¿Cómo conocía a ese mocoso de 15 años? Bueno, es una historia larga. Además, vivía con Tae y Yoongi, de algo debía seguir siendo su mejor amigo. Su vida social no era tan mala, ¿bien?

—Ya era hora —el lindo castañito se revuelve el cabello, quitando los pétalos de flores que cayeron del árbol que intentó escalar por si Jimin no le abría—. ¿Cómo está mi hyung favorito en todo el mundo?

—Si Yoongi te escucha decir eso te deshereda. Tu hermano se toma en serio todo lo que dices —ríe bajo Jimin, cerrando la puerta detrás suyo cuando Jungkook se encuentra ya dentro—. Pero, respondiendo a tu pregunta, me encuentro tan maravillosamente mal que ahora mismo se me da por ir a buscar unos happy brownies de chocolate. Mm, delicoso, ¿no?

Jungkook niega, mientras se saca su abrigo—. Jimin, ¿otra vez?

—Todas las veces, Kookie —se deja caer en el sillón, cansado. Ya era muy obvio hasta en el significado de sus gestos y ojitos rojos que se cargaba—. Solo viene a mi mente y... ya me encuentro llorando.

—Oh, entonces no querrás ver esto...

Jimin alza la cabeza de golpe y se queda observando curioso al menor.

—¿Qué cosa? —ve al menor sonreír nervioso, pero se nota la pizca de molestia en un pobre intento de disimularla—. Kookie, ¿sucede algo?

El castañito se sienta a su lado y lo abraza de costado. A pesar de la clara diferencia de edad, Jungkook era más alto y fuerte que Jimin. Cualquier pensaría que Jungkook era mayor; de todos modos, era suficiente con tener la certeza de que podría proteger a su hyung y a todas las personas que amaba.

Pero no se creía apto para ser de consuelo esta vez.

—Yoongi-hyung y Tae salieron de casa muy temprano y me tocó limpiar la casa —empezó, manteniendo una de sus manos Jungkook dentro de su chaqueta—. Tuve que entrar a la pieza de Tae y barrer, pero me distraje un poco y terminé jugando en su play en vez de limpiar. Cuando quise levantarme... —saca una pequeña cajita de terciopelo, decorado con bordes dorados. Jimin se espera lo peor— Sentí esto debajo de la almohada.

No es necesario abrirlo. No es necesario llorar más, no es necesario estar triste, pensó Jimin. Pero, tampoco es necesario que se esté diciendo todo eso, ¿no? Su mismo llanto lo confirma, segundos después de que el objeto es depositado en sus manitos.

—Hyung, podemos... deshacernos de esto. Podemos desaparecerlo. Nadie lo sabrá —Jimin acaricia la cajita con sus deditos, perdido en su mundo—. Sé que no te gustaría que sucediera, solo pod-

—Ella no lo tendrá —abre la cajita, sus ojos admirando en silencio cada hermoso detalle del anillo. El diamante contrastando con los bordes plateados de este mismo, tan pequeño, tan delicado a simple vista. Como si estuviera hecho a su medida... aunque sabe que no es así—. E-Ella no se merece esto, ella...

Una lágrima cae sobre el anillo, mientras lo saca con cuidado de la caja y procede a llevarlo a su dedito anular.

—Hyung, no hagas eso, te sentirás peor —murmura Jungkook, preocupado, acariciando la espalda del mayor. Pero este no lo escucha y solo se pone el anillo, que encaja perfectamente—. Hyung...

—P-Parece hecho a mi medida, Jungkook. Realmente no lo comprendo —solloza, cerrando su manito en un puño y ocultando su rostro en el cuello ajeno cuando el menor se compromete a recibirlo en sus brazos—. ¿Por qué ella y no yo? ¿Por qué?

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Jun 04, 2018 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Hey! This is my ring ♡ Vmin OSWhere stories live. Discover now