente por la ventana restandole importancia, decidida a dormirme pero al momento en que hago esto, siento un toque en mi brazo y giro mirando a la chica rubia con un café en cada mano.

-¿Quieres?-me ofrece.

Yo lo acepto con mucho gusto, después de todo no había desayunado y moria de hambre.

-Gracias-le agradezco amablemente.-¿De dónde los sacaste?-pregunto mirando a los lados en busca de alguien que se los podría haber entregado.

-Acaba de pasar una chica dandole uno a todos los pasajeros-me dice con una sonrisa.3

Observo a la pareja que hay del lado contrario a donde nosotras vamos sentadas y también tienen uno.

-Oh, claro-le doy un sorbo y cierro los ojos sintiendo el agradable sabor al café.

-Soy Kattia-la escucho y la miro.1

-Bianca-le sonrío y ella asiente devolviendome la sonrisa.

-¿Vives aquí?

-Si, ¿Y tú?

-También, en realidad soy Argentina, pero cuando era niña nos mudamos aquí con mis padres-explica colocándose un cardigán color crema.

-¿Latina? No se te nota mucho.

-Si, muchos dicen eso cuando se los digo-lleva el café a sus labios bebiendo un poco.

***

Después de unas horas no tan largas, el avión aterrizó.

Sinceramente, Kattia es muy agradable, tiene buen sentido del humor.

Nos reiamos de absolutamente todo y haciamos que la gente que iba en el avión nos mire con cara rara o se riera con nosotras.

Creo que hace mucho no me reía de nada y menos a carcajadas, supongo que ya se me estaba haciendo costumbre sonreír sin mostrar los dientes, o directamente no hacerlo, pero con Kattia es imposible no reírse y creo que le agradezco, porque por un rato me olvidé de todo.

Gracias a ella, las horas habían pasado demasiado rápido.

En este mismo momento nos encontrábamos dentro de el aeropuerto de Washington y la verdad es que es casi del mismo tamaño que el de California, en donde nosotras vivimos.

-¿Vamos por batidos? Tengo hambre-dice tocandoce el estómago.

-Vamos-sonrío como de costumbre.

Nos sentamos en una mesa y esperamos a que la chica que nos hacía el pedido venga a por estos.

-¿Y bien? ¿Dónde irás ahora?-preguntó, pero llego la mesera interrumpiendo mi respuesta.

-Hola chicas, soy Vivían y les voy a tomar su pedido, ¿Qué desean?-dijo con una sonrisa de oreja a oreja.

Es bastante amable, primera mesera que no es como la típica que tiene cara de pocos amigos y no tiene ganas de nada.

-Un batido de dulce de leche por favor-pedí y Vivían lo anotó en su libretita.6

-Lo mismo-dijo Kattia.

La mesera repitió la misma accion que conmigo y luego nos sonrió.

-¿Algo para comer?-nos preguntó, nosotras solo negamos con la cabeza. -Ok, ya les traigo los batidos chicas-dijo y desapareció por detras de la caja en donde se supone que se preparan todos los pedidos.

-Mis padres se irán de viaje por negocios un buen tiempo y yo a un Internado-Mentí, no estaba del todo confiada como para decirle la verdad y contarle toda mi vida.

Kattia levanta la mirada hacia mi rápidamente y me mira sorprendida.

-¿IDVYL?-pregunta y yo asiento viendo como una sonrisa se le forma en la cara al verme.

Al parecer es el único Internado cerca de aquí.

-¿También te dirijes ahí?-le pregunto.

-Si, voy a ese Internado-me dice con un tono emocionante.2

-Genial.

-Exacto-sonrie aún más si es que es posible.

En ese momento vuelve Vivían, pero esta vez con los batidos y los deja en nuestra mesa con la misma sonrisa con la que nos resivió.

-Que lo disfruten.

-Gracias-decimos al unísono Kattia y yo.

-De nada chicas-dice esto último y la vemos irse caminar nuevamente detras de la caja.

Nos quedamos hablando un rato más después de terminar los batidos, hasta que vimos que ya había pasado una hora y nos vimos obligadas a irnos del lugar dejándole propina a la mesera.

Subimos al Taxi y miramos al "Sexy chófer", como me susurro Kattia al momento en el que lo vio.3

Parece que se da cuenta que lo está violando con la mirada por lo que se da vuelta y nos mira.

Sube al Taxi y se ubica en el volante para luego mirarnos por el espejo retrovisor.

-¿A dónde desean ir?-pregunta con su voz gruesa.

-Llévame a donde quieras, me conformo con eso-susurra Kattia.4

La miro con los ojos abiertos como platos sorprendida y le pego un codazo.

Sulta un risita y el chico niga sonriendo.

-Hacia el Internado IDVYL por favor-el chico asiente mirandome con una sonrisa y pone en marcha el Taxi.

-Calma tus hormonas-le susurro para que el chico no pueda escuchar.

-Si las tengo, hay que usarlas para algo.

Me río despacio por su comentario y veo como ella extiende su mano hacia el hombro del taxista.

-¿Podrías poner la radio por favor?-le pidió.

Ay por Dios, lo que me espera.

-Si, no hay problema-respondió el taxista encendiendo la radio como Kattia le habia pedido y dejando sonar "Closer de The Chainsmokers y Halsey"14

-No puede ser, amo esa canción-habló Kattia al momento en que empezó a cantar.+

-Yo igual-dije siguiendola y viendo al chico al volante reírse.

Este viaje definitivamente tampoco sería aburrido.

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