7- Tú decides... te vas o te quedas.

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Un mes desde mi accidente y Alec no se separaba de mí para nada. Mis padres cuando se enteraron de mi accidente en vez de preocuparse me regañaron, yo solo los mire con el ceño fruncido, me levante y salte hasta las escaleras ellos no intentaron ayudarme y yo casi me arrastró por las escaleras.

Cuando ya no estuve a su vista, Alec apareció y me miro con… ternura, si, Alec me miro así y me cargo. Siempre estaba listo con todo, pero también era muy puntual con los medicamentos.

-Es hora-

-¿Qué? Pero si ya me la tome-

-Esa fue la de inflamación, te toca la de dolor- Alec me dio la pastilla y un vaso de agua. La tome con un sorbo de agua.

-Gracias Alec, por estar conmigo y no dejarme como mis supuestos padres-

-No digas eso, tú les importas claro que… a su manera, pero les importas- yo solo asentí.

-Aun así, gracias-  le dije entre bostezo.

-De nada… eres importante y…- ya no lo escuche, me quede dormida, odiaba las pastillas por esto.

Cuando desperté era de noche. La luz de la luna entraba por mi ventana, tenía un poco de calor, me levante como pude y fui hacia la ventana 'saltando'. La abrí y un soplo de aire con un olor a canela y Fresno llego a mí.

-No deberías estar levantada-

-Solo quise abrir la ventana. Tenía calor-

-Bien, ya lo hiciste ahora vuelve a la cama-

-Si señor- Alec solo rio musical mente.

 Ya me  había acostumbrado a Alec, todo este tiempo que pasó junto a mí aclare todo. No solo me había enamorado de un personaje, sino que me enamore de Alec Vulturi y no del personaje.

No resulto ser tan malo como todos pensaban y pensándolo bien, tenía que hablar con él de una vez.

 
-Alec, hay algo que te tengo que decir-

-Adelante-

-Yo… encontré como regresarte-  se me quedo viendo no supe descifrar que pensaba.

- ¿Estás segura?-

-Sí, lo encontré el día que regresamos del centro comercial-

-Bien-

-Ahora queda en tus manos, tú decides… te vas o te quedas-

 
Sabía cuál sería su decisión pero aun así tenía una pequeña esperanza. Sabía que terminaría doliéndome.

La posibilidad de un error... ¿Alec Vulturi en mi cuarto?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora